Si hay algo que da vidilla a tantas recetas y platos, son las salsas, y más a los tacos. Por algo se dice lo de «estar en su salsa» o esta persona «es la salsa de todos los platos», en referencia a que da alegría y color. En lo culinario también, pero sobre todo lo que importa: sabor y el toque maestro en muchos casos que dan al plato su condición de diez.
Pero, ¿cuáles son las mejores salsas para uno u otro plato? o mejor dicho ¿qué salsa casan con cualquier receta de tacos? Pues te lo contamos para así tener no uno si varios comodines que te valen para todo y llevan esta delicia mexicana a lo máximo, o implementar en otros clásicos como los nachos, más allá del guacamole.
UNA BASE PARA PREPARAR CUALQUIER SALSA DELICIOSA PARA TUS TACOS

Como la pizza, que tiene una base, una salsa perfecta también la tiene, aunque luego las variaciones creen diferentes versiones, como las notas musicales y las melodías. Para hacer una buena salsa te basta con 4 pilares: la base vegetal, un medio líquido, el chile y los aromatizantes. En la cocción y licuado en crudo también se consiguen variantes, con un sabor diferente. Vamos a concretar cada uno de ellos…
QUÉ LLEVA CADA UNA

Normalmente lleva tomate, jitomate o miltomate. Se complementa con cebolla y ajo para potenciar el sabor.
En cuanto al medio líquido, el caldo de pollo es el más habitual, si bien vale también el agua o el pulque, que se usa para hacer salsas borrachas.
Los chiles: por su composición y sabor, es el que prima. Puedes usar cualquiera, si bien es recomendable el serrano, cuaresmeño o jalapeño en el caso de salsa verdes; en las rojas, el guajillo, chipotle, mora y de árbol.
Para aromatizar y dar sazón te recomendamos sal de grano y hierbas de olor como cilantro y hoja santa.
Vamos con cada una de las salsas para tus tacos…
SALSA VERDE CRUDA PARA TACOS DE CARNITAS

Necesitas un cuarto de miltomate, media cebolla, media taza de caldo de pollo, dos dientes de ajo y dos chiles serrano, una hoja santa, un puñado de hojas de cilantro y una cucharada de sal de grano.
Para prepararla es muy sencillo y rápido: solo tienes que lavar y pelar los miltomates, licuar todos los ingredientes hasta que tome una consistencia espesa y servir.
LA VERDE TATEMADA

Es ideal para enchiladas y chilaquiles. Ingredientes: media kilo de tomates, media cebolla, dos dientes de ajo, una taza de caldo de pollo, un puño de hojas de cilantro, una rama de epazote, dos chiles serrano y sal de grano.
Para hacerla, cubres un sartén con papel aluminio y calentar a fuego alto con un poco de aceite. Luego cortas los tomates por la mitad, igual que la cebolla, el ajo y los chiles. Lo licuas junto con el caldo de pollo, el cilantro y el epazote, lo sazonas y lo pones de nuevo a fuego bajo en una cacerola. Si se va a usar para chilaquiles o enchiladas, agregas una taza de agua más y rectificas sazón. Dejas hervir y listo.
SALSA ROJA PARA TUS TACOS

Vamos con las variantes rojas. La primera es con chile morita, que pegan de miedo en los tacos de cecina, longaniza y chicharrón. Requiere de tres jitomates, media cebolla, dos dientes de ajo, un chile guajillo, dos chiles morita, media taza de caldo de pollo y sal.
Cubres de nuevo una sartén con papel aluminio y calentar a fuego alto con un poco de aceite. Cortas los jitomates, la cebolla, el ajo y lo asamos. Mientras, hidratas en agua caliente los chiles y quitas las venas, semillas y tallo. Lo licuas y sazonas antes de servir.
LA VARIANTE DE CHILE DE ÁRBOL

Es otra forma de una salsa ideal para los tacos que va bien la versión al pastor. Los ingredientes son ocho chiles de árbol secos, asados sin rabos, dos chiles guajillo grandes, asados sin rabos, semillas ni venas, tres jitomates, un tercio de taza de agua y sal de grano.
Preparación: lo habitual del primer paso con la sartén, cortas los jitomates, la cebolla, el ajo, asamos y remojas los chiles en agua durante 20 minutos. De esta manera consigues que se hidraten y así se muelen mejor. Licuas todo durante dos minutos y sazonas.
LA TRIUNFANTE EN TACOS: SALSA DE HABANERO

Como su nombre indica, requiere de seis chiles pero habaneros, dos tomates verdes, media cebolla, dos dientes de ajo, media taza de jugo de naranja agria, sal, una pizca de orégano y tres cucharadas de vinagre blanco.
Para la elaboración, el primer paso es el de siempre con la sartén y el aluminio, asas los chiles, los tomates, la cebolla y el ajo, quitas las semillas y venas a los chiles y licuas todos los ingredientes.
LA SALSA PICO DE GALLO

Finalmente te presentamos la salsa pico de gallo, perfectos para molletes. Necesitas dos jitomates, media cebolla, dos dientes de ajo, una ramita de cilantro, dos chiles serranos, una cucharada de vinagre blanco y otra de aceite de oliva, y sal de grano.
La elaboración es muy sencilla: picas en cubos pequeños y del mismo tamaño el jitomate y la cebolla, así como el chile, los ajos y el cilantro. Agregas el vinagre y sazonas con sal de grano. Terminas con el aceite de oliva.