Conocido como síndrome del cambio rápido de zona horaria, síndrome transoceánico, descompensación horaria, disritmia circadiana o, simplemente, jet lag, es un fenómeno que los turistas que viajan en avión a zonas alejadas sufren. Un problema que afecta al bienestar del turista y a su salud, pero que se puede prevenir o reducir si se hacen las cosas adecuadamente.
Lo primero es elegir la mejor aerolínea, que no tenga retrasos. Ya que si al jet lag le añades un cansancio previo con las esperas del aeropuerto, será mucho peor. Esto no siempre está bajo tu control, pero sí que existen muchas cosas que puedes hacer para que tu cuerpo no se resienta cuando vas a un destino con un uso horario muy diferente al tuyo.
Según datos científicos, el reloj interno de nuestro cuerpo tarda en acostumbrarse al nuevo horario en un día por cada hora de diferencia. Además, los científicos han contrastado que el cuerpo se adapta peor a los viajes hacia el este que al oeste. Datos curiosos, pero ciertos…
Síntomas del jet lag
Al viajar en avión, el trastorno del jet lag puede dejar una serie de síntomas que deberías conocer para saber detectarlo. Estos síntomas pueden manifestarse de diferente forma:
- Alteraciones del sueño. Como insomnio, somnolencia, despertarse a horas inadecuadas, etc.
- Fatiga durante el día, una sensación de cansancio muy molesta.
- Falta de concentración o desenvolverte adecuadamente.
- Problemas digestivos como estreñimiento, diarrea, molestias, etc.
- Sensación general de malestar.
- Cambios de humor y otras alteraciones psicológicas.
Estos síntomas se agravan conforme viajas más lejos, es decir, mientras mayor sea la diferencia horaria.
Trucos para prevenir este problema antes de coger el avión
Para que esos síntomas se minimicen o sean prácticamente nulos, puedes tener en cuenta estos trucos cuando vayas a viajar en avión.
Antes del vuelo
- Preparación: intenta cambiar tu rutina progresivamente. Por ejemplo, si viajas a un país con una zona horaria que dista -2 horas del tuyo, puedes comenzar a irte a la cama cada día unos minutos antes hasta llegar a esas dos horas. Igual con otras costumbres como las comidas. De esa forma, tras bajar del avión ya estarás adaptado al uso horario.
- Relajación: es bueno que evites un estrés excesivo los días previos al viaje en avión. Es mejor estar relajado y descansar durante el proceso de preparación para evitar el jet lag.
Durante el vuelo
- Alimentación: debes evitar comer demasiado, es preferible reducir la cantidad. Además, deberías beber bastante agua durante el vuelo. Y, aunque te lo ofrezcan en el avión, evita tomar bebidas energéticas, con cafeína y otros estimulantes, ni alcohol.
- Otros: más cosas que puedes hacer para evitar el jet lag es viajar cómodo durante tu estancia en el avión. Y si es un viaje muy largo, muévete un poco. Si haces escala, aprovecha para darte una ducha relajante.
Tras el vuelo
- Llegada: ya deberías tener tus dispositivos con la hora local. Una vez hecho, aprovecha la luz del día para mantenerte activo y no duermas cuando no corresponde, aunque la inercia sea esa (especialmente si no has cumplido con los trucos previos al vuelo).
- Come y duerme como los locales: al adaptarte a la zona horaria deberías comer y dormir cuando lo hacen los nativos de allí. Aunque algunas personas que van a viajar por negocios u otros motivos, lo que hacen es precisamente lo contrario. Mantener los mismos horarios de sueño y comida que en su país natal, aunque eso signifique estar desincronizados y dormir durante el día, etc.
- Haz ejercicio: pasear, salir a correr, hacer cualquier actividad también evita los síntomas del jet lag.
Con estos pequeños consejos podrás adaptarte mejor en tus próximos vuelos y no sufrir tanto los síntomas que tanto preocupan a muchos turistas…
