Tal vez no hayas escuchado nunca hablar de la dieta de la bella durmiente, aunque es una propuesta que existe desde hace décadas. No es exactamente una dieta, ya que no ofrece recomendaciones específicas en cuanto a menús y alimentos permitidos y prohibidos. El mecanismo es muy fácil: mientras duermes, no comes. Así que lo que se prescribe es una buena dosis de cama. Algo así como esos días, en vacaciones o fin de semana, en los que dormimos hasta tarde y nos saltamos el desayuno, pero extendido durante más horas. Realmente funciona, porque mientras dormimos, el cuerpo sigue necesitando consumir calorías para absorber nutrientes, y por lo tanto se va a perder peso. Se dice que Elvis Presley practicaba esta dieta para perder peso en los años 70.
3PROBLEMAS DE LA DIETA DE LA BELLA DURMIENTE
Las contraindicaciones de esta dieta en su vertiente más extrema son evidentes. En primer lugar, está el tema de las pastillas para dormir, que para estos casos se trata de benzodiazepinas que, si bien son muy efectivas, también pueden causar dependencia. Esto quiere decir que al final el cerebro no será capaz de inducir el sueño de forma natural y además se irá creando un límite de tolerancia y cada vez harán falta dosis más altas. En segundo lugar, está el detalle de que si dormimos 20 horas cada día, además de necesitar vacaciones, dejamos de tener vida. Adiós a la vida social, al ocio, a pasar tiempo con los nuestros. Y finalmente hay que mencionar el efecto rebote, que se producirá sí o sí, a menos que este plan de choque no venga acompañado de un cambio de hábitos que incluya una alimentación saludable y una rutina de actividad física.
