El sector retail se enfrenta a un escenario pesimista en ventas para los próximos meses. Las previsiones inflacionistas de los bancos centrales superan las expectativas y el endurecimiento de tipos de interés para frenar el alza de precios se traducirá en un descenso del consumo. Inditex es una de las grandes compañías que se verá afectada por la deriva económica global y no son pocas las firmas de inversión que ya han sacado la tijera en sus análisis sobre la compañía textil, provocando nuevas caídas en su cotización.
Una tesitura que ha dado pie a que grandes fondos de inversión se deshagan de posiciones en la compañía, mientras que otras han reforzado sus compras en mitad del vendaval. Algunos de los bancos de mayor renombre internacional han optado por decisiones diferentes respecto al valor, tal y como reflejan los movimientos de los últimos días en el mes de septiembre.
De este modo, por el lado de las compras se encuentran grandes firmas como BlackRock, Deutsche Bank, UBS o HSBC. El gigante norteamericano ha sido uno de los fondos que más recientemente han comprado acciones de la multinacional que preside Marta Ortega, con la adquisición el pasado 9 de septiembre de 2.865.447 acciones, lo que supone incrementar su posición hasta el 1,33%, según consta en los registros de Bloomberg.
Por su parte, el banco alemán también realizó un movimiento similar el mismo día, comprando 1.137.376 acciones, elevando su posición hasta el 0,27%. Dos días antes, los bancos suizos incrementaron su posición con la compra de 271.148 títulos por parte de UBS (hasta el 0,18%) y 306.659 acciones por parte de HSBC (hasta el 0,08%).
EL ROYAL BANK OF CANADA DA LA ESPANTADA EN INDITEX
Pero no todos los grandes fondos han valorado como una oportunidad la situación actual para los minoristas del comercio ni para Inditex. En este sentido, el Royal Bank of Canada (RBC), el banco más importante del país, ha ejecutado recientemente la mayor venta de acciones entre las grandes firmas que invierten en la compañía española.
La entidad canadiense se ha deshecho de un total de 12.189.108 acciones en una operación registrada el pasado jueves 8 de septiembre, lo que supone haberse quedado solamente con cerca de 500.000 títulos de Inditex, el 0,02% de su capital. Asimismo y, aunque en menor medida, el grupo bancario francés Crédit Agricole también ha sido protagonista por sus ventas durante esta semana.
De este modo, la institución gala se desprendió de algo más de un millón de acciones hasta rebajar su posición al 0,48% en el capital de la compañía textil. Un movimiento ejecutado también el viernes 9 de septiembre. También el holding financiero Power Corporation Of Canada vendió parte de su participación en la compañía dueña de Zara, deshaciéndose de 376.661 acciones hasta reducir su posición al 0,16%.
UN PROFIT WARNING QUE PONE EN ADVERTENCIA AL SECTOR
Tanto el refuerzo en las posiciones de algunos de los grandes bancos internacionales sobre la compañía, como la espantada de otros en la misma semana, divide las opiniones entre los que creen que las perspectivas de Inditex son igual de poco halagüeñas que las de sus homólogas y los que ven en la cotizada española la tabla de salvación del sector textil. Mientras, las alertas del descenso en las ventas ante la bajada de consumo que está por venir se van multiplicando.
La última la ha dado el grupo irlandés Associated British Food, dueño de la cadena de ropa Primark y de Azucarera. Hace a penas cuatro días la multinacional presentaba resultados y estimaba una caída de sus beneficios, o profit warning, para el próximo año, a raíz de la disminución de la renta disponible de los consumidores como consecuencia de la inflación que se espera. Al anuncio le siguió una consiguiente caída en bolsa del 7,5%, que provocó efecto contagio en Inditex y otras firmas del retail.
Asimismo, la banca de inversión ha estado acometiendo recortes en sus valoraciones a la empresa de la familia Ortega y a diferentes compañías como H&M, Adidas, Moncler, LVMH, Puma o Burberry en los últimos días. El pesimismo se ha apoderado de los analistas y algunos incluso consideran que «se está gestando una tormenta» para los minoristas del comercio.
EXPECTACIÓN ANTE LOS RESULTADOS DEL SEGUNDO TRIMESTRE
Uno de los motivos lo destaca la firma alemana Berenberg, asegurando que el gasto de los consumidores ha sido hasta ahora bastante resistente, lo que ha supuesto una «falsa sensación de seguridad» a los inversores. El panorama es preocupante y la expectación por ver como evolucionan las ventas de grandes y pequeños minoristas es máxima. Inditex será la próxima compañía en desvelar sus cuentas el miércoles 14 de septiembre.
Una cita en la que se espera que la presidenta Marta Ortega y el consejero delegado Óscar García Maceiras den las claves más importantes de la compañía frente al escenario futuro marcado por las tensiones inflacionarias.
En cuanto a lo que esperan los expertos, el consenso de mercado cree que el beneficio neto del segundo trimestre fiscal (de mayo a julio) de Inditex se elevará hasta los 1.000 millones de euros y los ingresos por ventas que cosechará la compañía alcanzarán los 7.834 millones de euros.
CLIMA MÁS DIFÍCIL, PERO MEJOR POSICIONADA QUE SU COMPETENCIA
«Inditex, al igual que otros minoristas de ropa, se enfrenta a un clima de consumo mucho más difícil para la importante temporada de otoño-invierno, ya que las decisiones de los clientes sobre las compras de vestuario después del cierre se ven presionadas por la necesidad de gastar en artículos de primera necesidad«, destacan desde Bloomberg Intelligence en su previa de resultados.
Asimismo, los analistas de la firma creen que, a pesar de las condiciones adversas, la empresa gallega cuenta con una mejor posición frente a sus competidoras. La rápida adopción de la tecnología digital por parte de la empresa le ayudó a sobrevivir y luego a prosperar durante la pandemia, emergiendo en una posición relativa más fuerte, ya que muchos rivales con tiendas tuvieron que cerrar, mientras que los minoristas sólo en línea no tienen flexibilidad para aprovechar la reactivación de las tiendas«, destacan.
«El éxito de Inditex en EE.UU., que ahora representa alrededor del 10% de los ingresos, demuestra que tiene una vía de crecimiento sin construir tiendas (sólo 99 unidades de Zara en EE.UU., el 1,5% del total), aunque sigue apostando por las tiendas. Rusia había sido un mercado de expansión importante, por lo que se necesita una nueva oportunidad para sustituirlo«, concluyen los expertos.