Dedicado a esclarecer ciertos hechos y a aportar pruebas técnicas en casos determinados, un perito es un profesional con conocimientos en un área específica.
En particular, un perito mercantil es un experto que interviene en aquellos asuntos en los que se requiere una cuantificación económica de los hechos analizados.
De esta manera, los peritos mercantiles se especializan en todo lo relacionado tanto con temas civiles como mercantiles, pudiendo valorar materias derivadas de actos susceptibles de ser valorados, en aspectos tan diversos como cuantificar el valor de un patrimonio personal o el valor de una empresa, o bien indemnizaciones derivadas de actos entre personas o empresas.
En este sentido, la empresa Globátika Lab cuenta con un gabinete de peritos de distintas especialidades capaces de actuar a nivel nacional. El análisis siempre se realiza desde el punto de vista legal. Si el caso lo demanda, el perito mercantil puede trabajar en conjunto con especialistas informáticos y de otras especialidades. En este sentido, la empresa Globátika Lab cuenta con un gabinete de peritos de distintas especialidades capaces de actuar a nivel nacional.
Las tareas de un perito mercantil
Las empresas o los particulares pueden recurrir al trabajo de los peritos mercantiles en distintos casos.
Los dictámenes periciales aglutinan toda la información económica que pueda ser relevante para el caso y establecen conclusiones valoradas que pueden ser defendidas durante un proceso judicial.
El perito mercantil también interviene en los casos en los que hay que cuantificar una indemnización por daños y perjuicios. Destacar en este sentido dos conceptos para estipular las pérdidas: el daño emergente y el lucro cesante. Según se desprende del código civil, el daño emergente consiste en la pérdida efectivamente sufrida, mientras que el lucro cesante es la estipulación de la ganancia que se dejó de percibir.
Los gastos comprendidos en el daño emergente, generalmente, se calculan a partir de las facturas de reparación o reposición de los bienes o propiedades que han sido dañados. En cambio, el lucro cesante hace referencia al dinero, ganancia o renta que no se recibe a causa del daño causado, para lo cual, la experiencia del profesional se hace imprescindible a la hora de determinar los métodos más apropiados en función del caso.
Un perito mercantil, como los que trabajan en Globátika Lab, puede realizar correctamente ambas tasaciones y confeccionar el informe pericial necesario.
Daño emergente y lucro cesante en un caso ejemplar
Por ejemplo, si se piensa en el caso de un trabajador de una empresa informática que abandona su puesto llevándose un software creado por la empresa y provocando daños en el servidor, el daño emergente se deduce del perjuicio producido en los equipos y en los programas. El perito mercantil, con la ayuda de un compañero especialista en informática, deberá hacer un informe completo donde se especifique la descripción de los dispositivos y el alcance del daño.
Continuando con el ejemplo, la empresa que ha sufrido el robo de programas y la rotura de su servidor deberá afrontar pérdidas adicionales por la parada en su actividad derivada de esta situación. Este lucro cesante o pérdida de beneficios producidos como consecuencia de esta situación ha de ser analizada y calculada basándose en criterios económicos de valoración.
Para afrontar casos como este resulta conveniente recurrir a un perito mercantil confiable y de experiencia, tal como los que integran el gabinete de Globátika Lab.