El nuevo presidente de Correos, Pedro Saura, asumirá su nuevo cargo en la mayor empresa pública del país con el reto de revertir la situación de pérdidas económicas que lleva registrando en los últimos años, pero al mismo tiempo asegurando la prestación de un servicio público de calidad que consolide sus servicios en el ámbito rural.
En 2022, Correos se anotó unas pérdidas de 217 millones de euros, duplicando las registradas un año atrás, y con una facturación de 1.962 millones de euros, un 5,7% menos que en 2021, con una caída continuada en el envío de cartas y un fuerte impacto de la pandemia en los envíos de paquetería.
En 2019, también bajo la presidencia de Juan Manuel Serrano, que ahora abandonará el cargo que asumió en 2018, la sociedad logró unos beneficios de 13 millones de euros, la primera vez que Correos cerraba en positivo desde el año 2014. Sin embargo, el estallido de la crisis sanitaria revertió esa senda de crecimiento.
Ante esta situación, los sindicatos han sido especialmente críticos con la gestión de Serrano, acusándole de intentar privatizar la empresa, de destruir empleo público, de reducir oficinas o de traspasar activos a su filial Correos Express.
En las últimas elecciones generales de julio, los sindicatos también arremetieron con la gestión del voto por correo, a los que se sumaron los partidos políticos de la oposición, acusando a la dirección de la empresa pública de poner trabas para el correcto desarrollo de las elecciones.
Finalmente, tras más de 21.000 contrataciones de refuerzo, la compañía puso en valor su gestión, al tramitar cerca de 2,5 millones de votos por correo, un máximo histórico, superando en un 82% el anterior récord de las elecciones de 2016, y logrando la ratio más alta entre solicitudes y votos finalmente admitidos de todas las elecciones.
SERVICIOS RURALES
La anterior ministra de Transportes, Raquel Sánchez, defendía la gestión de Correos, asegurando que los esfuerzos estaban centrados en que todos los ciudadanos tuvieran acceso a los servicios públicos estatales, teniendo como base «la vertebración social y el desarrollo económico de los lugares en los que residen», con especial hincapié en el ámbito rural.
Desde el punto de vista del empleo, desde 2018, año en el que la empresa alcanzó el acuerdo plurianual con las organizaciones sindicales CC.OO., UGT, CSIF y Sindicato Libre, se han incorporado más de 15.487 empleados fijos a su plantilla, en el marco de su proceso de consolidación del empleo temporal y del plan de estabilización del empleo.
Asimismo, ha puesto en marcha distintas iniciativas en los últimos años como la entrega de 22.000 nuevas PDA a su plantilla, el lanzamiento de Correos Cash, la instalación de 109 cajeros en distintas ubicaciones de España o la promoción de la plataforma Correos Market.
No obstante, los sindicatos no han cesado en presionar a la empresa, principalmente en contra de su anterior presidente. De hecho, este jueves y viernes hay una huelga general convocada en sus oficinas de Madrid.
En su anterior cargo como presidente de Paradores, Saura fue el encargado de reactivar la cadena hotelera después de la pandemia y devolverla a cifras precrisis. En 2022, Paradores cerró su segundo año de beneficios tras la pandemia con 11 millones de euros.