Estar durante todo el día trabajando sin ser productivo no es rentable. ¿Has notado que las horas pasan y que no has podido cumplir tu planning del día? ¿Te pones demasiadas tareas o es que no sabes aprovechar tu tiempo? Si tu caso es el segundo, traemos a continuación 10 consejos para mejorar tu productividad y dejar de echar horas extras cada día.
Así que si quieres que tu trabajo sea mucho más provechoso (y así no perder la mitad de tu vida de paso), atento a estos consejos.
Madruga

Se ha demostrado con creces que aquellas personas que madrugan son mucho más productivas que las que se quedan en la cama. Empezar a trabajar antes que el resto de personas es sinónimo de aprovechar el día. Ten en cuenta que si llegas a la oficina antes que el resto no tendrás que pararte a saludar o charlar con tus compañeros, podrás ponerte directamente al lío.
También evitarás llamadas molestas o mensajes en el Whatsapp. Podrás adelantar trabajo sin ningún tipo de inconveniente, es más, es posible que tu jornada laboral termine antes ahora que madrugas.
Eso sí, esto no significa que no hables con tus compañeros, sino que reserves esas charlas sobre qué vais a hacer el fin de semana para el final de la jornada.
Planifícate

El éxito de un negocio, en gran parte, es la planificación. No pienses que pasar 30 minutos al día planificando la agenda es perder el tiempo, ni mucho menos. Es todo lo contrario. Tener una agenda de trabajo bien definida te ayudará a conseguir tus objetivos de forma más fácil, además, esto también te permitirá avanzar en esas tareas más importantes y urgentes que tienes que hacer en el día sí o sí.
Puedes aprovechar el momento del desayuno para hacerlo o bien planificarlo mientras vas en el metro. Recuerda que cada segundo es oro y que ser productivo en las horas laborales debería ser tu mantra.
Mi consejo es que tengas dos agendas; una que te enseñe el día completo y otra la semana. De esta forma tendrás una visión general de tu semana y sabrás qué es lo que tienes que hacer día a día.
Prioriza: haz primero las tareas más complejas

Cuando iniciamos la jornada laboral estamos mucho más concentrados, ¿Qué significa esto? Pues que lo más recomendable es que hagas las tareas que resulten más difíciles o complejas en esas horas del día. De esta forma podrás resolver esos problemas con mayor efectividad.
Así que aprovecha esas horas de la mañana para centrarte en tus tareas y dedica la tarde a otras gestiones más livianas como llamadas, reuniones u organización. Si sigues esta rutina verás como tus días van a ser mucho más productivos y efectivos.
Olvida el multitareas

Uno de los grandes errores de hoy en día es ser multitareas. Si dedicas tu tiempo a varias cosas a la vez, no harás ninguna bien. Así que céntrate en una tarea y olvídate del resto mientras. Su turno vendrá después. Una correcta planificación de tu trabajo y actividades te permitirá resolver todos los problemas del día, pero de uno en uno.
El objetivo de que te centres en una sola tarea es que pongas todo tu empeño en ella y que logres el mejor resultado posible. Además, seguro que consigues hacerlo en mucho menos tiempo ya que tendrás tu mente puesta solo en esa tarea. Guíate por la agenda de trabajo para cumplir tus objetivos.
Ordena tu lugar de trabajo

El caos no ayuda a la productividad, sino todo lo contrario. Tener una mesa caótica llena de papeles, tickets y vasos de café no es lo más productivo del mundo. Es por eso por lo que una de nuestras recomendaciones para poder ser productivo al cien por cien es que mantengas tu sitio de trabajo ordenado. Tira los vasos de café, o lávalos, cuando acabes y guarda los tickets en una caja.
Asimismo, es importante que limpies tu ‘despacho virtual‘, es decir, tu ordenador. Clasifica los archivos por carpetas para poder encontrar de forma más rápida aquello que necesitas. Cada minuto cuenta y si no tienes los documentos bien organizados pasarás mucho tiempo buscándolos.
No estés siempre disponible

Aunque el Whatsapp, el correo y demás medios de comunicación digitales sean muy útiles, pueden restar productividad. El hecho de estar siempre disponible hará que pierdas la concentración y el tiempo en contestar correos, responder mensajes de Whatsapp o mirar los mensajes privados en las redes sociales.
Nuestro consejo es que reserves unas horas del día para esto (que no tendría que ser más de una). No estés siempre disponible y aprende a usar estos servicios con cautela ya que, al final, pueden ser tus peores enemigos.
Delega

Aunque creas que sí, no puedes con todo. Mantener a flote un negocio no es cosa de uno, sino de varios. Así que uno de los mejores consejos que podemos darte es que delegues responsabilidades en otras personas de confianza.
Piensa que de esta forma podrás centrarte mucho más en tus tareas y que tu nivel de estrés se verá muy reducido, un punto importante a la hora de concentrarse. Así que delega en otras personas y trabaja mucho más tranquilo a partir de ahora.
Divide las tareas grandes en actividades pequeñas

De vez en cuando tenemos tareas que no solo ocuparán muchas horas, sino que también estarán presentes durante algunos días. Estas tareas, normalmente, suelen impactar y producir una sensación de estrés muy grande. Es por ello por lo que hay que enfrentarse a ella no como una sola tarea, sino como varias más pequeñas.
Dividir el trabajo en actividades pequeñas hará que tu productividad aumente considerablemente y que puedas afrontar este trabajo de la mejor manera. Disminuirás el estrés y las ideas te vendrán con mayor calidad. Conseguirás alcanzar tus metas más rápidamente.
Aprende a decir no

Uno de los mayores errores es no saber decir no. Si das el ok a todos los proyectos que te llegan puede que no consigas centrarte en aquellos que realmente te interesan. ¿Y cuál es el resultado? Que ninguno de los proyectos conseguirá salir adelante (o que tendrás un estrés muy grande).
Es por ello por lo que tienes que aprender a decir no. Todo aquello que no te vaya a aportar beneficios, tanto para tu empresa como para ti, personalmente, debes eliminarlo de tu lista. Acepta solo aquellos proyectos que realmente te interesen y te apasionen. Verás como de esta forma serás mucho más productivo.
Tómate un tiempo para descansar

El cuerpo necesita descansar. Estar 8 horas seguidas sin parar no es nada productivo ya que tu cerebro empezará a distraerse con mucha facilidad. Se recomienda realizar descanso de 5 minutos, aproximadamente, en cada hora de trabajo, pero esto dependerá mucho de ti.
Mi consejo es que descanses cuando el cuerpo te lo pida. Hay personas que trabajan a un buen ritmo durante dos horas seguidas sin necesidad de descansos, pero hay otras personas que necesitan un pequeño descanso cada hora. Así que ponte tus horarios de descanso para recuperar energías.
Tampoco olvides que es muy importante descansar por la noche y desconectar, especialmente en los fines de semana, así que búscate un plan o siéntate en tu sofá con una buena cena y una serie o película. Disfruta de tus ratos libres tanto como de tu trabajo.

Actualmente trabaja con más de 1.000 riders y 2.000 restaurantes. Su capacidad de expansión no está puesta en duda. Se trata de su imagen. Se ha asociado las mochilas de los repartidores con precariedad, y eso se ha extendido a todo el sector. Sobre todo a las empresas que intermedian. Es decir, que ellas llevan la comida, pero no la producen.
















