Nuevo impulso y balón de oxígeno a las compañías constructoras españolas que tienen a EE.UU. como su principal mercado. Joe Biden, presidente de Estados Unidos, ha firmado el proyecto de ley de Infraestructuras dotado con 1,2 billones de dólares por el que se acometerán inversión en las principales redes de tránsito, las autopistas, las carreteras, los puentes y aeropuertos del país. ACS y Ferrovial son dos de las compañías españolas que más se beneficiaran de este plan, debido sobre todo a los proyectos que tienen en este país.
La aprobación de este plan supondrá un empujón en el negocio de ambas compañías. De hecho, y según los cálculos que destacan algunos informes, supondría un impulso en el crecimiento de ambas, que además sería continuo durante ocho años. De las compañías que ahora mismo están en el sector de la construcción en Estados Unidos, ACS, Ferrovial y Hochtief, filial alemana de ACS, serían las tres compañías que mayor parte del pastel acapararían.
Tanto ACS como Ferrovial tienen a Estados Unidos como su principal mercado exterior. Ambas se encuentran ahora mismo inmersa en un cambio de modelo, menos dependiente de la parte de servicios y energías de sus carteras y más enfocadas en los proyectos de infraestructuras. Estos, sobre todo basados en asociaciones público-privadas, llevarán a un incremento de los ingresos de las compañías en el periodo 2021-2022.
Ambas están ya pendientes de este plan e incluso han iniciado conversaciones con actores y estados del país en los que podría haber oportunidades gracias al plan de Biden. Algunos de ellos, y los que se llevarán la mayor parte de este plan, son California (9,33%), Texas (9,25%), Florida (4,81%), Nueva York (4,27%) y Pensilvania (4,17%). Ya en Texas tiene Ferrovial contratos de concesión de sus autopistas. No son pocos los que recibirían con los brazos abiertos esta fuente de ingresos. También ACS ha registrado un aumento de los pedidos que muestran que esta tendencia probablemente se prolongue en el tiempo.
ACS ha registrado un aumento de los pedidos relativos a su cartera estadounidense
CARTERA AMERICANA
La economía estadounidense, de 20 billones de dólares y considerada una de las mayores del mundo, depende de una amplia red de infraestructuras construidas hace décadas que está obstaculizando la competitividad y la productividad. Es por esto que, en cuanto a infraestructuras, el Foro Económico Mundial la ha relegado al puesto 16. El importante estímulo de este paquete de medidas ofrecerá la oportunidad al país de modernizarse y cerrar la brecha con otros países.
Para ACS, Estados Unidos supone el 43% de su cartera y el 53% de las ventas totales de la compañía. A través de su filial Turner, se ha adjudicado varios contratos en estos últimos meses, uno de ellos el relativo a la construcción de un centro médico para veteranos de guerra por un valor de 840 millones de dólares (715 millones de euros). Por su parte, para Ferrovial, la división de autopistas de Estados Unidos le reportaron un 77,6% de las ventas, mientras que la construcción supuso más del 70% de su facturación.
PRINCIPALES INICIATIVAS
Dentro del plan Biden, las principales iniciativas y recursos irán destinados a la parte de aeropuertos y red ferroviaria. La primera de ellas se beneficiará de una inyección de 25.000 millones de dólares, ya que constituyen un pilar fundamental de la economía de los viajes nacionales. En este campo, ACS y su filial Turner son las empresas mejor clasificadas empresas en cuanto a experiencia en la adjudicación de proyectos aeroportuarios. Dentro de este plan de infraestructuras, se espera que se mejoren 48 aeropuertos para 2030.
Por otro lado, la red de ferrocarriles también será una de las principales destinatarias de las inversiones. La filial alemana de ACS, Hochtief, podría ser licitadores y beneficiaria de los nuevos proyectos ferroviarios. Si bien la inversión destinada al ferrocarril de alta velocidad es menos ambiciosa que lo anunciado por Biden durante la campaña, los planes pasan por ir introduciendo poco a poco una mejor red en todos los aspectos. Recientemente, un consorcio formado por ACS y OHLA fue invitado a pujar por la línea de ferrocarril que conectará el centro de Manhattan (Nueva York) con el aeropuerto de La Guardia en apenas 30 minutos. Este proyecto contempla una inversión de 1.800 millones de euros.
