El Gobierno prohíbe despidos por fuerza mayor: insta a aplicar el ERTE

El Gobierno prohíbe por ley los despidos por fuerza mayor y otras causas y recuerda a las empresas que se ha habilitado un mecanismo excepcional como es la aplicación del ERTE. El Consejo de Ministros, reunido en la mañana de este viernes, ha aprobado prohibir por ley el despido por fuerza mayor y por causas económicas, organizativas, técnicas y de producción, según ha anunciado la ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz.

La ministra del ramo ha justificado que esta prohibición se implanta porque ya se ha dado a las empresas un mecanismo excepcional como son los expedientes de regulación de empleo temporal (ERTEs) para realizar los ajustes temporales pertinentes durante la crisis sanitaria sin destruir puestos de trabajo.

El Consejo de Ministros también ha aprobado revisar de oficio todos los ERTEs que se están aprobando estos días para que, si se observa algún tipo de fraude, obligar a las empresas a devolver «hasta el último céntimo de euro» del que se hayan beneficiado, incluyendo las prestaciones por desempleo de los trabajadores afectados.

MORATORIA PARA LOS DESPIDOS EN ITALIA

En Italia, país que va por delante de España unas semanas en la propagación del virus y en la adopción de medidas para combatir la emergencia, también se legisló en esta materia, con carácter de urgencia.

En concreto, el Gobierno italiano ha establecido una moratoria de 60 días a contar desde el pasado 23 de febrero para los despidos por causas objetivas, por lo que las empresas no podrán prescindir de sus empleados alegando motivos económicos, según ha anunciado el Ministerio de Trabajo de Italia en un comunicado.

“Hasta que expire el plazo, las empresas no pueden rescindir los contratos por razones objetivas, independientemente del número de trabajadores”, explicó la ministra de Trabajo, Nunzia Catalfo.

La prohibición de los despidos por causas económicas, no así en el caso de los disciplinarios, forma parte del decreto ‘Cura Italia’, aprobado por el Gobierno italiano y que destina 10.000 millones de una partida total de 25.000 millones de euros a diversas medidas en el mercado laboral.

De esta cifra, la mayor cantidad de recursos irán destinados al “refuerzo de las redes sociales de seguridad”, indicó la ministra.

Aproximadamente 3.000 millones de euros servirán para paliar el impacto de las medidas de contención del coronavirus sobre la actividad de los trabajadores autónomos, incluyendo el pago de un bono de 600 euros para los que hayan perdido su trabajo.

Por otro lado, el decreto del Gobierno italiano contempla durante un periodo de dos meses ampliar de tres a quince días al mes los permisos para los trabajadores discapacitados y aquellos al cuidado de familiares dependientes y se facilitará en la medida de lo posible su acceso al teletrabajo.