Cada tarde de lunes a viernes ‘Amar es para siempre’ sigue avanzando con su penúltima temporada, llena de sorpresas, misterios y dudas para sus personajes. Esta semana ha estado especialmente marcada por los dilemas de Victoria y la desaparición de Iván, pero no podemos olvidar a otros protagonistas que también se enfrentan a importantes conflictos.
Uno de ellos es Carlos, que arrastra consigo una enorme carga desde que abandonara el servicio militar. Un problema que se ve agravado por el amor que está comenzando a sentir por Gala, de la que trata de alejarse para protegerla. Este viernes seguirá enfrentándose a los contratiempos derivados de todo esto.
1Agresiones, mentiras y mucho más en ‘Amar es para siempre’
La semana del 25 al 29 de septiembre está siendo muy intensa para los protagonistas de ‘Amar es para siempre’, tal y como viene siendo habitual la presente temporada. Entre otras cosas, encontramos el descubrimiento de Manolita y Marcelino, que se enteran de que Malena es su verdadera nieta. Así como las malas artimañas de Elena, que está traspasando todos los límites de la ética.
Arrancábamos el lunes con una Lola llena de dudas, pues tras besarse con Román, decide alejarse de él para no entorpecer su boda, ya que no quiere ser la responsable de romper una pareja. Román, a su vez, cada vez tiene más claros sus sentimientos por ella, y se está planteando muy seriamente abandonar su futuro con Alicia, algo que le acaba por confesar a Chimo. Malena, por su parte, cree que los dos serían realmente felices juntos.
La salud de Federico se encuentra cada vez peor, más aún después de llevarse un buen disgusto al enterarse de que su hijo, Román, está en conversaciones de negocio con Galerías Preciados. En una reunión con los demás empresarios deja claro que no está de acuerdo con el posible contrato y, en ese momento, vuelve a sufrir un lapsus.
Elena no perdona haber perdido un contrato tan importante por el orgullo de su marido y le sugiere que a partir de ahora sea Román quien esté al frente de la empresa, pero Federico se niega. Ante esto, Alicia acaba por pedirle a su padre, Crespo, que interceda ante Galerías Preciados y trate de salvar la situación.
Por otro lado, Isidro sigue en el hospital tras el ataque de Iván, que golpeó fuertemente su cabeza con un cenicero. Cuando despierta, el policía no se acuerda de nada relacionado con el caso, pero poco a poco comienza a recordar. Sofía, llena de miedo y culpabilidad, no se separa de él.
Asimismo, en ‘Amar es para siempre’, Rafa también se convierte en un buen apoyo para Sofía. De hecho, le pide que vuelva a actuar en el King’s, aunque esta vez con un espectáculo más convencional. Además, le pide que le facilite el contacto de Richie, el cómplice de Iván. Tras hablar con él, está casi convencida de que su novio es el asesino de Ester, pero aún alberga cierta esperanza. Al igual que la policía, Sofía se entera de que Iván está en Brasil, donde ha huido con la ayuda de Crespo.
Manolita y Marcelino siguen con su lucha interna respecto a Malena. Creen que lo mejor para la joven es mantener las distancias y no encariñarse demasiado con ella, especialmente Manolita. Pelayo será quien se salte esta norma y ayude a la adolescente con sus amoríos, algo que más tarde le reprochará Manolita.
Benigna se enfrenta a dificultades económicas en el supermercado, lo que hace que incluso Manolita se plantee dejar sus estudios de acceso a la universidad para ayudarla. Para colmo, Mauricio se une a sus clases de baile, por lo que también tiene que soportar su presencia allí.
En capítulos anteriores de ‘Amar es para siempre’ también veíamos cómo Justo recibía una inesperada noticia: Silvia, su ex mujer, ha sido detenida bajo cargos de tráfico de piedras preciosas y le pide su ayuda para defenderla judicialmente, pero él no se siente preparado y necesita pensarlo.
Entretanto, la relación entre Chimo y Claudia parece mejorar. Tras innumerables rechazos por parte de ella, por fin comienzan a establecer un clima de confianza, tanto que la costurera acaba confesándole su duro pasado.
Victoria está siendo una de las mayores perjudicadas en los últimos episodios de ‘Amar es para siempre’. Tras hablar con Lola y sincerarse con ella sobre sus sentimientos, decide tratar de localizar a Diana. Finalmente lo consigue, pero ésta le da un ultimátum: o emprende una nueva vida con ella fuera de España, o se queda con su familia en Confecciones Quevedo. Victoria tiene que decidir si lo deja todo por amor.