Las redes sociales son el día a día de todos nosotros. La persona que no está en Internet parece que no existe, y lo mismo sucede con las empresas. Por ello, si tienes un negocio, no dudes que redes como Instagram se van a convertir en tu mejor aliado.
Pasamos una gran parte del día navegando por las redes. Instagram hace mucho que se dio cuenta del potencial que tenía y no tardó en meter publicidad para que empresas de todo el mundo se dieran a conocer y conectaran con sus clientes y potenciales clientes.
Tu público objetivo nunca ha estado tan al alcance de tu mano como ahora. Pero, ¿qué estrategias poner en práctica para triunfar? Conoce algunos consejos para multiplicar el éxito de tu empresa en la red social.
Nombre corto y fácil de recordar en Instagram
Para que tus usuarios te recuerden, usa un nombre corto, sencillo y que les evoque a tu marca cuando lo lean.
Si tienes una marca definida, con su respectivo nombre, intenta utilizarlo. Si no lo tienes registrado y ya está cogido, intenta que sea lo más fiel posible al original. Muchas empresas utilizan Instagram con un objetivo concreto, como puede ser vender sus productos (ahora la app ha implementado una plataforma sencilla donde comprar es de lo más sencillo). Si quieres triunfar, más vale que tus seguidores sepan por qué nombre buscarte.
Una vez que lo has decidido, no está de más hacer una pequeña campaña de publicidad. Invertir un poco de dinero sabiendo que vas a llegar a tu público objetivo de forma 100% fiable siempre ayudará a dar a conocer tu marca.
Publica con asiduidad
No vale con abrir una cuenta y publicar tu primer post para que empiecen a llegar seguidores como las moscas a la miel.
Instagram no funciona así. De hecho, ninguna red social lo hace. Por eso se llaman redes sociales. Lo ideal es publicar al menos una vez al día, en el horario que más cómodo te sientas o en el que sepas que más gente va a poder ver tus publicaciones.
Para saber esto, un consejo es publicar durante un mes o mes y pico en diferentes horas del día durante todos los días. A final de este período de prueba, podrás ver cuáles son los post con más interacciones. A partir de este momento, puedes comenzar a plantear una estrategia definida haciendo caso al público y publicando con asiduidad en las horas y los días que más relevancia sabes que tienes.
Usa los hashtag, que no te dé miedo
Instagram, como Twitter, se diferencia de otras redes sociales en la presencia de hashtag o etiquetas.
Esto son palabras claves que engloban un tema en concreto. Y serán tu mejor aliado, tanto para ti como para tu empresa. Sobre todo si estás empezando. No hace mucho se comenzó a crear una campaña de «demonización» hacia estas etiquetas porque no quedaban del todo bien. Sin embargo, se ha demostrado que su uso genera una mayor interacción con el post.
La red social te deja incluir hasta 30 en una publicación. Puedes ocuparlos todos o centrarte tan solo en los que te parezcan más relevantes. Haz un estudio de ellos antes de publicarlos. Recuerda que son palabras clave y deben ser tratadas con la misma importancia que para cualquier otra campaña.
Cuida tu perfil y sé original
Instagram se corona como la red del denominado «postureo». Y aunque en una empresa queramos huir de ello, sí que es cierto que la estética juega un papel fundamental.
Cuida tu perfil, estudia los colores. Procura que sean monótonos pero vibrantes. La clave de esto es que, si alguien ve uno de tus post por separado, sepa siempre relacionarlo con tu marca. Es una especie de imagen de marca extendida. Cuida los tonos, las luces de tus imágenes, los textos y tipografías, etc. Como si de un libro de estilo se tratara, tu perfil debe representar la personalidad de la empresa.
Existen aplicaciones como Adobe Lightroom con las que darle ese toque de color original a tu feed es muy sencillo. No está de más probar y experimentar hasta dar con la llave maestra. ¡Verás como notas muy pronto los resultados!
Crea contenido de valor y de calidad
Que sea una red social estética no quiere decir que esté vacía o que la usen personas a las que no les importa nada más.
Los seguidores se comportarán contigo de acuerdo al contenido que tú les ofrezcas. Si te aseguras de crear contenido de valor, relevante y que solucione los problemas de tu público, que los apoye y/o los inspire, verás como nunca te abandonarán.
Otro aspecto muy importante a cuidar es la calidad. De las imágenes, del vídeo, de los textos. Hoy en día ya nadie publica fotos borrosas, por lo que es muy importante fijarte en estos detalles para no caer en picado y generar cero interacción.
Utiliza emoticonos
A todos nos gustan los emoticonos. Nos hacen sentir cercanos con nuestro interlocutor y rompen la monotonía de una conversación.
Que no te dé miedo utilizarlos en las publicaciones de tu Instagram. Está comprobado que aquellos post con emoticonos cuentan con más interacciones que los que no los tienen. Además, ya existe un emoticono para cualquier cosa. Por lo que, si quieres huir de la típica cara sonriente, también puedes centrarte en uno que represente lo que hace tu empresa.
Por ejemplo, ¿ofreces servicios informáticos? Acompaña tus publicaciones con el emoji del ordenador. La idea es romper con el formato solo texto y captar de cualquier forma la atención de los usuarios.
Cuida tu biografía
En Instagram solo podemos poner un solo enlace externo. Y este se encuentra en la biografía. De ahí la importancia de cuidarla.
Cuenta en unas pocas líneas la idea de tu negocio, a qué se dedica o quiénes lo forman. Pero no olvides bajo ningún concepto reservar una línea para realizar una llamada a la acción sobre el enlace que puedes colocar en el perfil.
Esta es la forma en la que, de forma orgánica, podrás atraer tráfico hacia tu sitio web desde la red social. ¡Es importante ser breve y original!
Haz uso del vídeo y las Stories
El vídeo es uno de los formatos más consumidos a día de hoy por los usuarios de Internet. Que se lo digan si no al éxito de Youtube.
Cuando Instagram se dio cuenta del potencial, implementó también la sección Stories, en la que los usuarios pueden subir fotos o vídeos que tienen una duración de 24 horas y que, por regla general, suelen llegar a más gente.
Emplear este tipo de formatos más divertidos y diferentes hará que tu empresa muestre una imagen cercana con el público y no tardarás en recoger los resultados.
