Con la llegada del frío y las primeras nieves, la provincia de Huesca está más bonita que nunca. Como todavía tenemos por delante unos cuantos fines de semana antes de Navidad y un súper puente, apunta los pueblos bonitos de los que te vamos a hablar hoy.
Si eres amante del turismo rural y la naturaleza estos diez destinos que vamos a repasar te van a encantar. Así que vete preparando la maleta porque estamos seguros de qué vas a salir de viaje muy pronto.
Aínsa, una villa medieval muy conocida
Hablar de pueblos bonitos de Huesca es sinónimo de hablar de Aínsa, la villa medieval por excelencia de esta región. Sus dos calles principales siguen conservando toda la esencia del Románico, aunque tampoco faltan muestras de arte Gótico.
Sin duda, uno de sus grandes atractivos es su castillo, que tiene la consideración de Bien de Interés Cultural y Monumento Histórico Artístico. Otro monumento que no debes perderte es la Iglesia de Santa María y, cómo no, date una vuelta por la Plaza Mayor.
