A veces se bromea sobre dónde tienes la cabeza, o con qué parte del cuerpo piensas, etc. Es algo habitual en conversaciones entre amigos o en discusiones. Pero lo cierto es que esas afirmaciones tienen parte de verdad. Y es que las neuronas no solo están en tu cabeza. Por muy extraño que te parezca, estas células están presentes en más partes de tu cuerpo de las que creerías en un principio.
Cuando conozcas estos lugares te vas a quedar realmente sorprendido. Así que, a partir de ahora, cuando te digan que estás pensando con otra parte de tu cuerpo, quizás podrías devolverle un dato curioso sobre dónde tienes realmente las neuronas. Y no precisamente me estoy refiriendo a las neuronas artificiales de los dispositivos tecnológicos…
Las partes del cuerpo donde tienes neuronas
¿En qué otras partes del cuerpo están las neuronas?
El SN, o sistema nervioso, se divide en el central (SNC) y el periférico (SNP). El primero de ellos está compuesto por el cerebro y la médula espinal para conectarlo con el resto del cuerpo. Este sistema está compuesto por unas 86.000.000.000 de neuronas.
Pero además de ese gran cúmulo de neuronas, seguro que no sabías que existe otro en el SNP, que se compone por su núcleo central (el ganglio) y que se encuentra en el sistema digestivo. Y es una zona vital para poder procesar los alimentos que consumes y aportar al resto del organismo, incluido el SNC, todo lo que necesita para funcionar.
Las neuronas del sistema digestivo se encargan de contraer y relajar los músculos que mueven los alimentos a través de los órganos implicados y controlar la secreción de todos los componentes necesarios para extraer los nutrientes de los alimentos y que el organismo pueda aprovecharlos cuando les llega a través de la sangre.
Además del aparato digestivo, el SNP también está compuesto por los nervios que son los canales que llevan información a todo el organismo, desde la cabeza a los pies. Con ellos se pueden hacer multitud de movimientos y funciones como la percepción sensorial (sentir presión, dolor, calor, frío,…).
Por tanto, cuando te digan que estás pensando con la barriga, quizás no estén tan desencaminados, al menos por el hecho de que también tienes neuronas en esta zona de tu organismo.
