La caída de beneficios de Almirall no sorprende a los mercados

Al parecer, la única sorpresa reciente de Almirall ha sido la inesperada salida de su CEO. Este jueves la farmacéutica española presentó unos resultados trimestrales que, según ha señalado la compañía española, estuvieron en línea con sus expectativas: un resultado bruto de explotación (Ebitda) en baja y unos beneficios netos normalizados que cayeron con más fuerza en los primeros nueve meses del año.

El Ebitda total descendió un 19,2% interanual hasta los 146,4 millones de euros, «en línea con la evolución esperada, ya que en 2021 se produjeron desinversiones de productos e ingresos diferidos», ha dicho la empresa en un comunicado. Almirall también ha explicado que ese indicador también se vio afectado por el aumento de las inversiones en I+D y los gastos generales y de administración relacionados con los nuevos y próximos lanzamientos.

Entre tanto, los beneficios netos normalizados se situaron en 32,7 millones de euros, un monto que significó un retroceso de 46,8% con respecto a los primeros nueve meses del año pasado, superior al -17,2% mostrado en igual periodo de 2021.

Las ventas netas crecieron a un nivel similar al registrado el año pasado y la empresa destacó que la contribución del portafolio de dermatología en el mercado europeo fue fuerte

El beneficio neto normalizado de Almirall al tercer trimestre del año ha supuesto un beneficio por acción normalizado de 0,18 euros por acción.

UN NEGOCIO PRINCIPAL QUE «SIGUE FUNCIONANDO BIEN»

No obstante, las ventas netas crecieron a un nivel similar al registrado el año pasado y la empresa destacó que la contribución del portafolio de dermatología en el mercado europeo fue fuerte. Las ventas netas core alcanzaron los 633,8 millones de euros, con un aumento interanual del 5,3%, muy similar al nivel logrado en igual periodo del año pasado.

«Nuestro negocio principal sigue funcionando bien, en línea con nuestras expectativas, lo que nos sitúa en el objetivo de alcanzar nuestras estimaciones financieras para 2022», ha dicho en un comunicado el CEO interino de Almirall, Carlos Gallardo.

Gallardo está provisionalmente al mando de la compañía desde la semana pasada, cuando el anterior CEO, Gianfranco Nazzi, dejó inesperadamente su cargo «para afrontar nuevos retos profesionales», según explicó Almirall en ese momento.

«La compañía puede contar con mi total dedicación y compromiso y con la de todo el equipo ejecutivo de Almirall mientras dure la búsqueda del nuevo máximo ejecutivo», ha destacado el CEO interino de la farmacéutica.

La farmacéutica española ha avisado que se mantienen las estimaciones financieras previstas para este año

La farmacéutica española ha avisado que se mantienen las estimaciones financieras previstas para este año de unas ventas netas core con un crecimiento de un dígito medio y un EBITDA total entre 190 y 210 millones de euros.

Almirall espera mejoras significativas de su negocio una vez que se comience a comercializar su medicamento para dermatitis atópica lebrikizumab, que ya recibió en el tercer trimestre la aceptación de la EMA de la solicitud de autorización de comercialización.

«Este anuncio es una confirmación más de que estamos progresando bien con nuestro portafolio de investigación, con más interesantes avances previstos para los próximos trimestres. Mientras tanto, seguimos preparando la compañía para los próximos lanzamientos y maximizar el crecimiento del portafolio actual», ha señalado la farmacéutica en el comunicado publicado al presentar los resultados de los tres primeros trimestres del año.

MANTENER LA ACCIÓN DE ALMIRALL

Los inversionistas han premiado que los resultados registrados por la empresa entre enero y septiembre estuvieran a tono con las previsiones, al tiempo que han sido indulgentes con el impacto que ha tenido sobre las cuentas el deterioro de los activos de la farmacéutica.

Al cierre de la sesión de este jueves de la Bolsa de Madrid, las acciones de Almirall terminaron con un precio de 9,14 euros, lo que representó un ascenso de 0,72%.

El nivel de los papeles de la compañía española está aún por debajo de lo que esperan los analistas. Álvaro Arístegui de Renta 4 recomendó mantener la acción de Almirall, cuyo precio objetivo estima en 12,4 euros por acción, alrededor de un 35% por encima del nivel registrado al cierre de la sesión de este jueves en el mercado bursátil madrileño.

La deuda de Almirall se situó hasta septiembre en 159,4 millones de euros

Arístegui destacó en su reporte que la discontinuación de las ventas de productos del “legacy portfolio” supuso deterioros de 16,5 millones de euros, una situación que se unió a los gastos de reestructuración por 4,8 millones de euros, para dar como resultado un beneficio neto en terreno negativo.

El analista de Renta 4 también destacó el hecho de que la deuda de Almirall que se situó al final del mes de septiembre en un total de 159,4 millones de euros, con una reducción desde el inicio del ejercicio de 83 millones de euros debido a un buen flujo de caja y a la reducción de los gastos en planes de pensiones.