Los pimientos de piquillo rellenos son una alternativa perfecta para ocasiones especiales. Siempre quedan bien y son una apuesta segura, ya que suelen gustar a todo el mundo. Además, es un plato sencillo de preparar, pero con un toque lo suficientemente sofisticado como para servirse en comidas y cenas en las que queramos destacar un poco más. Se pueden servir como entrante junto con otras tapas, o como entrante, acompañado con un poco de arroz o una ensalada de lechugas o brotes verdes.