Desde que en octubre de 2018 empezara a lanzar fondos de inversión formados con criterios sostenibles, la gestora del Banco Santander, llamada Santander Asset Management (SAM), ha captado más de 800 millones de euros para esta nueva gama de productos de inversión.
Era entonces un indicio de cómo una buena parte del sector financiero está revisando y cambiando en los últimos meses su oferta, debido a tres razones principales: primero, que los tipos de interés están en mínimos históricos, lo cual resta atractivo a los depósitos bancarios de cara al cliente inversor; segundo, que las gestoras tienen que ajustarse a cada vez más estrictos requerimientos regulatorios en aras de una mayor sencillez y transparencia en la oferta, y tercero, que los millenials han irrumpido en el mundo de la inversión y han contribuido en gran medida a que los fondos se deban generar respetando los llamados “criterios ASG”, es decir, que los diseñadores de carteras pongan el foco en empresas con claros compromisos medioambientales, sociales y de buen gobierno en sus políticas corporativas.
Efectivamente, todo el sector está cambiando, pero la gestora del Banco Santander está siendo la entidad más activa en los últimos meses. Sencillez en la explicación, transparencia en la gestión, eficiencia en los resultados y sostenibilidad en la cartera. Esos son los criterios que, de acuerdo con SAM, han sido aplicados a la primera gama de fondos sostenibles que existe en España, integrada por dos fondos mixtos y uno de renta variable pura.
El primero de ellos se llama Santander Sostenible 1, es de renta fija mixta internacional y está dirigido a un inversor de perfil conservador; tiene un mínimo del 75% de su cartera en valores de renta fija, pública o privada, y el 25% restante en renta variable. El Santander Sostenible 2, está ideado para inversores con un perfil de riesgo más elevado (invierte hasta el 55% en acciones y el resto en renta fija). En la cartera de ambos fondos también se incluyen los conocidos como green bonds, es decir deuda corporativa destinada a financiar proyectos sostenibles, verdes, de energías limpias y de reducción de emisiones contaminantes. También hay fondos temáticos o con inversiones en activos al margen del mercado europeo (bolsa americana, deuda high yield o emergente…).
La gama la completa el Santander Sostenible Acciones. Este fondo invierte en compañías europeas, tanto de la zona euro como del Reino Unido, Suiza y otros países miembros de la Unión Europea, especializadas en negocios considerados como sostenibles. Son los sectores de energías renovables, tratamiento de residuos, reforestación, movilidad, eficiencia energética, innovación tecnológica, envejecimiento de la población, salud, agroalimentación y conectividad de comunicaciones.
Junto a la sostenibilidad y el foco en la banca responsable, otra de las fuertes apuestas de la entidad que preside Ana Botí, a la que ningún otro gestor se ha sumado aún, es la diversidad. Por ello, ha lanzado el primer fondo de igualdad de género en España: el Santander Equality Acciones. Este producto invierte en renta variable internacional y su cartera está integrada por empresas que promuevan la igualdad de género en todos los niveles de su estructura, a la vez que presentan fundamentales atractivos para la inversión. Actualmente, el fondo tiene en cuenta un total de siete criterios: número y porcentaje de mujeres en el Consejo de Administración, empresas lideradas por mujeres (bien sea presidenta o consejera delegada), porcentaje de mujeres empleadas, porcentaje de mujeres en niveles intermedios, porcentaje de mujeres en puestos directivos, publicación de la brecha salarial entre hombres y mujeres y políticas de igualdad de oportunidades. Según afirman desde la gestora, la intención es que en los próximos años se vayan incorporando más elementos de análisis que amplíen y completen los índices que hasta ahora se están utilizando.
Líder en renta variable
La gestora de Santander, integrada junto con el negocio de banca privada en la unidad de Wealth Management –dirigida por Víctor Matarranz- es líder en patrimonio gestionado en renta variable en España, con más de 2.600 millones de euros. En 2018, recibió el reconocimiento de Citywire como mejor gestora de renta variable y quedó finalista en los premios Expansión&Allfunds Bank.
Además, cuenta con los dos fondos de mayor tamaño de toda la industria. El Santander Acciones Españolas, gestionado por José Antonio Montero de Espinosa, tiene un patrimonio superior a 1.400 millones, cerca de 30.000 partícipes y ha batido de manera recurrente al Ibex 35. El Santander Small Caps España, por su parte, atesora 950 millones de patrimonio, alrededor de 28.000 partícipes y ocupa el primer puesto en rentabilidad a tres y cinco años. En el caso de este fondo que invierte en pequeñas y medianas compañías, el pasado mes de marzo de 2018, se decidió restringir las entradas de dinero tras alcanzar un patrimonio de 1.300 millones para proteger a los partícipes y asegurar que el fondo tiene el tamaño adecuado para su gestión, en manos de Lola Solana y su equipo. Lola Solana cosechó en 2017 y 2018 el galardón a mejor gestora por Citywire.
La gestora, cuyo consejero delegado es Miguel Ángel Sánchez Lozano desde el pasado mes de enero, también ha reorganizado recientemente varias de sus gamas de fondos para hacer su oferta más eficiente y sencilla. Mi Fondo Santander Moderado, que invierte en fondos de fondos de un perfil de riesgo medio, ha absorbido Santander Tándem 0-30, un producto de características similares, y dos fondos mixtos de la gestora –los Evolución– se han fusionado con la gama de sostenibles.
Los perfilados Mi Fondo Santander, antes denominados Select, fueron relanzados por la entidad el pasado verano y actualmente tienen más de 10.000 millones de euros de patrimonio. Tras haber trasladado su gestión desde Londres a Madrid, con el propósito de conseguir un mayor acercamiento a la red del banco y a los clientes, la gestora de Santander ha implementado un nuevo proceso de inversión y un nuevo equipo de gestión al mando, que cuenta con el apoyo de nueve selectores de fondos repartidos entre Madrid y Londres.
| Miguel Ángel Sánchez Lozano, consejero delegado de Santander Asset Management España. |
Nuevos lanzamientos de productos
Para arrancar este año, Santander Asset Management ha ampliado su oferta con la gama Cumbre, fondos de rentabilidad objetivo para los clientes más prudentes y adversos al riesgo, y un producto dirigido a clientes del segmento de Banca de Empresas e Instituciones del banco.
Santander Cumbre, que cuenta con cuatro fondos y ha alcanzado un patrimonio que roza los 1.200 millones de euros, ofrece una TAE máxima no garantizada del 0,52% hasta vencimiento. A lo largo de la vida del producto, se ofrecen cinco rentas del 0,4%. En el último reembolso, los partícipes podrán obtener un 1% adicional en función de la evolución del Ibex 35.
En cuanto al producto diseñado específico para empresas, Santander Compañías 0-30 se trata de un fondo dirigido a personas jurídicas. Este producto es un fondo de fondos de renta fija mixta internacional que selecciona los mejores fondos para invertir (propios o de terceros) con un horizonte temporal de inversión recomendado mínimo de dos años. De esta manera, incorpora una gestión activa y flexible que permite acomodar la exposición a renta variable según el momento de mercado (desde un mínimo del 0% hasta un máximo del 30%) con el fin de optimizar el riesgo y la rentabilidad desde una perspectiva conservadora pensada para este colectivo.
En total, Santander Asset Management cuenta en España con un patrimonio bajo gestión de 36.308 millones de euros y un total de 172.000 millones de euros en los 11 países en los que la gestora dirigida por Mariano Belinky está presente. En España, tiene una cuota de mercado que roza actualmente el 14%.
Según las últimas cifras publicadas por Inverco, la patronal del sector, el volumen de activos en fondos de inversión se situaba en España a finales del pasado mes de enero en 262.232 millones de euros, tras aumentar en 4.718 millones de euros gracias en buena medida a la recuperación de los mercados de renta variable. El número de partícipes asciende a 11,15 millones.
