Natalia Rodríguez fue una de las concursantes más queridas de Operación Triunfo. La cantante entró en la Academia para la primera edición del ‘talent show‘, aquí junto a los David Bisbal, Chenoa, Rosa López o David Bustamante, entre otros, para dar lanzamiento a un programa que sigue hoy más vigente que nunca. Desde entonces han pasado 20 años que han dado para mucho, sobre todo en cambios físicos.
En lo que tiene que ver con Natalia, ella fue la benjamina de un grupo que se reconoce por no ser de los formatos más jóvenes que se recuerdan, precisamente. Es por ello que, en todo este tiempo, a la interprete se le ha reconocido con diferentes ‘looks’ de los que se ha ido acompañando de una figura cada vez más reconocida. Repasamos desde MERCA2 la evolución de Natalia tras Operación Triunfo.
El desparpajo de Natalia cautivó al público de Operación Triunfo
Para la mayoría de los concursantes, Operación Triunfo supuso un valioso trampolín que les ayudó a entrar en el difícil mundo de la música, pero de la que sólo unos pocos lograron situarse en lo más alto… esto a pesar del tiempo y de las oportunidades.
Así lo vimos reflejado en el paso del tiempo con Natalia. Donde, mal que la gaditana sanluqueña no consiguiera llegar a las rondas finales del concurso, siempre se ha hecho ver como una de las más estimadas por parte de los espectadores de aquel ‘OT 1’.
Asaltó el programa de Televisión Española con sólo 18 años, logrando cautivar además al público con su desparpajo. Ese favoritismo de los que se encontraban delante del televisor también hizo porque la joven pudiera encumbrarse en alguna ocasión como la mejor actuación de una gala, hasta que se despidiera en la Gala 6.
Natalia mostró que había vida más allá del ganador de Operación Triunfo
Natalia, que se apellida Rodríguez, pero que como las artistas memorables se le reconoce simplemente por su nombre. Por aquel entonces, fue esa soltura la que también la encumbró hasta las altas alturas después de la edición de Operación Triunfo.
Porque, al igual que sucede con varios de los artistas de los programas más recientes, el ‘boom’ de ‘OT’ probó que había vida más allá del ganador, que no todo se quedaba en el nombre que se llevaba el premio mayor, pese a que la intención así lo fuera.
Con todo, la de Cádiz sí hizo gala del nombre del espacio musical y triunfó como presentadora en televisión, donde más de una cadena (y especialmente los programas de TVE) buscaban que poco a poco se acostumbraba a la pequeña pantalla siendo ella la protagonista. Ello le llevó a ser una de las primeras artistas en lanzar sencillos en España a través de las plataformas digitales.
Los años prodigiosos de Natalia tras Operación Triunfo le auparon a la escena televisiva
Si por algo se recuerda a Natalia, es porque supo demostrar, desde la primera aparición, que tenía el talento suficiente para estar ahí y pelear por un lugar en la música. Sus ganas y su trabajo fue muy bien considerado.
Tanto, que a dia de hoy sigue ocupando un sitio bastante importante en lo que es la música española. Manteniendo las distancias con los Bisbal, Bustamante o Chenoa, quienes sí se abrazaron gratamente con el éxito, Natalia arrancó unos años prodigiosos tras Operación Triunfo.
De hecho, se le recuerda también por varias entradas de listas musicales, como su ‘No soy un ángel’ (2002) o ‘Besa mi piel’ (2003). Incluso con su gran cambio, el álbum de ‘Radikal’ (2007). De todas formas, y al compás que iba lanzando nuevos trabajos y sencillos, su carrera musical se compaginó y compartió páginas con la escena televisiva.
Natalia transformó su faceta de niña dulce por una imagen más sensual y provocadora
Para muchos, Natalia no sería Natalia la de Operación Triunfo si perdiera su simpatía y su gran cercanía, como cautivó a todos por aquella época. Estos dos puntos significaron en mayor medida todo lo que posteriormente supo atraer.
Y es que, los fans más fieles de Operación Triunfo recordarán que desde su entrada conquistó a todos con su dulzura. Una dulzura que, pese a no perder, sí optó por modificar, y que con el paso del tiempo se vio a una artista sacando su lado más sensual.
Copando las revistas de corazón y la escena picante, al poco tiempo, Natalia dejó atrás su faceta de niña dulce y angelical para dar paso a una imagen sensual y provocadora. La gaditana, artista habitual en los escenarios de las fiestas del Orgullo Gay en Madrid, simbolizó una generación de cambios en los concursantes de ‘OT 1.
Su salto llegó para presentar El Grand Prix del verano junto a Bertín Osborne
Lo cierto es que Natalia nunca ha dejado de tener proyectos musicales que desarrollar. Además de combinarlo con la televisión, donde ha ejercido como participante y presentadora, también ha tenido más de un momento como protagonista.
¿La recuerdas al frente de ‘El Grand Prix del verano’? ¡Junto a Bertín Osborne! Nacido en 1995 de la mano de Ramón García, la intérprete ya desvelaba entonces que era su programa favorito de la tele, un programa que, pese a su desaparición, hoy sigue siendo de los más veteranos (14 temporadas).
Así que, gracias a la gran popularidad que asumía la gaditana, y del gran éxito del formato, en 2009 ella dio el salto para ser la copresentadora del espacio de la productora Europroducciones, que pasó a emitirse en Canal Sur.
La ex triunfita llegó a presentar el programa durante las dos ediciones siguientes del concurso de pruebas de La Forta, la Federación de Organismos de Radio y Televisión Autonómicos. Las pruebas de Grand Prix fueron el elemento más emblemático del programa. La mayoría de estas pruebas eran físicas y estaban basadas en juegos clásicos, como Los Bolos, en fiestas tradicionales españolas, como las pruebas con vaquillas.
Muy ligada a la televisión, pasó por otros programas como Fenómeno Fan o Splash
Esa naturalidad deslumbrada desde Operación Triunfo, a su vez, la llevaron a convertirse años antes en la presentadora del ‘Club Megatrix‘, el programa infantil del que estuvo a frente desde el año 2003 hasta 2007.
Posteriormente ejerció como colaboradora, copresentadora o jurado en otros espacios televisivos y radiofónicos como o ‘Anda levanta’, hasta que el pasado año 2016 se convirtió en la conductora del ‘talent show’ infantil ‘Fenómeno Fan’.
También pudimos volver a verla como participante en programas como ‘Gente de primera’ (2005), ‘Splash: famosos al agua’ (2013) o el esperadísimo ‘OT: El reencuentro’, donde los 16 cantantes que cambiaron la historia de la música y la televisión en nuestro país volvieron a reunirse para un especial documental coincidiendo con el 15 aniversario del programa, que culminó con un multitudinario concierto en Barcelona. Recientemente la hemos podido ver como colaboradora de ‘Hora punta’ y participando en ‘La mejor canción jamás cantada’.
Pese a los cambios, siempre se mantuvo ligada a la música
A lo largo de todos estos años, hemos visto cómo ha madurado y evolucionado la imagen de una cantante que pasó de ser más dulce y aniñada en sus inicios a la estrella de pop sexy y atrevida en que se convirtió más tarde.
Respecto a sus ‘looks’, lo que en un principio fueron unas mechas, después se convirtió en una melena de color rubio claro que con los años se volvió más natural. Pero Natalia siempre ha lucido un cuidado pelo largo, que ha peinado tanto en liso como en ondulado, con la raya al medio o al lado.
En lo que respecta a su principal faceta como cantante, la de Operación Triunfo tampoco quiso dejarla de lado en ningún momento. Si bien tuvo un parón de 10 años sin publicar disco, desde aquel ‘Radikal’ de 2007, la joven no ha dejado de trabajar en el terreno musical, centrándose en lanzamientos de sencillos y singles promocionales como ‘Go!’, ‘Tú’, ‘Ya lo sé’, ‘Solo tú’ o ‘No fui una más’; así como numerosos duetos y colaboraciones con Submmision DJ, D-Mol y Sergio Contreras, entre otros.