La fruta que debes tomar para que hígado esté en perfecto estado

El kiwi, también conocido como la grosella china, es una fruta popular que está cubierta de una piel característicamente peluda. Probablemente reconozca el kiwi como la sabrosa fruta de pulpa verde vibrante, centro blanco y semillas negras que a menudo se cuela en las ensaladas de verano. Pero, ¿sabía que el kiwi es una fruta que favorece la salud y que incluso puede contribuir a revertir la enfermedad del hígado graso? A continuación, hemos recopilado los principales beneficios del kiwi, y por qué debería comer también la piel del kiwi.

La piel del kiwi triplica el contenido de fibra

La piel del kiwi triplica el contenido de fibra hígado

El kiwi contiene fibra soluble e insoluble. La fibra dietética soluble se disuelve en agua y puede ser digerida, mientras que la fibra insoluble pasa por el tracto digestivo con muy poco procesamiento. La fibra dietética que se obtiene del kiwi es casi tres veces mayor cuando se come la fruta entera, incluida la piel del kiwi. Además, el rico contenido en fibra que aporta la piel de un kiwi ayuda a la pérdida de peso y contribuye a reducir la presión arterial y para el hígado.