Conocida como “El tesoro del Pacífico”, la Isla de Pascua, con un territorio ubicado a 3.700 kilómetros de tierra firme, es considerada la isla más misteriosa del mundo por los arqueólogos que, pese a los años que pasen, no terminan de entender ciertos fenómenos.
La isla no es una tierra en uso, fue llamada Rapa Nui (tierra grande) por su población nativa y algunos la consideran como la joya más cultural del pacífico. Con volcanes, esculturas superantiguas y granes acantilados, ocupa un lugar histórico importante y un misterio para los estudiosos de los cambios en las sociedades. En este artículo te contaremos sobre la misteriosa Isla de Pascua.
La Isla de Pascua, en Chile
La «joya del Pacífico» es un destino irresistible para los amantes de los destinos diferentes e incluso misteriosos. Ni simples playas ni montañas, estamos hablando de nada más y nada menos que un lugar en el que podrás visitar el volcán Rano Kau o los Moáis. Siete grandes estatuas se encuentran cerca de la ciudad, ubicadas en sentido equinoccial, formando el santuario de Ahu Akivi.
El misterio que gira alrededor de esta isla son las grandes estatuas de piedra que la caracterizan (Moáis), y que fueron talladas por los primeros habitantes de esta tierra. Este sitio es un verdadero enigma arqueológico, puesto que nadie logra revelar cómo los nativos pudieron transportar las enormes esculturas que llegan a pesar hasta 80 toneladas y miden hasta diez metros de alto. Además, en la isla hay rastros de un antiguo sistema de escritura llamado «Rongo Rongo» que aún no ha sido descifrado, y es una gran cuestión para los arqueólogos el saber qué dejaron escrito las antiguas sociedades de la isla.
Curiosidades de la Isla de Pascua
La isla que se descubrió por «casualidad», puesto que está ubicada a 3.700 kilómetros de tierra firme, consta de otras curiosidades atrapantes para los fanáticos de los acontecimientos históricos o la arqueología. Con un total de 900 moáis ocupan la isla, que es Patrimonio de la Humanidad desde 1995; la isla está habitada por menos de 10.000 personas, a pesar de su extensión, casi un milagro si se descubre que, tras la colonización del siglo XIX, apenas quedaron 111 nativos en la isla.
Descubierta en la Semana Santa de 1722 por Jakob Roggeveen, los habitantes la llamaban hasta entonces Te pito o te henua (el ombligo del mundo). Según un informe de National Geographic, hoy en día, más de 300 años después de su descubrimiento, la isla sigue atrayendo cada año a miles de turistas a la Isla de Pascua.
