La venta ‘online’ de productos frescos crece en más de 10 puntos, lo que reafirma la importancia de la confianza en la enseña física, según el III Observatorio para la Evolución del Comercio Electrónico de Alimentación realizado por la Asociación Española de Distribuidores, Autoservicios y Supermercados (Asedas) y por las Universidades Complutense y Autónoma de Madrid.
El estudio se ha centrado en tres grupos de consumidores: los que solo realizan compras online, los ‘mixtos’ y los que solo optan por el entorno físico. Así, los compradores ‘solo online’ alcanzan algo más del 2% de la muestra, frente al 20% de los que usan ambos canales y el 76% de los que solo realizan compras físicas.
La confianza que generan los distribuidores físicos de alimentación es un factor determinante en el crecimiento del comercio ‘online’ en este ámbito. De hecho, según el informe, la preferencia por la enseña ‘offline’ determina en los consumidores la elección por la tienda ‘online’ debido a la seguridad que ésta les ofrece.
«En este III Observatorio del Comercio Electrónico en Alimentación constatamos que la relación entre tienda física y ‘online’ es indisoluble. Ambas presentan soluciones destinadas a responder a las diferentes necesidades del consumidor, con el factor de confianza en la enseña como algo fundamental en ambos casos. Debemos seguir trabajando en este concepto de servicio al cliente y, también en el contexto digital, en concienciar a los consumidores del trabajo que hacemos para lograr la sostenibilidad medioambiental, social y económica del modelo de distribución de proximidad», ha señalado el director general de Asedas, Ignacio García Magarzo.
LAS FAMILIAS NUMEROSAS APUESTAN POR LA COMPRA ONLINE
El perfil del consumidor online de alimentación responde a factores de conveniencia, destacando las familias de cinco o más miembros -que realizan encargos voluminosos- y rentas altas -que corresponden a empleados de alto cargo con poco tiempo para hacer sus compras-. Los jóvenes -de entre 18 y 34- combinan mejor las compras mixtas ‘on’ y ‘off line’.
Entre los otros factores que animan a la compra ‘online’ de productos de gran consumo destaca, según el análisis, el hecho de que este canal se adapta muy bien a las circunstancias laborales de los consumidores.
El colectivo que solo compra ‘online’ realiza sus adquisiciones a cualquier hora del día, mientras que los compradores mixtos utilizan el canal ‘online’, normalmente, tras la jornada de trabajo.
El tiempo que los consumidores invierten en hacer sus compras se ha igualado entre la compra ‘online’ y la física, siendo ambas de entre 30 y 60 minutos, lo que se explica por gran disponibilidad de establecimientos físicos al alcance del consumidor.