Hace un mes hablaba en ‘El Hormiguero’ de esta faceta tan loable y necesaria. Igual ya adivinas con este simple dato quién es o también te venga a la mente su nombre si te decimos que ha sido noticia estas últimas semanas, una vez más por su contribución humanitaria. Sepamos de qué chef estamos hablando, su trayectoria, proyectos y por supuesto, ese lado tan humano y de servicio a los más necesitados.
Y es que somos una potencia culinario, con chefs de prestigio internacional. No en vano, el año pasado Dabiz Muñoz fue nombrado el mejor chef del mundo. Pero ya te adelantamos que no se trata de él. Afortunadamente, muchos españoles pueden nombrar varios cocineros famosos y muchos de ellos son referentes también en todo el mundo, con varias estrellas Michelin. Sin embargo, para este chef vale más ayudar a una persona que todas las estrellas del mundo.
EL CHEF Y SU GRAN LABOR, EXPLICADO POR ÉL
Y lo hizo recientemente, hace pocas semanas en la entrevista en ‘El Hormiguero’. En esta ocasión acudía al plató de Antena 3 precisamente para hablar de su labor humanitaria, y no de sus restaurantes o su fama internacional. Y es que este cocinero está ahí desde hace años cuando se le requiere, en cualquier parte del mundo. Y lo hace ya sea en una catástrofe natural, en una pandemia o en una guerra.
Toda esta inmensa labor es posible gracias a su ONG, creada ante su necesidad también de ayudar al prójimo, como él mismo explicó: «Es una llamada porque siempre me di cuenta que cada vez que pasa algo así la gente se queda muy desprotegida», señaló.
PIDE MÁS SENSIBILIZACIÓN Y UNIÓN A LOS COCINEROS
Obviamente a este chef en la misma entrevista clama por que esta labor se extienda a otros chefs conocidos o no: «La gente que sabe dar de comer, que somos los cocineros, nos teníamos que unir para solventar ese problema después de la emergencia«, le decía a Pablo Motos. También apuntaba que de cada una de estas experiencias aprende y que eso le hace dar mejor servicio para llevar comida y agua a cualquier emergencia. Seguro que ya sabes de quién estamos hablando, aunque muchos quizá no le tengan tan ubicados como otros chefs españoles más televisivos y que viven en España. Si, nuestro chef solidario vive fuera pero ayuda donde se le necesita.
LA LABOR HUMANITARIA DE JOSÉ ANDRÉS
Le habrás visto en fotos acompañado de personalidades tan influyentes y mundialmente conocidas como Barak Obama. Es quizá el español que con más confianza se puede pasear por la Casablanca. Y es que José Andrés es toda una celebrity en Estados Unidos, donde reside desde los 21 años y donde obtuvo incluso la nacionalidad. Actualmente Andrés supervisa varios restaurantes de gran prestigio y éxito en Washington, donde reside, con especialidades latinas en general y españolas en particular.
Pero más allá de sus prestigiosos restaurantes, que se codea con la flor y nata norteamericana y su etapa en TVE como presentador culinario, el chef asturiano José Andrés ha destacado también en los últimos años por su labor humanitaria. Tal ha sido el mérito y el reconocimiento, que ha sido nominado al premio Nobel de la Paz. Repasemos lo más destacado de sus labores por los más necesitados…
LA ONG DEL CHEF JOSÉ ANDRES
La clave de todo ello es su ONG ‘World Central Children’, que recodaréis que fue noticia hace pocos meses por instalar puestos en la ciudad fronteriza polaca de Medyka para alimentar a los ucranianos que huían de su país debido a la invasión rusa. Incluso instaló puntos seguros en la misma Ucrania, asociados con otros cocineros autóctonos, para repartir comidas preparadas a miles de personas.
Desde esta última gran labor humanitaria, hasta la primera, tras el terremoto de Haití en 2010, han pasado casi 13 años. Fue precisamente tras el desastre de este país caribeño cuando el chef asturiano y su mujer fundaron la ‘World Center Kitchen’, cuyo objetivo era alimentar a quienes habían sufrido una catástrofe. Resultado: durante estos años ha alimentado a millones de personas.
SU LABOR DURANTE LA PANDEMIA
Como no podía ser de otra forma, la ONG de José Andrés tuvo un gran protagonismo durante la pandemia, en este caso en el país donde reside, Estados Unidos. Allí ofreció comidas a más de 30 millones de personas. Pero no se olvidó de su tierra, puesto que en España hizo lo propio con tres millones.
Su labor fue tal, que se convirtió en un símbolo reconocido por asociaciones, siendo incluso portada de la prestigiosa revista Time, bajo el lema ‘Separados, pero no solos’.
MÁS AYUDA HUMANITARIA DEL CHEF
Pero no queda ahí la cosa. La lista de sus benditas intervenciones es extensa: por ejemplo, en 2017 José Andrés aterrizó en Puerto Rico para ayudar a los afectados por el huracán ‘María’ y en el 2019 a Bahamas tras el paso de ‘Dorian’.
En 2021 volvía a Haití para asistir de nuevo con comidas al castigado pueblo, de nuevo con otro terremoto. Unos meses más tarde aterrizaba en España y se dirigía a Ávila, durante el desolador incendio del mes de agosto, y por supuesto en La Palma, tras la erupción del volcán.
MÁS Y MÁS RECONOCIMIENTOS
Sabemos que los premios y reconocimientos no suponen ningún anhelo para estas personas solidarias, pero está bien recordarlos para darse cuenta de la magnitud del agradecimiento. El último sería especial para él, puesto que lo recibió en su tierra, en Asturias: si, nos referimos al Premio Princesa de Asturias de la Concordia, cuyo montante en metálico, por cierto, lo donó a los afectados por la erupción de La Palma.
También ha recibido la National Humanities Medal, de manos de Barak Obama, el Premio de Solidaridad y Repercusión Internacional del Club Internacional de Prensa y está reconocido como una de las 100 personas más influyentes del mundo, según la prestigiosa lista de Time. También le han premiado por su labor culinaria, por ejemplo con la Orden de las Artes y las Letras de España. Y es que es solidario pero sigue siendo también uno de los mejores cocineros del mundo.
CONOZCAMOS MÁS A ESTE CHEF INTERNACIONAL
Si, porque es español, pero seguramente es de los países donde menos se sabe de él, al residir desde hace tantos años en Estados Unidos. Nació en Mieres, aunque su familia se fue a Barcelona. A los 16 años dejó los estudios para aprender su vocación: ser chef. Estudió en la Escuela de Restauración y Hostelería de la Ciudad Condal. Remató su formación nada menos que al lado de Ferrán Adriá en El Bulli. Allí es donde nació una gran amistad que aún perdura y les ha llevado incluso a iniciar negocios en común.
Es en 1991 cuando llega a Estados Unidos, concretamente a Nueva York, para trabajar en el restaurante El Dorado Petit, y dos años después, nació Jaleo, su primer restaurante en Washington. Allí conocería a su mujer, Patricia Fernández de la Cruz, y allí se quedarían a vivir. Se casaron en 1995 y tienen tres hijas. Y si, lo solidario no está reñido con el dinero, porque gracias a su trabajo como chef y sus negocios, ha acumulado un patrimonio calculado en unos 50 millones de dólares.