El diseño de producto es uno de los procesos más importantes a la hora de emprender. Es aquel a través del que decidimos qué vamos a poner en el mercado. Además, es un proceso que también hay que abordar incluso en los negocios consolidados, porque la innovación es clave para seguir avanzando.
Sin embargo, al abordar este proceso creativo y de diseño nos damos cuenta de que el desarrollo no siempre es tan rápido ni tan efectivo como esperamos. Esto se debe a que existen importantes obstáculos que debes conocer para poder superarlos.
No hacer pruebas de usabilidad
Antes de que un producto llegue al mercado debemos comprobar que sirve para aquello para lo que ha sido creado. Por eso, a lo largo del proceso de diseño deberían realizarse pruebas de usabilidad.
Los expertos dicen que nunca es demasiado pronto para ellas. Obviarlas puede suponer haber invertido mucho tiempo y esfuerzo en un producto que, al final, no sirve para nada.