Evitar la procrastinación es algo que todos los emprendedores intentan lograr respecto a sí mismos. Sin embargo, pocas veces somos conscientes de que el líder del equipo también es responsable de conseguir que sus subordinados no caigan en esta forma de actuar.
Aunque no lo creas, hay cosas que puedes hacer y que conseguirán que tus empleados no acaben dejándolo todo para el último momento. Vamos a ver con más detalle qué tipo de medidas puedes tomar.
¿Qué es la procrastinación?

Por si todavía no sabes qué significa la palabra de moda, es esa tendencia que existe a dejar las tareas más pesadas y complejas para el último momento. Dedicando el tiempo a hacer otras cosas más livianas o, en el peor de los casos, a no hacer nada.
El problema es que las tareas tediosas también hay que hacerlas. Si no las abordamos en su momento tendremos que hacerlo cuando quede poco tiempo para entregarlas. Es entonces cuando aparece el estrés.
Entender sus motivos para evitar la procrastinación

Muchos creen que esta tendencia a dejarlo todo para última hora se debe a vaguería en los trabajadores, pero no es así. Quien procrastina suele hacerlo porque está en un estado de ánimo negativo.
Hay factores que hacen que los empleados no se sientan bien y eso hace que no tengan ni fuerzas ni ganas de abordar aquellas tareas que en ese momento les parecen más complejas y pesadas.
Divide el trabajo en pequeñas tareas

Una de las mejores formas de evitar la pereza de asumir trabajos complejos es aplicar el truco de subdividir una tarea grande en otras más pequeñas. En lugar de pedirle a un trabajador un extenso informe, pídele que lo vaya haciendo por partes.
Hoy una memoria económica, mañana un reporte de la contabilidad de los últimos meses, etc. En unos días tendrá toda la información lista para elaborar el informe y no le habrá costado nada hacerlo.
Reparte las tareas de forma equitativa para evitar la procrastinación

Seguro que tienes empleados muy capacitados y otros que no tienen tantas habilidades. Pero no puedes sobrecargar con tareas pesadas a unos y dejar las más livianas para el resto.
Procura repartir las tareas de forma equitativa. Que todos tengan cosas complejas que hacer y también algunas más sencillas. Esto, además, hará que el equipo de trabajo esté más unido.
Pon fechas de entrega más ajustadas

Hay un dicho que señala “un trabajo tarda en hacerse el tiempo que tengas para ello”. Es decir, si tienes tres horas lo harás en tres horas, pero si te dan 15 días tardarás todo ese tiempo en hacerlo.
Para evitar la procrastinación procura dar fechas de entrega más ajustadas, así tus empleados sabrán que no pueden demorar demasiado afrontar las tareas tediosas. Eso sí, procura que el tiempo sea suficiente para hacer el trabajo.
Crea equipos especializados

Alguien con tendencia a procrastinar lo hará menos si está rodeado de personas que están trabajando a pleno rendimiento. Si, además, todos están especializados en un mismo tema, se crea un mejor ambiente.
Porque cualquiera que tenga una duda sobre cómo hacer algo puede pedir ayuda o consejo al resto. Esto hará que nadie demore sus obligaciones.
Haz evaluaciones de desempeño para evitar la procrastinación

Las evaluaciones de desempeño te sirven para saber quienes son tus mejores empleados. Y también son un aliciente para ellos, puesto que les impulsan a mejorar, ya que todos querrán obtener una nota mejor.
Si el empleado sabe que lo vas a evaluar, será menor la tentación de dejar para otro momento las tareas importantes. Tal vez esa tentación no desaparezca del todo, pero no tendrá tanta tendencia a ceder ante ella.
Crea un buen ambiente de trabajo

Cuanto más a gusto se sientan tus empleados, más motivados van a estar y más productivos serán. Si están cómodos en el entorno y con sus compañeros trabajarán mucho mejor.
Hay muchas formas en las que pueden contribuir a generar un mejor ambiente. Por ejemplo, ajustando bien la climatización, promoviendo las relaciones interpersonales entre los miembros de la plantilla, mejorando el mobiliario de la oficina, etc.
Reconoce los logros para evitar la procrastinación

Un feedback positivo siempre es bien recibido y da ánimos tanto a quien lo recibe como al resto del equipo, porque todos querrán obtener un reconocimiento público por su buen hacer.
Al reconocer ante todos el buen trabajo que ha hecho una persona estás alabando el sacrificio y el esfuerzo que ha realizado. Así les haces saber a todos que su dedicación tiene una recompensa.
Sé un ejemplo a seguir

Por último, no olvides que como líder debes ser un ejemplo para los miembros de tu equipo. La mejor forma de evitar la procrastinación entre ellos es que tu tampoco caigas en ella.
Asegúrate de que no estás dejando para otro momento las tareas más importantes. Ponte al día con el trabajo más importante y demuéstrales que todos podéis conseguirlo.