¡Qué ricas están las almejas! Esta delicia marina ocupa un lugar destacado en las pescaderías, y aunque se suele asociar su preparación a cenas como las de Navidad, cualquier ocasión es buena para disfrutarlas en familia. La almeja se presta a toda clase de platos muy sabrosos: con jamón, en guisos con garbanzos, con cayena y aceite de sidra… Las posibilidades son infinitas, pero si hay una receta por antonomasia que gusta a todos, es la de las almejas a la marinera. La estrella de la cocina gallega es un guiso muy popular que surgió en las Rías Baixas y consiste en cocinar los moluscos en una salsa de cebolla, ajo y perejil, así de sencillo y sabroso.
Karlos Arguiñano es un experto en la materia, y después de sugerirnos una merluza con salsa de almejas, ahora quiere revolucionar la cocina con su método para las almejas a la marinera. Seguro que piensas que es una elaboración complicada y farragosa, ¡pero no es el caso! Lo mejor de esta receta es que su preparación no te llevará más de 15 minutos, y además es de lo más sencilla. Estás a punto de sorprender a tus invitados con un plato de cinco estrellas. ¡Manos a la obra, cocinillas!
LIMPIA BIEN LAS ALMEJAS
Antes de empezar la receta de almejas a la marinera recuerda que se cocinan vivas, salvo si usas productos congelados. Las valvas deben estar prietas o cerrarse deprisa si las tocas con un dedo. Además, cuando estés guisando las almejas se tienen que abrir. Dicho esto, el paso inicial es limpiar las almejas de forma concienzuda, metiéndolas en un recipiente grande con agua fría y sal. Déjalas en reposo durante unas horas, para que suelten toda la arena y las impurezas que pudieran tener.
