El desayuno es una de las comidas más importantes del día, dentro de los cinco momentos diarios que los expertos en nutrición y salud recomiendan: desayunar, el almuerzo, la cena, tomar algo a media mañana y la merienda. Por desgracia la vida moderna hace que descuidemos nuestras comidas, en particular el desayuno. Debido al estrés, las prisas o el horario muchas veces desayunamos tarde y mal, o directamente nos saltamos esta alimentación fundamental. Es una mala costumbre que pone en riesgo tu salud, ya que tu cuerpo se ve afectado si no desayunas a diario.
Hoy día surgen varios obstáculos para respetar esta comida, y la inflación es uno de ellos, ya que ha hecho que el precio del desayuno suba un 20% en el último año. Es cierto que hay alternativas asequibles, como los 10 productos baratos para el desayuno que ofrece Carrefour, al igual que desayunos que ayudan a adelgazar. Pero el hecho es que gran parte de la población se salta el desayuno a diario, y esto tiene graves consecuencias para tu salud. Si quieres ponerle remedio, sigue leyendo con atención.
1EL AYUNO SE PRODUCE DURANTE EL SUEÑO
Al dormir nos pasamos entre 6 y 8 horas sin ingerir alimentos, mientras nuestro cuerpo procesa la cena destinando nutrientes al hígado y los músculos, reservando el resto para grasas adiposas. El organismo se prepara por tanto para la primera de las comidas, el desayuno, siguiendo el ritmo circadiano al que nos hemos acostumbrado, y que hace que nuestro metabolismo trabaje mejor durante las horas de luz. Dicho de otro modo: el cuerpo “sabe” cuándo debemos desayunar, comer o cenar, y se ha habituado a ese horario para movilizar las grasas libres y el resto de nutrientes.
