La gestión de Calle 30, la gran obra de Alberto Ruiz-Gallardón que supuso un endeudamiento de 2.500 millones de euros a todos los madrileños, está ahora en cuestión. Es la Cámara de Cuentas de la Comunidad de Madrid quien duda de que el sistema empleado para canalizar su mantenimiento –a través de la sociedad Madrid Calle 30- sea el más indicado, ya que considera que existen “ineficiencias” que, de subsanarse, harían que fuera mucho más rentable para todos los madrileños.
Esta sociedad fue creada para que el consistorio –según el empeño del Ayuntamiento de entonces- no tuviera que anotarse de forma directa a la deuda por la reforma de la M-30 (y reducir el déficit). Así que para ello se creó una sociedad mixta participada en un 80% por el Ayuntamiento de Madrid y en un 20% por la Empresa de Mantenimiento Explotación (EMESA) –que conforman Ferrovial, Dragados (ACS) y API-. Una estructura que, en 2011, Hacienda y la Unión Europea, rechazaron, por lo que -al final- el Ayuntamiento tuvo que ‘comerse’ la obra entera.
Una empresa en la que, según se puede ver en el documento de la Cámara, solo tiene los ingresos que otorga el “Ayuntamiento por los servicios prestados que reciba”. En concreto, el consistorio ingresa en el entorno de los 125 millones ingresados en 2013, aunque nunca podrán superar los 128 millones. De ahí se pagan los gastos de la sociedad que, en este momento, son los siguientes: mantenimiento de la vía y la tributación, según reza el informe de la cámara. Un entramado perfecto que, según se puede ver, favorece claramente a las empresas privadas en detrimento del Ayuntamiento.
El ingreso de las constructoras
Tanto Ferrovial como ACS reciben dinero por distintas vías. La primera de ellas, que no la más importante, los contratos de mantenimiento. Ambas empresas –además de socias- tienen blindado el contrato para esta tarea durante 35 años. Algo que les ha reportado 27 millones de euros en 2012; y 26.8 millones en 2013.
De hecho, el propio informe de la Cámara de Cuentas sentencia que “el modelo económico de la concesión incluye la remuneración del socio-colaborador entre los costes de explotación de la sociedad mixta, pero luego no la tiene en cuenta para calcular la rentabilidad de los servicios de éste”.
Es más, el documento asegura que existe “una gran ineficiencia como consecuencia de la gran diferencia existente entre lo facturado por Madrid Calle 30 al Ayuntamiento y lo facturado por EMESA a Madrid Calle 30 en concepto de conservación y mantenimiento de esta vía ya que, además de dicho concepto, la facturación al Ayuntamiento incluye impuestos más elevados sobre el Valor Añadido y los Beneficios, así como los dividendos que puedan generarse, de los que parte vuelve a revertir al propio Ayuntamiento”.
Pero Ferrovial y ACS no sólo cobran por el mantenimiento. También lo hacen a través de la devolución de un préstamo subordinado que hicieron a Madrid Calle 30. Algo más de 125 millones de euros a un tipo fijo de interés del 5,5% anual y cuyo mantenimiento “es cuestionable, una vez que la financiación contra proyecto ha desaparecido de la empresa”. Un reporte anual de, entre, 6 y 7 millones de euros hasta el 2025 cuando habrá que afrontar la devolución del capital principal del préstamo.
La financiación de la compañía proviene del dinero que el Ayuntamiento de Madrid ingresa en ella. Una cifra no superior a los 128 millones, según dice el contrato inicial, que le permite –también- tener beneficios. Eso hace que los accionistas se repartan dividencoas. La mayor parte, obviamente, vuelve al Consistorio, el resto va a EMESA, que ingresó 8.5 millones en 2012 y 2013, respectivamente).
la Cámara de cuentas cree que el préstamo de los accionistas privados debe devolverse
En definitiva, que –cada año- Ferrovial, Dragados (ACS) y API ingresan algo más de 45 millones de euros. Legal, sí, pero carente de sentido a juicio del Tribunal de Cuentas que –como se ve- cree que podría hacerse una gestión mucho más eficiente. Sin embargo, deshacer este entuerto resulta complejo. El Ayuntamiento de Madrid quiere ahora emplear el documento para revisar los acuerdos. Sin embargo, hasta el 2025 no se abre la ventana a una ruptura unilateral del contrato.
De hecho, para que eso ocurra, las condiciones impuestas son fuertes. Tanto, como que si es el Consistorio quien rompe, tendrá que abonar el valor en libros del 20% del capital. Según cálculos realizados por El Español, supondría un coste cercano a los 200 millones de euros, ya que hay que sumar la devolución del préstamo subordinado.
¿Qué ocurrirá? Es pronto para saberlo todavía, pero todo apunta a que por mucho que Carmena quiera, el contrato con Ferrovial y ACS seguirá vigente durante muchos años más.

El distintivo ambiental identifica el año de matriculación, la marca, el modelo, el combustible, el nivel de emisiones EURO, la potencia fiscal, la categoría y la autonomía eléctrica.
Las redes inteligentes se encuentran en el corazón de las ciudades, que concentrarán en 2050 más del 70% de la población mundial.
En esta línea, la iniciativa de Madrid Foro Empresarial prevé soluciones de tecnología e innovación abierta, en función de la necesidad de incorporar alianzas transversales y multisectoriales para sumar a empresarios, universidad y ciudadanos a un cambio de modelo que va a exigir campañas de sensibilización y formación para la reconversión industrial de muchos sectores industriales tradicionales.
Pero, ¿Por qué triunfó esta cerca en los mercados internacionales? Según los expertos se debe a su alto contenido en metal fino -plata-, pero también a la calidad de su ley, alta e invariable durante un largo periodo de tiempo. Su popularidad, en ningún caso se estableció, como en el modelo económico y monetario actual, por la fortaleza del estado que la respaldaba y España, de hecho, perdió parte de su control una vez que estas cecas salían de sus fronteras.
A la derrota electoral los demócratas han unido el ridículo porque Julian Assange ha declarado, desde su refugio en la embajada ecuatoriana en Londres, que ‘hasta un niño de 14 años hubiera podido hackear a John Podesta’… sin necesidad de que los rusos le ayudaran, se entiende. Hoy en día, el perfil del ‘hacker’ es muy distinto al de hace apenas dos o tres años. Durante más de dos décadas se trataba de jóvenes al estilo del clásico cinematográfico de 1983 ‘War Games’. Chavales que actuaban movidos por la vanidad o por el afán de demostrar que eran capaces de violar cualquier sistema, incluso el más complejo, fuese de un gobierno o de una multinacional. Hoy en día todo está directamente relacionado con la ciberdelincuencia y tiene una motivación económica. Como subrayan los expertos, ‘El cibercrimen ha descubierto a la mafia y la mafia ha descubierto las ventajas de apoyarse en el cibercrimen’.












El SUV (vehículo deportivo utilitario) diseñado por 
El origen de los problemas económicos se remonta a 2001. En aquel año caen las Torres Gemelas en los atentados del 11-S. El mundo empieza a cambiar y arranca uno de los momentos más críticos de la historia. El aumento del precio del euro frente al dólar complica sobremanera las exportaciones de la compañía, haciendo que las pérdidas llegaran a los, casi, 6 millones de euros en 2002.
Ese mismo año llegó el cisma. Se dividió la sociedad y Juan se ocupó de la rama de porcelana, José y Vicente se repartieron el inmobiliario y el agrícola. Era el momento del cisma total, de la ruptura de la unidad que tanto había pedido la madre de los hermanos. Sin embargo, era imposible seguir adelante. Y mientras Lladró veía cómo sus dueños se pegaban, los chinos se forraban a costa de las imitaciones de sus figuras a bajo coste. Así que, en realidad, las ventas no remontaban, los bancos apremiaban a la devolución de los préstamos… Y los números rojos seguían en la cuenta de resultados.
El mismo concepto de propiedad privada existe porque cuesta mucho conseguirla. Si no, todo podía ser público, como les gustaría a algunos que

















La miel del Himalaya se obtiene en las escarpadas montañas de esta cordillera y, para obtenerla, los apicultores se tienen que suspender de grandes cuerdas para llegar hasta unas colmenas que se ubican en los lugares más recónditos de las montañas. Por algo se les conoce como los cazadores de miel.
Se trata de una de las previsiones que hace Barclays, quienes ven factible que en los próximos meses el enfrentamiento entre Washington y Teherán aumente. No olvidemos que Trump quiere desmantelar el acuerdo nuclear firmado con Irán, lo que puede generar «movimientos alcistas en el mercado del crudo». De hecho, los analistas consultados por
Para Saxobank esto se podría producir sólo si la Unión Europea se da cuenta de que tiene que cambiar. Es la única manera de que se pueda frenar el avance del populismo, lo que podría hacer que la postura con Reino Unido sea algo más abierta. Según el banco, a medida que avancen las negociaciones habría una flexibilidad en materia de inmigración y los derechos de las empresas de servicios financieros que tienen sede en Londres.
El déficit de Estados Unidos aumentará con Trump en la presidencia hasta los 1,2 billones de dólares. La
Una economía fuertemente dependiente del cobre. Se teme que los resultados de los comicios que se celebran este año en el país provoque protestas sociales. Es lo que dice Barclays, quien considera que esos sucesos pueden provocar «violentas protestas y enfrentamientos que conlleven un riesgo elevado y real de alteraciones en la producción».
Al contrario del pensamiento de Barclays, las locas previsiones de Saxobank dicen que el metal podría llegar a precios nunca vistos por la parte de abajo. Sería por las dificultades que tendría Donald Trump para poder llevar a cabo las inversiones comprometidas. Esto provocaría que el aumento de la demanda que se espera nunca se consiga. Además, habrá un aumento del proteccionismo lo que complicará la entrada de materiales del exterior generando problemas a países emergentes y a
Puede parecer un chiste, pero no lo es. Resulta complicado encontrar un sólo modelo de Tesla que haya sido entregado a tiempo. Así que no es de extrañar que para Barclays suponga un riesgo. Si consigue empezar a entregarlos a tiempo, y empieza a existir una percepción en el mercado de que las baterías de los coches eléctricos tienen mayor duración; o de que los precios van a ir reduciéndose, podría poner en jaque el mercado del petróleo.








En cualquier caso, si el problema reside en el mundo digital, también es cierto que la solución emana de este mismo campo. Por ello, un grupo de estudiantes de la Universidad de Indiana ha ido un paso más allá para hacer frente a este problema.
















