El microondas es un electrodoméstico que se encuentra presente en el 94% de los hogares españoles, siendo uno de los más utilizados diariamente por su capacidad de calentar alimentos en unos pocos minutos. Además, también permite descongelar muy rápidamente y hacer algunas preparaciones interesantes sin necesidad de encender la vitrocerámica.
Y aunque es un aparato mucho más limpio que, por ejemplo, los fogones, también hay que limpiarlo con cierta frecuencia y de la forma más adecuada. ¿Sabes como hacerlo?
FÁCIL Y ECONÓMICO
Transcurrido este tiempo apagamos el microondas y retiramos el recipiente con mucho cuidado, utilizando un guante o un paño de cocina para evitar quemaduras. El siguiente paso es usar una esponja o una bayeta para retirar la humedad con restos de grasa de las paredes del microondas y del interior de la puerta.
El plato es mejor sacarlo, junto con el aro y limpiarlos aparte en el fregadero, como cualquier pieza de vajilla. Finalizamos pasando un paño limpio y seco para retirar cualquier resto de humedad. Como ves, es un truco superfácil, pero aún existen otras formas de limpiar el microondas con limón.
