La vida en las ciudades pequeñas es mucho más tranquila y pausada que en las grandes ciudades en la que todo es aprisa y corriendo. Es por ello por lo que realizar una escapada a uno de esos lugares silenciosos es una muy buena idea, especialmente si se quiere escapar del barullo.
Vamos a conocer las ciudades más pequeñas del mundo para que podáis descubrir su estilo de vida y sus curiosidades. De este modo, tendréis aún más ganas de visitarlas y de pasar una temporada, ya sea larga o corta, entre sus calles y sus maravillas.
Camden, Maine
Camden es una ciudad que está situada en el condado de Knox, en el estado estadounidense de Maine. Fue colonizada por los británicos en la década de 1770 y sirvió como punto de encuentro para los habitantes de Estados Unidos durante la revolución. La población actual es de tan solo 5.000 habitantes, por lo que es muy común conocer a todas las personas que viven en la ciudad.
Es cierto que las actividades a realizar en Camden no son muy variadas, pero sí es cierto que es el lugar idóneo para desconectar y descansar, además, con un coche cargado de gasolina podréis visitar los alrededores y descubrir más mundo, que nunca viene mal, sino todo lo contrario.
Bled, Eslovenia
Si hay un lugar hermoso en el planeta Tierra esa es la ciudad de Bled, en Eslovenia. Se fundó en el año 1004 y el emperador del Sacro Imperio decidió regalarlo al obispo de Brexen por su delicadeza, su belleza y su esplendor.
El castillo de Bled se encuentra situado en el centro del bellísimo lago Bled que cumple la función de bordear la ciudad. En la actualidad son 5.000 habitantes los que se encuentran allí y es famosa por poseer algunos de los más hemorsos balnearios de toda la zona y de los alrededores. Así que si necesitáis descansar y desconecrar, Bled, en Eslovenia, es la ciudad que estáis buscando.
Hallstatt, Austria
Otra de estas ciudades pequeñas se encuentra en Austria, Europa. Hallstatt es uno de los asentamientos más longevos que tiene el país austriaco. Su fundación corresponde al año 5000 a.C., y se usó para explotar las reservas de sal en las montañas que caracterizan a este precioso país.
Hallstatt es la típica ciudad de cuento que sale en las películas, así que es perfecto para una escapada de pocos días en la que se quiera desconectar, dentro de lo que cabe, del mundo exterior y de sus dificultades.
Pucisca, Croacia
Pucisca es un municipio de Croacia, que se encuentra en la isla de Brac, en el condado de Split-Dalmacia, con una población de 2.224 personas, aproximadamente, ya que la cifra puede variar de un mes a otro. La curiosidad de esta ciudad croata es que el 99% de las personas que viven aquí son croatas, es decir, que veremos pocos extranjeros viviendo aquí.
El municipio, a su vez, se compone de tres asentamientos diferentes; uno de ellos es Gornji Humac, otro se llama Praznica y el último se llama Pucisca, como la propia ciudad. Para conocer un dato histórico de este lugar, hay que aclarar que el día 8 de marzo del año 1944, las tropas alemanas ejecutaron a 24 hombres locales del asentamiento de Gornji Humac, incluido el párraco.
Manarola, Italia
Vayamos al rincón que vayamos de Italia, este siempre nos sorprende. Es por ello por lo que la ciudad de Manarola es una de las que más turistas recibe a lo largo de todo el año. Es una fracción del Municipio de Riomaggiore, y es por ello por lo que no cuenta con una amplia población. Se encuentra sobre el Mar de Liguria, en la provincia de La Spezia, en el norte del país italiano.
Encabeza la lista de un grupo de pueblos costeros que han sido nombrados como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, por lo que es una visita muy interesante. Este, la ciudad de Manarola, es la más vieja del peculiar grupo de pueblos costeros y lo sabemos por la piedra angular de la iglesia de San Lorenzo, en 1160. Como curiosidad, aquí se habla el dialecto local, el manarolese, que se diferencia bastante del resto de dialectos. Así que, aunque os podrán atender en otros idiomas, no está de más saber un poco de esta fascinante lengua.
Bibury, Inglaterra
Muchos consideran que Bibury es la ciudad más bonita de toda Inglaterra y no deben estar muy equivocados ya que Bibury ya se menciona por primera vez en el libro de Domesday en el año 1086, el principal registro de Inglaterra, por Guillermo I de Inglaterra. Esto demuestra que ya en ese época fue una ciudad bastante importante.
Hoy en día encontraremos esta ciudad tal y como estaba en esa época, llena de encanto inglés. La mayor parte de la ciudad sigue siendo igual que entonces, pero es cierto que alguna que otra fracción de Bibury se ha modernizado ligeramente. Encontramos también el río de la moneda dominando la calle principal de la ciudad.
Garmish-Partenkirchen, Alemania
En la zona Baviera encontramos una encantadora ciudad que se sitúa a la altura de una montaña llamada Zugspitze. Esta ciudad es Garmisch-Partenkirchen y se posiciona a casi 3.000 metros de altura, por lo que es una ciudad perfecta para desconectar totalmente. Nada de tecnología o de nuevos aparatos, desconectar el móvil será una obligación para entrar en este refugio.
Cuenta con una zona de ski y por ello fue el escenario de los Juegos Olímpicos de Invierno en 1936, aunque debido a la Segunda Guerra Mundial fue cancelado. Se encuentra en la frontera con Austria, así que visitar el país vecino será bastante sencillo.
Annecy, Francia
Alrededor de un castillo del siglo 14 se encuentra la pequeña ciudad de Annecy, en Francia, un lugar con un aspecto pintoresco y muy especial, incluso más que los propios Alpes Franceses. Esta ciudad está dividida por pequeños canales y arroyos que pasean libremente y que provienen del Lac Annecy, conocido también como ‘Lago de Annecy’, uno de los lagos más limpios de todo el mundo.
A pesar de ser una ciudad pequeña, podremos aprovechar mucho el tiempo visitando sus monumentos, sus tiendas y conociendo, de forma general, la cultura de los habitantes de este magnífico y esplendoroso lugar del mundo.