sábado, 14 diciembre 2024

Los sándwiches de pollo de Lidl sin pollo

La cadena alemana de supermercados, Lidl, está recibiendo bastantes quejas de sus clientes a través de las redes sociales, más concretamente por Twitter. Quejas donde los consumidores pueden expresar el descontento con la empresa de distribución. El malestar de los clientes viene desde hace tiempo ya sea por el mal funcionamiento de la cadena, la falta de un catálogo online en condiciones, y productos incompletos.

La cadena alemana ha sido una de las compañías a las que mejor le fue en 2022, ya que ha sido la cadena de supermercados que más ha crecido en España. Así, Lidl ha crecido, en estos últimos 12 meses, cinco cifras, lo que ya posiciona a la compañía con un 6% de mercado de cuota en España. Los supermercados alemanes consolidan más su posición, ya que han logrado afianzarse en la tercera posición del ránking español de los supermercados por cuota de mercado.

Esta vez, Lidl ha sido la última protagonista de una importante queja en Twitter. Artículos que les faltan piezas, productos pasados de fecha, y por supuesto, alguna imagen curiosa de ingredientes inesperados demuestra que hay que comprar con mil ojos y también hay que guardar siempre los tickets durante un periodo de tiempo similar al del consumo. También clientes se quejan por el mal estado de los productos ‘Es posible que me haya pasado ya 3 veces que la carne que os compro, esta mala nada más por el olor’, expresa un usuario molesto con la cadena alemana.

LIDL VENDE PRODUCTOS INCOMPLETOS

Muchas veces tardamos más tiempo de lo normal en hacer la compra ya que nos tenemos que ir fijando en muchos detalles como, por ejemplo, la fecha de caducidad, que este el producto completo, en los ingredientes que contiene el alimento y el precio. No siempre salen productos con la calidad que el usuario espera, o lo más grave, como vende el distribuidor.

Tanto en las tiendas como en sus canales de atención al cliente, no son pocos los usuarios que se quejan de que los productos llegan incompletos o con las cajas abiertas. De ahí la importancia de revisar bien todo y guardar el ticket hasta el momento de montar o utilizar, ya que Lidl tiene un periodo de garantía de devolución de 30 días.

UNOS ERRORES QUE SE SIGUEN REPITIENDO Y QUE LOS CLIENTES OPTAN POR ACUDIR A OTRO SUPERMERCADO

Un cliente vía Twitter expuso su enfado contra Lidl ‘Estos son los sándwiches que venden ahora en Lidl, vacíos. Bueno no, que tiene esencia de pollo’. Como bien se puede observar en la imagen en bocadillo del cliente se ve abierto para observar bien los ingredientes con los que cuenta el sándwich de pollo.

En concreto un bocadillo con dos trozos de lechuga contados, un poco de salsa y un trozo de pollo. Lo más impresionante es que un sándwich de pollo de Lidl te cuesta alrededor de dos euros y esperas que este bien de cantidad y sobretodo que te llene y cuente con los ingredientes que realmente pone en el embalaje.

Sándwich de pollo de Lidl
Sándwich de pollo de Lidl

Como bien respondió el cliente tras la fotografía estamos hablando de un producto por dos euros que es ‘pan con pan’ y que hasta que no lo has comprado ni lo abres no puedes darte cuenta que no está correcto y ya se pone en duda que al abrirlo los responsables de la atención al cliente de la cadena alemana decidan cambiarlo o devolverte el dinero.

LA CADENA ALEMANA NO APRENDE DE LOS ERRORES

Son muchas las críticas a las que tienen que hacer frente, pero sin embargo no ven el momento de ponerse a solucionar los problemas y atender de buenas formas a todos los consumidores y clientes fieles.

La respuesta de la cadena alemana al comentario del usuario de Twitter es la siguiente ‘Hola, para poder ayudarte, necesitamos por mensaje privado tus datos personales (nombre completo y correo electrónico), los datos del producto (lote, fecha de caducidad y código de barras) y la tienda dónde lo compraste. Esperamos tu respuesta. Un saludo’.

El mensaje es algo cordial para complacer al cliente y que se refleje que la cadena alemana se preocupa por sus consumidores. Pero una respuesta que se escribió un día después y en la que piden el código de barras, el lote y la fecha de caducidad, le estas pidiendo al cliente que tiene que guardarse el plástico del sándwich y que este pendiente de facilitar todos esos datos.

No pueden pedir esos datos de un producto que lo más seguro es que el cliente haya tirado el embalaje y el sándwich. Lidl tiene que intentar arreglar su comunicación con los clientes y tener más cuidado con los productos que venden para no seguir en el punto de mira de los consumidores y de las redes sociales.


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