Beber cerveza es casi un «deporte» nacional en España. No hay reunión familiar o de amigos en casa, y mucho menos social en exterior, en bares, restaurantes, terrazas, chiringuitos… que no tengan como protagonista a la cerveza. De hecho, ya usamos la expresión «tomar unas cervezas» para referirnos a quedar, a reunirse y charlas, porque van indefectiblemente unidos. Pero como pasa en tantos órdenes de la vida, incluido en la gastronomía y las diferentes versiones de recetas y platos, con la cerveza pasa algo similar. En este caso sobre cómo se pide y se sirve una cerveza. Parece algo baladí pero es otro factor vital que depende de la zona y de los gustos de cada uno. Suelen ser fieles a cada uno de ellos. Vamos a saber todo sobre la cerveza y principalmente las formas de pedirla y servirla en cada zona o región española.
ESPAÑA, UN PAÍS CERVECERO
Si ya era así, con la llegada de la pandemia la cosa aumentó mucho. Pero, aunque no hubiera habido esta desgraciada circunstancia, el consumo de cerveza en nuestro país ha ido aumentando año tras año hasta situarse en uno de los países que más cerveza consume del mundo. Es más que consumo de una bebida alcohólica, es una forma de vida y de socializar, formando parte de nuestra cultura más profunda, sobre todo en zonas urbanas.
Además, y esto siempre es importante y difícil de lograr, la cerveza no distingue de clases sociales, género, poder adquisitivo, edad… Es totalmente igualitaria y transversal. Se van de cañas un grupo de directivos de una gran empresa que unos amigos de un barrio deprimido con pocos euros en el bolsillo. Las formas y el éxito es el mismo en un barrio rico como humilde.
MÁS DATOS DE LA CERVEZA EN ESPAÑA
El 85% de la cerveza que se consume en España se produce en el país. Además, España es el tercer país de la Unión Europea productor de cerveza y el décimo del mundo. También es un producto muy deseado fuera de España. Muestra de ello es que las exportaciones de cerveza han crecido más de un 300% en los últimos años. El sector cervecero es uno de los más dinámicos de España.
FORMAS DE PEDIR UNA CERVEZA
Hay 7 formas fundamentales (aunque hay más, como veremos) de pedir cerveza en España:
Caña de cerveza, la normal, la de toda la vida.
Un corto de cerveza, zurito, penalti.
Una clara, o caña con gas, caña con limón.
Tubo de cerveza, de toda la vida.
Jarra de cerveza, casi medio litro, aproximadamente.
Litro de cerveza, también conocido como mini o katxi.
Botellín de Ambar.
Veámoslo pormenorizadamente…
NOMENCLATURA BÁSICA DE LA CERVEZA
Vamos concretando para convertirte en un experto cervecero. Lo primero, como decíamos, es extendernos en las formas de pedir cerveza y en sus tipos. Comenzamos con el más habitual, la famosa caña. Es lo más extendido y por defecto, lo que te sirven. No hay rincón de España donde no se utilice esta denominación. Siempre, claro, será de grifo, si no no es caña.
Pero hay matices, sobre todo en la cantidad: mientras que en Madrid la medida del vaso es de 200 ml, en otros lugares el tamaño es superior. Así, si un vasco quiere tomarse los 350 ml de una caña vasca en Madrid, tendrá que pedir un doble, que es la medida más parecida.
EL DOBLE, EL CORTO, ZURITO O PENALTI
En Castilla y León se van más bien de cortos, sobre todo en Valladolid o Salamanca, donde se sirve cerveza de grifo en vasos más pequeños de culo ancho. Estos se conocen como cortos y normalmente su medida oscila entre 100 y 140 ml. Pero, hay otras variantes, como en Galicia, donde un corto es la caña de toda la vida, y una vez más en el País Vasco, donde es mejor llamarlo zurito, o en Aragón y su penalti.
En cuanto al doble, si partimos de la base que la caña digamos «oficial» serían 200 ml, el doble sería 400 ml, pero una vez más no siempre es así y depende de la zona. Así, en el País Vasco si quieres 400 ml de cerveza deberás pedir un cañón.
BOTELLINES O QUINTOS Y TERCIOS
Seguimos con la denominación cervecera. Quizá después de la caña, lo más habitual en boca de la clientela es pedir un botellín o quinto, ya que muchos prefieren beber «a morro». Son botellas de 200 ml, es decir, la cantidad similar a una caña tipo. El quinto sería más propio del noroeste del país. Se llama así porque es la quinta parte de un litro, como hemos visto en la cantidad. Y un matiz más: si vives en Madrid y usas o escuchas la jerga castiza, oirás pedir un botijo, que es un equivalente al botellín o quinto.
En cuanto al tercio, hablamos del botellín más grande, para los que quieren tomar un tercio de litro de cerveza en botella. Sin embargo, en Asturias o Cantabria se pediría una media y en Cataluña una mediana. Si la botella es de 1 litro, el nombre es sencillo: de litro, pues litrona.
Para los que se han liado, nada mejor que consultar el mapa que hemos adjuntado antes.
RESUMEN DE CÓMO PEDIR CERVEZA POR REGIONES
Vamos a ir esquematizando todo el contenido. Ponte en el lugar de pedir una cerveza según donde estés. Pues toma buena nota porque lo concretamos por zonas. Donde fueres, haz lo que vieres:
«Una caña, por favor»: La más común, que te servirá en casi toda España. Sin embargo, cambia el verbo y la cantidad. Una caña doble en Madrid es una caña en Bilbao.
Si quieres cerveza, pero en menor cantidad que una caña, hay varios nombres. En el País Vasco se llama zurito, por la zona de León y en La Rioja se dice corto, mientras que en Aragón lo llaman penalti. Veamos más…
«UNA CERVEZA, POR FAVOR»
Muchos lo piden así, sin más, sin mayor concreción. Si sólo queremos cerveza, sin más, vamos bien pero con matices, porque puede ser que nos guste con limonada o con gaseosa, y de hecho el camarero te hará alguna pregunta en el sentido de saber qué quieres exactamente. En ese caso tendremos que pedir una clara, por ejemplo. En Zaragoza son más de decir claramente: una caña con gas o una caña con limón. Y maticemos bien las palabras, porque quizá pidas en Madrid un tubo con gas y te sirvan una jarra llena de gaseosa.
SI VAS A POR TODAS
Habitual en fiestas y celebraciones donde quieres darlo todo. Son los casos donde apuestas fuerte y vas a por el litro o los litros de cerveza. Se suelen servir en vasos de plástico por razones evidentes, pero sobre todo porque se consumen normalmente en exterior: fiestas de pueblos y conciertos. Si estás en el norte, tendrás que usar la palabra katxi, que también se usa mucho en Castilla y León (cachis). En Madrid serían minis, algo muy paradójico, pero así es el idioma español.
CERVEZA CON VERBO
Recuerda: la cerveza se bebe pero para ser servida se echa, se tira o se pone. «Ponme dos cañas anda, échame un par de cañas, tírame un par de cañas». En el universo cervecero las formas no son tanto, o incluso suena raro o falso. Eso de por favor, me puede poner usted…? Pues no, la cerveza es sinónimo de colegueo, de relajación social, de informalidad en el mejor sentido. Así que, pongas o no el «por favor» no pasa nada, incluso quita confianza a la escena cervecera.
¿QUÉ ES LA CERVEZA REALMENTE?
Se trata de una bebida alcohólica, que no procede de destilación, y que se fabrica a partir de agua y granos de cebada germinados, entre otros cereales.
Además, para su fermentación se agrega levadura, y se aromatiza con plantas como el lúpulo. Tras un tiempo de fermentación, las bacterias han hecho su trabajo y ya está lista para embotellar.
¿REALMENTE ES BUENA?
No hay que olvidar que no todo lo que reluce es oro. La cerveza no deja de ser una bebida alcohólica, y necesita que se consuma con moderación. El alcohol tiene efectos negativos sobre tu hígado.
Por tanto, este contenido de alcohol puede generar enfermedades graves si se abusa de él, e incluso cáncer de boca, mama, garganta, laringe, esófago, hígado, colon y recto, entre otros problemas digestivos. Sin contar problemas como la alcoholemia.
BENEFICIOS DE LA CERVEZA PARA LA SALUD
A la cerveza, como a otros muchos productos, se le han buscado todo tipo de beneficios para fomentar su consumo. Algo que está especialmente impulsada por esta industria. Entre los supuestos beneficios para la salud se encuentran:
Aporta vitaminas del grupo B, así como minerales como el magnesio y el calcio.
Es diurética, eliminando toxinas.
Contiene fibra soluble llamada betaglucano, y puede reducir los niveles de colesterol.
Es hidratante por su contenido en agua.
Puede contribuir a mejorar la respuesta del sistema inmune, especialmente en mujeres.
Ayuda a prevenir ciertas enfermedades neurodegenerativas.
Puede aumentar el nivel de lipoproteínas, lo que mejora la salud cardiovascular.
¿LA CERVEZA ENGORDA? EL MITO DE LA BARRIGA CERVECERA
Lo cierto es que la mala fama de que la cerveza engorda no está fundada. La famosa panza cervecera deberá encontrar otro causante lejos de esta bebida, ya que aporta muy pocas calorías e incluso es compatible con la dieta.En el caso de la cerveza, solo aporta 43 calorías por cada 100 ml de este producto, lo que es algo muy bajo incluso comparado con alimentos saludables.
EFECTOS DE LA CERVEZA
Obviamente, como en todos los órdenes, cada cuerpo es un mundo y le afectará de manera diferente y sentará mejor o peor en virtud de sus características fisiológicas, hormonales o metabólicas. la cerveza contiene un alto grado calórico, entre las 60 y 240 en 30 centilitros. Puede parecer algo moderado, pero según Elizabeth Huggins, una de las mejores dietistas estadounidenses, «puede conducir rápidamente a una situación de sobrepeso, sobre todo si la acompañas con unos snacks”. Sin duda, es lo más probable, sean snacks allí o la típica tapa o raciones aquí.
MÁS EFECTOS NEGATIVOS
Otro de los efectos negativos es la sensación de letargo que produce en el cuerpo, aunque por fuera el alcohol siempre nos parece que da subidón y te sientes más alegre, ya que según un estudio publicado en 2013 en la revista Neuropsychopharmacology, al beber cerveza aumentan los niveles de dopamina. El cuerpo se siente más hinchado y cansado. Por supuesto, si la ingesta diaria se hace en casa, sentado en el sofá, la situación se agravará tanto en lo físico como en lo mental y anímico. También produce irritación en el tracto digestivo.
OTRAS CONSECUENCIAS DE TOMAR CERVEZA
Beber cerveza a diario también afecta negativamente al ciclo del sueño, lo que hace que sea muy perjudicial para la salud general. Y es que el sueño reparador y las horas adecuadas es el pilar fundamental y la base sobre la que comienza una buena salud.
Los expertos también apuntan a que un sueño débil o pobre interfiere mucho en el correcto funcionamiento del cerebro y nuestra energía disponible para el siguiente día. Beber demasiada cerveza puede causar una disrupción del sueño debido a que tus niveles de insulina se disparan en mitad de la noche, lo que hace que te mantengas dormido solo a un nivel superficial. Por tanto, a la mañana te sentirás un poco ‘groggy’ y nada descansado para el resto del día.
Hablamos de una después de su ingesta, por no hablar de que, al afectar el alcohol a los centros de recompensa del cerebro, el tomar un solo vaso de cerveza provoca el deseo de tomar otro y otro. Y es que una simple cerveza tiene consecuencias inmediatas en tu cuerpo, desde el cerebro hasta los ojos y nuestros niveles de azúcar en sangre.
Tras un solo botellín de cerveza o caña empezamos a perder nuestras inhibiciones y nuestro organismo empieza a resentirse, aunque dependiendo del peso y del género o de lo que llevemos en el estómago (a más vacío, más afecta el alcohol). Ya al poco tiempo de tomarnos la cerveza se desencadena la liberación de la hormona del amor, con el consiguiente deseo de beber más. También hay pérdida de visión, ligeros mareos o sensación de hambre y aumento del deseo de miccionar.
PERO TRANQUILO, PODRÁ SEGUIR CON TU VIDA SOCIAL
No, no queremos, tras desglosar como pedir una cerveza según los sitios y luego ser aguafiestas, quitarte las ganas y la costumbre de algo tan arraigado. Además, al margen de que una caña no hace daño a casi nadie, como casi con cualquier cosa en la vida, hay el lado bueno. Los beneficios de tomar una cerveza son indudables: según un estudio publicado en la revista Behavioral Brain Research, la cerveza contiene un tipo de flavonoide llamado xantohumol que podría mejorar nuestra función cognitiva y aumentar la capacidad intelectual. También contiene importantes cantidades de antioxidantes que ayudan a combatir los radicales libres. Pero hay más…
MÁS RAZONES PARA PEDIR UNA CERVEZA SIN REMORDIMIENTOS
Beneficia también a los ojos, aunque a partir de tres cervezas, los beneficios se pierden. Tras una caña, también disminuyen los niveles de azúcar en sangre, tiene efectos beneficiosos para el corazón gracias a las propiedades antiinflamatorias que contiene y también para tus riñones: así lo aseguraba una investigación publicada en American Journal of Epidemiology según la cual consumir una botella de cerveza al día reduce hasta en un 40% el riesgo de padecer los dolorosos cálculos renales.
EN DEFINITIVA…
LA CERVEZA ES NUTRITIVA
La cerveza cuenta con antioxidantes que pueden ser muy útiles para el cuerpo, además que contiene proteínas, hierro, calcio, fósforo, fibra y vitamina B. Esto convierte a la cerveza como una de las bebidas alcohólicas más nutritivas de todas.
FORTALECE LOS HUESOS
La cerveza es rica en silicio, gracias a esto puede ayudar a fortalecer los huesos. El silicio dietético forma un papel muy importante para el crecimiento y desarrollo de los huesos, Además que ayuda a reducir el riesgo de osteoporosis
LA CERVEZA AYUDA A REDUCIR EL ESTRÉS
Un estudio demostró que un vaso de cerveza diario puede ser útil para reducir los niveles de estrés o ansiedad relacionados al trabajo. Sin embargo, recurrir al alcohol para reducir el estrés de forma recurrente puede producir daños a largo plazo.