Se acerca la lotería de Navidad y muchos españoles hacen cola para comprar un décimo. Estamos en tiempos difíciles y muchos confían en que un premio de este tipo es lo que necesitan para salir de este bache. A pesar de que las posibilidades son ínfimas, la ilusión nunca se pierde. Si ganas, aparentemente te solucionas la vida y si pierdes tan sólo habrás perdido el precio del boleto.
Eso sí, que te toque el premio no siempre es una garantía de solucionarse la vida. De hecho, vamos a ver algunos ejemplos de ganadores de lotería arruinados, algunos de ellos españoles. Estas personas no solamente no consiguieron mejorar su vida, sino que todo empeoró cuando fueron millonarios. Además, al final explicaremos por qué esto ocurre y cómo es más habitual de lo que imaginas.
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Manuel Calvo “O Millonario” acabó arruinado después de ganar la lotería

El primer caso es el de Manuel Calvo Vaz, un empresario que ganó 9 millones de euros en La Primitiva. Esto ocurrió en el año 2003, ocurriendo cuando su familia estaba en un momento económico difícil, pues el bar que regentaba Manuel, heredado de su padre, no estaba funcionando bien.
Después de eso, su estilo de vida cambió, ya que le empezaron a llamar “O Millonario”. En lo personal se compró un Ferrari y reformó su casa hasta que se convirtió en una mansión. En lo profesional, montó una empresa relacionada con el transporte, teniendo 20 vehículos y 25 empleados trabajando para él. Eso sí, la empresa no fue bien y Manuel perdió miles de euros.
Después de eso, intentó recuperar su dinero de la forma que lo ganó la primera vez, es decir, comprando loterías y jugando en el casino. Como la suerte solamente llega una vez, no consiguió recuperar el dinero. Finalmente, todo acabó de la peor manera y acabó suicidándose en enero de 2009.
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El portugués Luis Lopes perdió casi todo el dinero del Euromillones

El sorteo del Euromillones es el que más dinero da en Europa, repartiendo una cantidad tan elevada que parece que toda tu familia y varias generaciones tendrán la vida resuelta para siempre. Uno de los afortunados que ganaron la lotería en este premio fue el portugués Luís Lopes, cobrando 8 millones en año 2009. En concreto, cobró un premio de 50 millones con varios amigos, repartiéndose el dinero entre ellos.
Luis Lopes decidió dejar su trabajo y vivir de las inversiones, aunque no le fue nada bien. Ahora mismo no tiene apenas dinero y casi no le queda nada de esos 8 millones. Según cuenta, todo fue culpa de su abogada, la cual supuestamente le pidió dinero alegando que era para impuestos y multas, pero fue para estafar. Luis se dio cuenta de esta supuesta estafa cuando le dijeron que tenía una deuda con Hacienda.
Eso sí, su abogada ha señalado que esto es falso y que es una excusa para no tener responsabilidades. Asimismo, le reclama más de 30.000 euros en honorarios. Por su parte, Luis reclama medio millón de euros. Ahora mismo, todo está en manos de la justicia, la cual decidirá quién tiene razón.
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El caso de Francisco Guerrero, un millonario ganador de lotería arruinado por el banco

Francisco Guerrero ganó 6,5 millones de euros en la Bonoloto del año, ganándolo el 14 de diciembre de 2005, lo que parecía el mejor regalo de Navidad. Como muchos ganadores de este tipo de premios, decidió confinar en el banco e invertir su dinero. Francisco no sabía mucho de inversiones, así que habló con un empleado del Banco Santander, invirtiendo su dinero en productos financieros que acabaron siendo tóxicos.
El problema es que Francisco perdió absolutamente todo lo que ganó, sin llegar a gastar un solo céntimo del premio. Después de esto, empezó un calvario judicial, llegando a recuperar una parte del premio, pero muy lejos de los 6,5 millones iniciales. Por si fuera poco, señala que los juicios y los productos tóxicos le generaron deudas, las cuales acabaron por llevarse todo el dinero que le había devuelto el banco.
Además, tiene depresión y no pudo pagar la hipoteca de su propia casa. Francisco asegura que no fue a la escuela y no entendía lo que le estaban ofreciendo, pues él pensaba que era un plazo fijo, pero era un producto de alto riesgo. En su caso, el premio le ha generado más desgracias que alegrías.
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Jake Whittaker es el mayor ganador de loterías arruinados

Todos los premios de lotería que hemos visto antes se quedan cortos en comparación al de Jake Whittaker. A Jake le tocaron 315 millones de dólares, que serían al cambio unos 280 millones de euros, en las loterías de Estados Unidos, la llamada Powerball. Esto ocurrió en el año 2002 y cambiaría la vida de Jake para siempre.
En su día, esta fue una cantidad de récord. Jake ya era un hombre rico, con unos 17 millones en patrimonio neto y una empresa solvente, pero este dinero le hizo serlo aún más. El problema es que empezó a gastar mucho dinero en clubes de baile exóticos, además de llenarse de falsos amigos que solamente querían su dinero. Además, atrajo la atención de ladrones que se llevaron su dinero, pero esto no es lo peor.
Lo peor fue la muerte de su nieta y su novio, una muerte indeterminada en el caso de ella y una sobredosis de droga en el caso de él, aunque ambos consumían. La droga la compraban con el dinero que le daba su abuelo, una cifra que ascendía a más de 2000 dólares semanales.
Finalmente, 4 años más tarde de haber ganado el premio, Whittaker acabó arruinado, perdiendo todo el premio, así como el patrimonio de más de 15 millones de dólares que había acumulado en los años anteriores. Además, acabó con deudas y también perdió a su hija de 42 años en el 2009. Finalmente, falleció en el año 2020 a los 72 años después de una enfermedad.
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El 70% de los ganadores de lotería se lo gasta todo en los primeros cinco años

Puede parecer que todos los casos de ganadores de premios de loterías arruinados son casos aislados, casos de personas que no han sido responsables y que eso no ocurre. Sin embargo, en realidad sí que hay un gran porcentaje de personas que se quedan sin dinero. En concreto, el Fondo Nacional para la Educación Financiera o NEFE menciona que el 70% de los ganadores se lo gasta en menos de cinco años.
Según indican los expertos, esto se debe a las grandes emociones del premio, las cuales provocan que se tomen decisiones irracionales y con exceso de confianza. Digamos que ese exceso de fortuna da una falsa seguridad, la cual hace que se sea menos responsable.
Asimismo, también indican que se debe al desconocimiento financiero, especialmente si viene de una familia de bajos recursos (aunque hay casos como el de Whittaker que ya eran ricos) . Al obtener el dinero sin esfuerzo, no se le otorga el mismo valor que el que se gana trabajando. Además, estas personas se llenan de “gorrones”, pues todos sus amigos y familiares quieren obtener dinero de forma rápida del premiado.













































