El cáncer testicular, como su propio nombre indica, ocurre en los testículos. Estos están dentro del escroto. Unos saquitos de piel que están bajo el pene. La función de los testículos es importante, ya que se encargan de crear los espermatozoides.
Tan solo el 0,5% de los cánceres en los hombres son de este tipo. Este cáncer no entiende de edades, puede sucederte con 14 años o con 45.
Por suerte, el cáncer de escroto es fácil de tratar, pero siempre tienes que estar atento a las señales que te mande tu cuerpo. El principio del cáncer testicular es con un descenso de espermatozoides sanos. El testículo, debido a las células cancerígenas, comienza a fabricar espermatozoides inmaduros.
No se conoce por qué se produce el cáncer de testículos o cómo las células germinativas empiezan a transformarse en anormales. Pero con una simple prueba de ultrasonido es fácil de diagnosticar.
Te comentaré algunos síntomas a los que tienes que estar alerta y si los tienes debes acudir a tu médico.
Bulto en los testículos
Como en cualquier otra parte del cuerpo, tener un bulto o un agrandamiento es necesario observarlo y acudir al médico para que lo observe.
La aparición de un bultito en un testículo es, la mayoría de las veces, el primer síntoma de cáncer testicular. Se trata cuando uno de los dos testículos tiene como una masa, al palparlo puedes notar el agrandamiento.
Ten en cuenta que el cuerpo humano es asimétrico. Esto significa que tienes un testículo más grande que otro, al igual que una mano o un seno. Conoces tu cuerpo y sabes el tamaño de tus testículos. En ocasiones, el bulto debido al cáncer puede doler, pero en la mayoría de los casos no sientes nada.
Pubertad temprana
Los testículos contienen células Leydig y cuando el tipo de cáncer testicular afecta a estas células pueden producir andrógenos que varíen la «evolución normal». Es decir, si el cáncer afecta a estas células puede provocar una pubertad antes de tiempo.
Los andrógenos del cuerpo es la hormona que se encarga de la barba o la voz y si se ven alteradas puede ser que a un niño de catorce años le salga barba o crezca demasiado rápido.
En los hombres de edad adulta este síntoma puede ser que no lo noten porque ya se han desarrollado, pero en los niños sí. Este es un cáncer benigno. Pero aún así hay que tratarlo.
Líquido en el escroto
Puede ser que notes que el escroto te pesa más de lo normal o que tienes una especie de líquido dentro de él. Recuerda que el escroto es la piel que cuelga debajo del pene en donde residen los testículos.
En algunas ocasiones esto va acompañado del crecimiento del pecho, pero ya lo trataremos a continuación.
El líquido y la sensación de pesadez sucede porque debido al cáncer testicular la hormona Beta-Gonadotropina Coriónica está aumentando sus niveles. Esto tan solo les pasa a los hombres.
Molestias en el escroto
Que tengas dolor en el escroto puede sucederte a cualquier edad, desde bebé hasta cuando eres un anciano. Los testículos, como ya sabrás, son muy delicados y cualquier golpe te hace ver las estrellas.
Cuando debes de preocuparte si tienes dolor en el escroto es en los siguientes casos:
- El dolor es muy intenso y no cesa.
- Si el dolor va acompañado de vómitos y o fiebre.
- Si tienes en la zona del perineo ampollas rojas.
- Si te cuesta respirar.
- Si estás confuso o mareado.
Agrandamiento en las mamas
Como ya te dije antes, las células germinales que se encargan de los aspectos masculinos pueden llegar a alterarse y hacer que el pecho se te agrande o que tengas más sensibilidad en las mamas.
Son raros los casos en los que el cáncer testicular provoca este síntoma. Esto es debido a que de nuevo la hormona Gonadotropina coriónica entra en juego y estimula el crecimiento de los senos porque funciona de forma anormal.
Las células Leydig pueden producir en vez de testosterona estrógenos, que son las hormonas sexuales femeninas y hacer que te crezca el pecho y que no tengas ganas de mantener relaciones sexuales.
Distintos dolores
Existen distintos dolores comunes con otras enfermedades que pueden ser el resultado de tener cáncer testicular. Como, por ejemplo:
- Dolor en la parte baja de la espalda: Esto se debe a que el cáncer se ha extendido a los ganglios linfáticos.
- Dolor en el vientre: De nuevo los ganglios linfáticos son los responsables de esta dolencia. Los que están en la parte trasera del vientre se han agrandado o el cáncer se te ha extendido a la zona del hígado.
Cuando el cáncer se te ha propagado al cerebro pueden sentir grandes dolores de cabeza, mareos o confusión.
Si te duele mucho el pecho, te cuesta respirar, tienes mucha tos e incluso con restos de sangre, puede ser debido a que te esté afectando los pulmones.
Factores de riesgo
Aunque no se sabe exactamente a qué es debido este cáncer, sí existen una serie de factores de riesgo, como son:
- Cuando naces con un solo testículo porque el otro no ha bajado. Si es tu caso tienes más probabilidad de sufrir cáncer testicular. Igual sucede si te han bajado el testículo mediante cirugía.
- Si padeces el síndrome Klinefelter, el del doble cromosoma X en varones, o si alguno de tus testículos no se ha desarrollado de forma normal.
- Por cuestiones hereditarias. Es decir, si en casa alguien ya ha sufrido este tipo de cáncer las posibilidades suben.
- Según la edad. Este cáncer ataca a personas de 15 a 35 años casi siempre, pero realmente puede pasarte en cualquier etapa de tu vida.
- Este cáncer es más común en los hombres de raza blanca que en los afroamericanos.
Examinarte
Ante cualquier duda debes acudir a tu médico, pero siempre es aconsejable saber mirarte tú mismo. Al igual que las mujeres deben hacerse revisiones de mamas, los hombres deben revisarse los testículos para ver que todo marcha con normalidad.
- Tienes que aguantar el testículo entre los dos pulgares y luego ve pasando los dedos que te quedan por el escroto en busca de anomalías como si lo estuvieses rodando.
- Diferencia algún granito de una masa o bulto extraño.
- Sabes mejor que nadie cómo son, comprueba que todo siga normal.
En la mayoría de las ocasiones el cáncer testicular tan solo afecta a uno de los testículos.
