La Navidad es una buena época para pasar tiempo en familia y, como este año vamos a estar más tiempo en casa, nos podemos animar a hacer nuestros propios dulces navideños. Si en tu casa sois muy de mantecados, no te puedes perder las recetas que vamos a ver hoy.
Todas ellas tienen en común que son sencillas de realizar y que, además, te permiten disfrutar de tus dulces favoritos de una forma más sana. Por supuesto, esto no quiere decir que no los tengas que consumir con moderación, pero puedes darte el lujo de “pasarte” un poco más.
Los mantecados más saludables de tu sabor favorito
Con esta receta que te vamos a dar puedes elaborar estos dulces en diferentes versiones, así seguro que nadie se queda sin probarlos. Están elaborados con ingredientes que son ricos en grasas saludables, así que son mucho más sanos que los dulces que podemos encontrar en cualquier supermercado.
Para hacer la masa necesitas una taza grande de harina de almendra o harina de otro fruto seco a tu gusto, un poco de sal marina, una cucharada de sirope de manzana o de agave (si no tienes le puedes poner miel), una cucharada de pasta de dátil sukkari (si no tienes le puedes poner sirope o directamente obviar este ingrediente), y también un cuarto de taza de aceite de coco líquido o de aceite de girasol de primera presión en frío.
Con estos ingredientes te salen unos 15 mantecados. Luego solo tienes que elegir de qué sabor los vas a hacer. Según el sabor que quieras puedes añadir: dos cucharadas de coco rallado, una cucharadita de piel de limón y de naranja rallada, una cucharadita de vainilla, canela o anís estrellado, una cucharada de cacao o una cucharada de té matcha (te quedan unos originales mantecados verdes).
En un bol mezcla la harina con un poco de sal y el ingrediente que hayas elegido para aportar el sabor. Intégralo todo hasta que quede una masa libre de grumos. Después añade el sirope o la miel y la pasta de dátil. Vuelve a mezclar y añade el aceite. Remueve de nuevo hasta conseguir una pasta homogénea.
En unos moldes para galletas vierte un poco de masa. Precaliente el horno a 180º C hornea los mantecados durante 15 o 20 minutos. Es importante que supervises el horneado para evitar que se puedan quemar, así que mejor ir añadiendo tiempo poco a poco.
Mantecados caseros con aceite de oliva
En este caso se trata de una receta para hacer mantecados al más puro estilo tradicional, pero con la ventaja añadida de que son caseros y además utilizamos el aceite de oliva, que es una de las grasas más saludables que existen.
Para elaborar estos mantecados nos hacen falta 100 gr de harina de repostería, 50 gr de aceite de oliva virgen extra, 50 gr de azúcar glas, 30 gr de almendras naturales peladas y trituradas, una cucharadita de canela, la ralladura de un limón y unas semillas de sésamo o de ajonjolí. Con estos ingredientes salen unos 9 mantecados, si quieres más solo tienes que aumentar las cantidades proporcionalmente.
Como la harina suele tener algo de humedad, lo primero que hay que hacer es quitarla. Para ello la ponemos en el horno unos 30 minutos a 100º C. Una vez que la tengas lista mezclas en un bol todos los ingredientes y remueves hasta obtener una masa homogénea libre de grumos.
Con la masa ya lista hay que trabajarla. Extiéndela hasta que tenga más o menos un centímetro de grosor. Luego con ayuda de un molde o de un vaso corta la masa para ir creando los mantecados. Si no tienes espacio para extender la masa, puedes trabajarla directamente haciendo pequeñas bolas y dándoles forma de mantecado.
Dispon los mantecados sobre una fuente de horno cubierta con papel vegetal. Espolvorea con las semillas y deja que se horneen a 180ºC unos 15 o 20 minutos. Como en el caso anterior, controla muy bien los tiempos para evitar que se puedan quemar.
Si quieres hacer una versión algo más ligera puedes usar harina integral. Pero en este caso tienes que añadir un poco más de aceite, porque de lo contrario te costará más darles forma.
Mantecado blanco clásico
Los mantecados clásico “de toda la vida” son, sin duda, de los favoritos cuando hablamos de postres navideños. Así que es una buena opción prepararlos en casa. No es precisamente una receta baja en calorías, pero si los hacemos caseros nos evitamos consumir conservantes.
Para elaborar una tanda necesitamos 430 gr de harina de repostería, 200 gr de manteca de cerdo, 500 ml de vino oloroso, 4 gr de levadura química, azúcar glass para la decoración y el zumo de media naranja.
Empezamos derritiendo la manteca de cerdo al baño maría o en el microondas y la ponemos en un bol grande, luego añadimos el vino y el zumo de naranja y los mezclamos bien.
Por otro lado juntamos la levadura con la harina y ahora integramos la harina poco a poco con el líquido hasta tener una masa. Cuando tenga suficiente consistencia la sacamos y la amasamos hasta que esté blanda, maleable y de color blanco. Creamos entonces una bola que dejaremos reposar en un bol enharinado que tapamos con un paño limpio o con film transparente. Lo metemos al frigorífico ocho horas.
Pasado ese tiempo volvemos a hacer un amasado manual, extendemos con un rodillo hasta dejar una lámina de un centímetro de grosor y luego con un molde o un vaso vamos cortando porciones redondas que hornearemos 15 o 20 minutos con el horno a 200º C con calor arriba y abajo. Se dejan enfriar y por último se añade el azúcar glass en la parte superior para decorar.
Si haces suficientes como para que sobren y quieres guardarlos, puedes hacerlo en una caja metálica de galletas. En caso de que hagas varias filas no olvides poner entre ellas un poco de papel vegetal o de horno para que no se chafen ni se peguen.
Con estas recetas, esta Navidad puedes sorprender a todos con unos deliciosos mantecados caseros al estilo clásico o en una versión más sana, ¡tú decides!