La semana pasada fue realmente intensa para los protagonistas de ‘La Moderna’. La boda de Matilde e Íñigo no salió, desde luego, como esperaban, ya que todo acabó en tragedia por la intervención de Carla. Además, don Fermín se encuentra entre la espada y la pared económicamente, y Marta se ha enfrentado a un importante dilema.
No hay episodio de ‘La Moderna’ que no nos deje con la boca abierta. A lo largo de los meses que lleva en emisión, la serie de TVE ha demostrado saber cautivar por completo a los espectadores. Resumimos lo ocurrido en anteriores episodios y avanzamos detalles sobre el capítulo de esta tarde.
‘La Moderna’: todos lloran la muerte de Pascual
En anteriores episodios de ‘La Moderna’ vimos cómo Pascual fallecía a causa de una crisis provocada por su enfermedad pulmonar. Algo que podría haber evitado Carla, que lo presenció todo con una sonrisa, negándose a darle la medicación que necesitaba para salvarse.
Ante esta tragedia, Íñigo decidió aplazar su enlace con Matilde por respeto, pero entonces ocurrió algo inesperado. Descubrió un diario de Pascual donde había dejado escrito la enorme ilusión que le hacía que Íñigo se casara con el amor de su vida. Por ello, la pareja decidió retomar sus planes.
Sin embargo, Matilde le puso una condición a su prometido: que le permitiera terminar sus estudios. Una vez se haya casado, no podrá seguir trabajando en La Moderna, y quiere tener opciones abiertas.
A todos les hizo una enorme ilusión la noticia de la futura boda menos a Carla. Cuando Íñigo habló con ella para explicarle que se iba a casar y que no debía seguir insistiendo en reconquistarlo, Carla le rogó que se quedara con ella. Ante su rechazo, enfurecida, recurrió a Aguirre para pedirle que hiciera asesinar a Matilde a cambio de acostarse con él. A Aguirre le sedujo la propuesta, pero no le dio una respuesta clara en ese momento.
Mientras tanto, pudimos ver cómo Jacobo seguía secuestrado por Carla y se desesperaba tratando de romper las cadenas que lo mantienen apresado.
Quien también tiene problemas es don Fermín. Se ha quedado en la ruina tras perder una importante suma de dinero en una partida de cartas contra Aguirre. Desesperado por recuperar su dinero, decidió organizar una nueva partida de póquer. El propio Aguirre le aconsejó que no siguiera jugando con ello, pero finalmente don Fermín decidió llevar a cabo una partida durante la boda de Matilde e Íñigo.
Por su parte, Luisa volvió de Barcelona tras someterse a una exitosa operación para solucionar sus problemas de ceguera. En cuanto a Laurita, una empresa de lácteos la contrató para que llevara a cabo sus campañas publicitarias. La muchacha le propuso a don Fermín anunciar La Moderna en el cine, pero él alegó que era demasiado caro.
