El producto interior bruto (PIB) de Francia crecerá un 0,2% en los tres primeros meses de 2023, según la nueva estimación del Banco de Francia, que ha incrementado una décima su pronóstico para la segunda mayor economía de la zona euro.
Según la encuesta mensual que elabora el banco central del país galo con la participación de 8.500 empresas la actividad aumentó en marzo en la industria, los servicios y la construcción.
Asimismo, los empresarios franceses expresaron su confianza en que en el mes de abril el crecimiento de la actividad en la industria y los servicios se acelerará, mientras que anticipan una caída en la construcción.
En cuanto a la inflación, las empresas consultadas consideraron que los precios de las materias primas se estabilizaron en marzo y apuntaron una desaceleración en los precios de venta de sus productos terminados, excepto en la industria alimentaria, donde los aumentos de precios siguen siendo altos.
«Nuestro indicador de incertidumbre se mantiene sin cambios en los tres grandes sectores respecto al mes anterior, en niveles aún elevados respecto a los prevalecientes antes de 2020», ha advertido el Banco de Francia.