Cada año, es habitual tener que enfrentarse a algún que otro resfriado o enfermedad de algún tipo, y por regla general, la población recurre a la automedicación antes que a su médico. Esto es un terrible error, ya que tomar antibióticos sin prescripción médica puede repercutir en su salud a largo plazo.
También están los casos de padres que llevan a sus hijos al médico, y este receta otro medicamento que tarda más en hacer efecto. No seguir las indicaciones puede acabar siendo un problema, por lo tanto, es momento de saber por qué no es bueno abusar de los antibióticos, y las consecuencias de hacerlo.
Su peligro principal
El hecho de que a día de hoy muchas personas no respondan ante los antibióticos tradicionales se debe a las bacterias resistentes. Esto desemboca en una prolongación de la enfermedad, o incluso de la muerte del paciente. Muchos lo desconocen, pero nos enfrentamos al riesgo de infecciones por bacterias que pueden convertirse clínicamente incontrolables, lo que nos haría volver a la época preantibiótica, ya sea en la medicina humana o la veterinaria.
El origen de este problema se debe al uso inadecuado y el abuso de consumo de los antibióticos. Este uso ha generado un rápido aumento de las resistencias bacterianas, lo que lleva a una pérdida de eficacia de esta clase de medicamentos en el tratamiento de algunas infecciones. El uso inadecuado más habitual es la automedicación y el uso sin indicación.
