No cabe duda, la cotización por ingresos reales de los autónomos es uno de los temas que más preocupan a quienes están de alta en el RETA. El nuevo sistema está siendo negociado entre el Ministerio de Seguridad Social y las asociaciones que representan a los autónomos, y todavía no se sabe demasiado sobre él.
Aunque las negociaciones comenzaron el año pasado, desde un principio se dejó claro que esta novedad tardaría en llegar. Se hablaba de principios de 2022 como la fecha de previsible implantación de la cotización basada en ingresos reales, pero parece que la llegada del nuevo sistema podría retrasarte todavía un poco más.
La propuesta todavía no está lista

El sistema de cotización de los autónomos a la Seguridad Social que se aplica ahora mismo lleva décadas en uso. Aunque ha recibido todo tipo de críticas, hasta el momento los diferentes Gobiernos que se han sucedido se negaban a realizar un cambio profundo. Pero ahora las cosas han cambiado y se ha decidido abordar, por fin, este tema.
El nuevo régimen de cotización será tan diferente del actual que tiene que estar muy bien regulado para poder ser lo más justo posible y asegurar que realmente los autónomos cotizan en función de lo que están ganando en cada momento. Esto es lo que explica que la propuesta del Ministerio de Seguridad Social esté tardando en ser elaborada algo más de lo previsto inicialmente.
Junio de 2022, fecha clave para la cotización por ingresos reales de los autónomos

El Ministro Escrivá no ha dado plazos concretos al hablar sobre la propuesta de su Ministerio, pero sí ha ratificado que la idea es que el nuevo sistema pueda estar operativo a partir de junio de 2022. Esto supone una desviación en los planes iniciales, porque la idea era arrancar con él a principios del año que viene.
No obstante, todavía es posible que haya más retrasos, porque las principales asociaciones que representan al colectivo autónomo ya han declarado que no están de acuerdo con el sistema que está diseñando la Seguridad Social y que no darán su visto bueno al mismo si no se producen algunos cambios.
¿Cómo será el nuevo sistema de cotización?

Todavía no se sabe a ciencia cierta, pero parece que la propuesta del Ministerio de Seguridad Social consiste en establecer 13 bases de cotización entre las que los autónomos podrían elegir en previsión a los ingresos que van a obtener. Luego se haría una comparación entre la base de cotización elegida y los ingresos realmente obtenidos y se llevarían a cabo los ajustes necesarios.
Esto implica que tras la regularización el autónomo podría quedarse como está si ha cotizado por una base ajustada a sus ingresos netos, tener que pagar más a la Seguridad Social si ha ganado más de lo que pensaba cuando eligió su base, o recibir una devolución de lo que haya cotizado en exceso si sus ingresos netos han sido inferiores a los previstos.
Disconformidad con el sistema de cotización por ingresos reales de los autónomos

A las asociaciones que representan al colectivo autónomo no les terminan de convencer las propuestas del Ministerio, y eso que estas todavía no son firmes. Consideran que, nuevamente, se están dejando de lado las necesidades especiales que tienen aquellos que optan por trabajar por su propia cuenta.
Entre los cambios que piden está el establecimiento de un sistema que permita a los autónomos mayores de 48 años adecuar de forma voluntaria sus cotizaciones a sus ingresos reales y cotizar por una base mensual superior a los 2.077 euros, que es lo que está permitido actualmente. Otra de las reivindicaciones es que los autónomos societarios puedan deducirse como gasto de empresa el pago de su propia cotización.
¿Cómo afectarán los cambios a los autónomos?

De implantarse el sistema de cotización por ingresos reales de los autónomos tal y como lo está definiendo el Ministerio de Seguridad Social, unos dos tercios de quienes ahora mismo están dados de alta en el RETA (aproximadamente 2.000.000 de profesionales) verán reducirse su cuota de cotización, mientras que unos 700.000 tendrán que pagar más de lo que abonan ahora.
En la actualidad, casi el 50% de los autónomos obtienen ingresos mensuales que están por debajo de la cantidad establecida como Salario Mínimo Interprofesional, lo que hace que para ellos sea especialmente complicado mantenerse al día con el pago de las cuotas a la Seguridad Social. Máxime si se tiene en cuenta que la cuota mínima actual alcanza casi los 290 euros al mes. Es a estos a los que beneficiaría especialmente el nuevo sistema de cotización, pero muchos de ellos están en una situación tan delicada con la crisis actual que se teme que para cuando se implante el nuevo régimen de cotización muchos de ellos ya hayan cesado en su actividad.
Hacer el cambio de un sistema de cotización a otro puede llegar a ser extremadamente complicado, por lo que se está evaluando la posibilidad de hacerlo de forma progresiva. Empezando por ciertos colectivos de autónomos y siguiendo luego con otros.