miércoles, 11 diciembre 2024

El Corte Inglés pone fin a sus ventas en Cataluña tras obtener 600 M€

El Corte Inglés pone fin a sus ventas de inmuebles en Cataluña tras obtener unos 600 millones de euros en los tres últimos años. La empresa allana su camino para la salida a Bolsa, que se producirá antes de 2028, con un balance inmobiliario a favor. En todas las ventas, El Corte Inglés ha obtenido plusvalías, estimadas en al menos la mitad del precio de venta total, unos 300 millones de euros.

En los últimos años, El Corte Inglés ha vendido su centro logístico en La Bisbal, por 135 millones de euros; otros 150 por el Francesc Macià; y por otros 100 el de Rambla Catalunya. Los 200 últimos faltan aún por concretarlos.

Por el momento, los grandes almacenes dirigidos por Marta Álvarez descartan la venta de otros activos en Cataluña, a los que considera estratégicos, tras ultimar la venta del centro de Portal de L’Àngel a los fondos Redevco y Ares Management, por un lado; y la de Orion, por otro, según ha avanzado Expansión y ha corroborado MERCA2.

CERCA DE 200 M€, LA OFERTA ENCIMA DE LA MESA

Ambas ofertas estipulan un precio de entre 190 y 200 millones por el emblemático e histórico inmueble, antigua sede de Cal Jorba, que proviene de Galerías Preciados. El precio pedido por El Corte Inglés es el más elevado por un inmueble comercial y podría ser la transacción del año en una Barcelona hambrienta por suelo y edificios.

Según fuentes del grupo, «está aún por decidir el tiempo del alquiler». Y es que, como ha ocurrido con otros inmuebles, a El Corte Inglés no le interesa mantenerse en el tiempo estando de inquilino. El inmueble está ubicado en la calle más cara de España, donde los ríos de turistas corren en casi cualquier época del año.

Marta Álvarez prepara la salida a Bolsa de El Corte Inglés
Marta Álvarez prepara la salida a Bolsa de El Corte Inglés

Para el vendedor, el edificio carecía de sentido estratégico este inmueble debido a su cercanía con el gran centro comercial de Plaza Cataluña, ubicado a tan sólo un centenar de metros. Su venta, no obstante, se ha hecho esperar más de un año a la espera de obtener la mejor oferta posible. «No hay prisa por vender», han asegurado las mismas fuentes. Las condiciones del contrato arrojarán un tiempo mínimo de alquiler, como se ha hecho en otras ocasiones en la Ciudad Condal. «No hay aún un tiempo estipulado, pero no será a largo plazo«, han sostenido. Un año de margen daría pie a un posible cambio en el Gobierno de Barcelona y por lo tanto la apertura de nuevas licencias hoteleras.

HOTEL U OFICINAS, TODO DEPENDERÁ DE LAS ELECCIONES

En este edificio, la oferta está orientada al deporte y una primera planta a la tecnología, copada por Samsung. No obstante, las duplicidades con el centro de Plaza Cataluña hacían inviable e insostenible mantener la apertura de ambos. En Portal de L’Àngel, las ventas de algunos productos, especialmente el mobiliario de cocina, apenas arrancaban, como ocurre con los muebles destinados al hogar. «Existen duplicidades entre ambos», han resumido las fuentes.

El edificio se puede reconvertir en un hotel ‘boutique’, tan de moda en los últimos tiempos en otros puntos de España; o bien en un edificio de oficinas. Todo dependerá de un cambio en el Gobierno de Barcelona que ponga fin a la moratoria que pesa en el sector hotelero desde 2017. La ley municipal impide la apertura de nuevos hoteles en Barcelona desde entonces. La otra posibilidad es un edificio de oficinas, que sería muy cotizado debido a su ubicación, pero algo alejado de los principales centros de negocios de la Ciudad Condal, como el 22@.

EL CORTE INGLÉS SE QUEDARÁ CON EL RESTO DE INMUEBLES

El Corte Inglés se ha desprendido de los inmuebles de Galerías Preciados no estratégicos. Lo hizo en 2019 con el centro de Francesc Macià, debido a la duplicidad con la Diagonal. Los estudios del mercado apuntaban entonces que el mismo cliente acudía a ambos. Para simplificar la oferta y mantener el edificio que mejor se adecue para poder albergar toda la oferta disponible en un único inmueble. La compañía vendió el inmueble por 150 millones hace tres años, justo antes de la pandemia.

Por el momento, la empresa mantendrá en el perímetro los centros de Girona, Cornellà, Sabadell, Can Dragó, Diagonal y Meridiana, así como los de Tarragona y Plaza Cataluña. Ninguno de ellos está en venta al ser estratégico, siempre y cuando no haya un nuevo cambio en la reestructuración. Y es que, la salida a Bolsa manda.

Las ventas de inmuebles de El Corte Inglés se estiman en un total de unos 2.000 millones de euros en toda España. No obstante, esta cifra podrá depender de las necesidades y de la llegada de ofertas por estos centros, la inmensa mayoría en los centros de las ciudades más importantes. De hecho, en Tarragona está funcionando mejor debido a que la competencia se ha ubicado fuera de las grandes ciudades.

EL CORTE INGLÉS YA CERRÓ SU ACTIVIDAD EN LLEIDA

En Lleida, por ejemplo, El Corte Inglés sólo tenía una tienda de Sephora, ya cerrada. Se trata de una provincia con una población muy dispersa, donde abundan tiendas comerciales pequeñas, pero no existen grandes almacenes en su interior. El mercado, además, muestra que la tendencia de la sociedad ilerdense no es proclive a este tipo de negocio.

Asimismo, está por ver aún si la concentración de la oferta afectará más tarde o temprano a los centros de Hipercor, como el que tiene en Meridiana, junto a su centro. Por el momento, se mantiene fuera de la cartera de activos en venta, aunque se especuló en el pasado una operación de este tipo.

SOLTAR LASTRE ANTES DE TOCAR LA CAMPANA

El Corte Inglés se encuentra inmerso en esta reestructuración inmobiliaria, donde Madrid aún tiene que cerrar acuerdos de venta. Al mismo tiempo, la compañía de Marta Álvarez prepara su salida a Bolsa, de la mano de Mutua Madrileña, que posee el 8% del capital por unos 555 millones de euros, valorando a la compañía en unos 7.000 millones de euros. El acuerdo se cerró sin estas plusvalías ni tampoco se ha incluido la deuda.

La empresa, además, realizará una amortización de acciones, y dará entrada a Ignacio Garralda, consejero delegado de Mutua en el consejo. El tiempo para sacar del perímetro todos los activos inmobiliarios no estratégicos y tenerlo listo para la salida a Bolsa expira en seis años, tiempo más que suficiente para poder afrontar esta nueva etapa.


- Publicidad -