La sevillana ha demostrado que no solo es un rostro bonito. A lo largo de su carrera se ha ganado al público con algunas de sus fantásticas interpretaciones en películas como Lucía y el Sexo, hasta ¡Ay, mi madre!, pasando por series tan populares como 7 vidas. Gracias a todos esos trabajos, además de algunos fuera de las fronteras españolas, Paz Vega se ha ganado ser una de las actrices españolas más internacionales y con merecidos premios por su larga trayectoria.
Una trayectoria en la que no solo han destacado los cambios de los personajes de ficción a los que ha interpretado, también se ha podido apreciar una progresión en la estética. Y es que, desde aquella Lucía tan sexual, hasta la nueva Lucía casta (por su papel de monja en Perdóname, Señor), la actriz y modelo andaluza ha pasado por algunos retoques que no han pasado desapercibidos para nadie.
Paz Vega: 20 años de cambios físicos a lo largo de su carrera
Los primeros papeles de Paz Vega
En sus inicios, pocos podían intuir la carrera tan exitosa que iba a tener aquella jovencísima Paz Vega que comenzaba en algunas series que rodó para la pequeña pantalla. Una de sus primeras apariciones fue en la serie Más que amigos, para pasar luego por Compañeros, o 7 vidas.
En esas primeras imágenes se podía ver a una Paz sin retoques, justo antes de sufrir esa metamorfosis que no solo está basada en retoques estéticos, también en una vida saludable y una genética maravillosa para seguir manteniendo ese físico a sus 45 años y tras haber sido mamá de 3 hijos.
En sus inicios ya lucía su belleza natural y una larga melena que ha ido recortando a lo largo de los años, hasta terminar con un pelo corto y un aspecto mucho más retro en la actualidad. Una estética que puede recordar Dita Von Teese, Scarlett Johansson, Taylor Swift, etc.
Lucía y el Sexo: su trabajo hacia el estrellato
El nombre de Lucía parece que ha traído buena suerte a la actriz sevillana. Uno de los papeles que la lanzaría a lo más alto de la fama fue su interpretación en Lucía y el sexo. Un papel que llegaría hace dos décadas y en el que se apreciaba un rostro bastante diferente a sus primeros papeles.
Ya no tenía ese rostro adolescente y esa larga melena. Además, la película española no solo sería un antes y un después en su carrera profesional.
También sería el inicio de su cambio físico en el que han ido desapareciendo detalles como su hoyuelo de la barbilla, se han retocado sus pómulos, se ha reducido su volumen facial, la mamoplastia, o su retoque más polémico: su nariz.
Ácido hialurónico y su presentación en Hollywood
Paz Vega ha traspasado las fronteras, llegándose a mudarse a Estados Unidos tras un breve parón. Allí, los directores de Hollywood quedaron encantados con la belleza de la actriz española. En esta etapa, poco quedaba de aquella tímida joven que comenzaba en la pequeña pantalla.
Durante 14 años estuvo viviendo al otro lado del charco, donde no cesó de realizar diferentes papeles, entre ellos el de Rambo V: Last Blood, junto con Sylvester Stallone. Y donde ya se podían apreciar su coqueteo con las clínicas de estética.
En su intento por transformarse en una estrella internacional, confiaría en la magia del ácido hialurónico. Gracias a él, Paz Vega ha podido aumentar los pómulos y eliminar las ojeras. Aunque en estos cambios también han podido intervenir otro tipo de tratamientos más allá de estas infiltraciones, como el lipofilling facial (relleno con grasa del mismo paciente para recuperar el volumen).
Su retorno a España con uno de los retoques más polémicos de Paz Vega: la rinoplastia
Unos años después reaparecía muy diferente a aquella joven de los años 90. A pesar de que seguía teniendo trabajos en EE.UU., Paz Vega había tomado la decisión de regresar a su país natal, y que sus hijos creciesen aquí.
Con este cambio de residencia también hubo asociado otro cambio estético bastante evidente en su rostro. Su nariz era mucho más estrecha y fina. Según muchos expertos, esto se debía a una rinoplastia.
Una publicación en Instagram mostró este nuevo cambio, dando a la sevillana un aspecto más juvenil. Aunque no estuvo libre de críticas, ya que generó un gran revuelo en las redes sociales, con comentarios tanto positivos como negativos.
La mamoplastia

Solo en España, unas 50.000 mujeres pasan por el quirófano para un aumento de pecho. Es una de las operaciones estéticas más demandadas. Paz Vega también pudo haber pasado por una mamoplastia hace algunos años, según algunos expertos.
Con este cambio, no solo se puede aumentar la talla, también se pueden realzar y evitar que caigan con la edad. Una forma de luchar contra la gravedad y mejorar su aspecto.
Muchas actrices han confesado haber pasado por este tipo de operaciones para conseguir papeles. Algo que puede parecer sexista, pero que es así en algunos casos. Aunque algunas actrices como Scarlett Johansson o Emily Ratajkowski se han quejado justo de lo contrario, de no conseguir papeles por sus pechos grandes…
Vida Sana
No todo es cirujía, Paz Vega también se ha cuidado bastante durante toda su carrera televisiva. Pocos pueden pensar, viendo el aspecto actual de la sevillana, que ya han pasado 20 años desde Lucía y el sexo.
Uno de sus secretos es su dieta, equilibrada y saludable. Comienzo carne solo 1 vez a la semana o menos. Pero una dieta sin ejercicio no serviría de mucho.
A parte de eso, sus hábitos son también muy sanos, intentando evitar el estrés y no fumar. Algo muy importante, ya que el estrés es uno de los principales enemigos de la salud y del envejecimiento prematuro. En cuanto al tabaco, también es otro de los peores aliados para la piel.
Perdóname, Señor: su último trabajo y los riesgos de Paz Vega
Ahora, en su papel de monja interpretando a Lucía en Perdóname Señor, el aspecto de Paz Vega es mucho más retro, con un cabello más corto y una estética más elegante.
Por el momento, todos los supuestos retoques estéticos han tenido resultados bastante positivos. Pero lo cierto es que tiene el riesgo de hacerse adicta u obsesionarse por estos cambios para luchar contra la edad.
El resultado de estas obsesiones ya se han podido comprobar en otras famosas en las que el bisturí no ha hecho justicia, como Madonna, Demi Moore, Meg Ryan, Kim Bassinger, Sylvester Stallone, Renée Zellwegger, Courtney Cox, o Melani Griffith.