Poco a poco nos estamos convirtiendo en unos manitas de la cocina, gracias ricas y fáciles recetas del chef más televisivo y famoso: Karlos Arguiñano. Ahora bien, una de las pruebas de oro para saber si vamos por el buen camino es hacer un arroz meloso. Es uno de sus platos que gusta a toda la familia y que, por cierto, no tiene nada que envidiar a la paella.
Una opción perfecta para compartir con la familia en cualquier ocasión y facilísimo de preparar. Es ideal para un cumpleaños, para una celebración o para cualquier velada en la que quieres demostrar que tus dotes como cocinero ya están aumentando a niveles de estrella Michelín.
El origen del arroz meloso

Antes de ponernos a la parte práctica, vamos a darle a la teoría. Y es que hay que conocer de dónde viene este plato. Esta receta de origen alicantino tiene raíces aristocráticas, pues recibe este nombre debido a que todos sus ingredientes se presentaban pelados, libres de huesos y espinas, para así no ensuciarse las manos. Un plato que nada tiene que envidiar ya a la paella y menos si es de las que se lleva buenas criticas.
El arroz meloso de Arguiñano

Toma nota porque hoy te vamos a enseñar a preparar un suculento arroz meloso con gambones y tomate junto con un rico sofrito de verduras. Uno de esos platos tops que después de haberlo hecho al estilo de Arguiñano te aseguras el triunfo.
Gracias al caldo que elaboramos con las cabezas de los gambones, vamos a conseguir potenciar su sabor y obtener un resultado fantástico. Además, te damos unos consejos para que consigas darle una textura cremosa insuperable. Esos trucos de Arguiñano que nos hacen subir el nivel.
Los ingredientes que necesitas

Comenzamos con los ingredientes que vamos a necesitar para este plato con el toque de Karlos Arguiñano. Primero necesitamos 400 gramos de arroz especial caldosos y melosos, 16 gambones, un tomate maduro, tres cucharadas de tomate frito, 1/2 vaso de vino blanco y un pimiento verde.
Además, una cebolla, dos dientes de ajo, azafrán, una ramita de perejil, aceite de oliva virgen extra y sal. Son como ves ingredientes fáciles de conseguir, porque ya sabemos que la cocina del chef vasco además de rica, es muy económica.
La elaboración de la receta arroz meloso al estilo Arguiñano

Lo primero que tenemos que hacer es dorar las cabezas de los gambones en una cazuela con un poco de aceite. Es algo fundamental para que pueda pillar todos los sabores. Una vez hayan soltado su jugo, pásalas a otra cazuela para hacer el caldo y resérvala con el fondo de los gambones para luego dar sabor al arroz.
Seguimos con la elaboración del caldo. Es el momento de poner las cabezas en agua con una ramita de perejil y azafrán durante unos 20 minutos. Incorpora bastante agua para tener suficiente durante la cocción del arroz y cuando esté hecho, cuélalo para retirar las cabezas y se quede suave y fino. Esta, como asegura Arguiñano, es una de las fases más importantes.
El turno del arroz meloso
Y después de preparar lo que sería el caldo y el sofrito, llega el momento de meter las manos en el arroz. Lo primero es picar la cebolla y los dientes de ajo finamente. Se corta el pimiento verde en dados pequeños y luego se ralla el tomate maduro sin piel. Si lo escaldas antes será todo más sencillo.
A continuación, en la cazuela reservada con el fondo de los gambones, tenemos que añadir un poco más de aceite y sofríer la cebolla, el ajo y el pimiento. Cuando la cebolla tome un color transparente, vierte el vino blanco y deja evaporar el alcohol unos dos minutos. Incorpora el tomate rallado y el tomate frito, remueve y cocina unos 4 o 5 minutos para que se integren todos los sabores.
El truco de Arguiñano

El truco de Arguiñano para este arroz meloso es el saber elegir bien el tipo de arroz que vamos a emplear para preparar la receta. En este caso, necesitamos que el grano coja consistencia de principio a fin mientras el caldo adquiere cuerpo. Así que lo mejor es ir calculando y probando hasta encontrar la mejor solución.
Una receta para sorprender a toda la familia. Quizás la primera vez te podrá salir de suficiente, la segunda de bien y la tercera ya será uno de los platos que tu familia te pedirá que hagas todos los fines de semana y así nos podemos olvidar de la manida paella, aunque sea al estilo de la de Pepe Rodríguez.
Otras opciones fantásticas de arroz meloso

Este arroz meloso al estilo de Arguiñano no es el único que te puedes encontrar en el mercado. En la cocina española existen diversas preparaciones con la denominación arroz meloso. Algunas de las más conocidas es el arroz empedrado, un plato cuaresmal (así que perfecto para esta época) de arroz con alubias (empedrao) y bacalao, que tradicionalmente se suele servir meloso.
También tenemos el arroz a la cordobesa, que suele llevar aves, chorizo, y diversos embutidos; o uno de los más suculentos, que es el arroz meloso de bacalao y pimientos del piquillo, que se puede encontrar en diversas zonas de Barcelona. Tampoco podemos olvidar el arroz meloso con verduras y azafrán como variante de arroz viudo. Si tú has podido con este, está claro que el resto es pan comido y así varías.