Emprendimiento sénior con la colaboración de Canal Sénior

El emprendimiento sénior es toda aquella iniciativa empresarial encabezada por personas mayores de 55 años, que se encuentran, probablemente, en la etapa final de su carrera profesional. Muchos adultos emprenden porque se han quedado en paro o porque han encontrado la madurez y el tiempo necesarios para echar a andar su idea.

Cualquiera que sea la razón, lo cierto es que las iniciativas empresariales en este segmento poblacional se han incrementado por encima de la media general. El Ministerio del Trabajo dice que este comportamiento se ha evidenciado en los últimos 10 años, pero después de la pandemia se ha afianzado más.

El emprendimiento de los mayores según cifras del Ministerio del Trabajo

Los registros del Ministerio del Trabajo revelan que, para el primer trimestre de 2021, existían en España unos 521.000 autónomos mayores de 50 años. Esto representa más del 28 € del total general. Actualmente, según datos oficiales, los emprendedores en este rango de edad son muchos más que los menores de 30 años.

Las razones de este incremento en la cifra del emprendimiento sénior son variadas, pero la principal es el nivel de desempleo en este grupo etario. Según la Fundación Adecco, en 2019, el 83 % de los gerentes de Recursos Humanos no contrató a nadie mayor de 55 años. Para el 2020, había en España cerca de 1 millón de profesionales desempleados mayores de 50 años, según datos de la Encuesta de Población Activa.

La otra razón por la cual ha subido el emprendimiento senior es que hay una mayor visibilidad para las oportunidades de negocios de esta población. Iniciativas como Canal Sénior han puesto en relieve temáticas, formación y tecnología que brindan a los adultos un panorama más claro para convertirse en autónomos. Bajo el eslogan “si no lo sabes, apréndelo”, esta plataforma de aprendizaje y entretenimiento busca estimular que estas personas mejoren su calidad de vida.

¿Cuáles son las ventajas que tiene el emprendimiento sénior para el aparato económico?

La ejecución de iniciativas por parte de adultos y adultos mayores tiene muchas ventajas para quien las lleva a cabo. Lo primero es que vuelven a ser personas productivas que contribuyen a generar riqueza. Igualmente, promueven la creación de puestos de empleo directo o indirecto.

Lo segundo es que, al abandonar o evitar una vida sedentaria, las personas se vuelven menos propensas a enfermarse, reduciendo sus costes de salud. Las personas que se vuelven emprendedoras incrementan su poder adquisitivo y, con ello, el consumo. De esta manera, contribuyen a dinamizar la economía porque generan una mayor demanda de bienes y servicios.

Un elemento importante que refleja el emprendimiento sénior es que es mucho más estable que las iniciativas que activan personas de menor edad. Esto las coloca en una mejor posición de arranque para empeñar todo su tiempo y recursos en consolidar una nueva idea de negocios.