Las matriculaciones de coches en España cayeron un 15,7% en el mes de septiembre debido a la situación con los fabricantes de microchips, mientras que el renting contabilizó un incremento de matriculaciones del 34% sobre el mismo periodo de 2020, según cifras de la Asociación Española de Renting (AER).
Las cifras corroboran este cambio de modelo hacia el ‘pago por uso’ en la movilidad debido, entre otras causas, a los cambios en el modo de vida y la preocupación por el medio ambiente, según un análisis de las causas del aumento del renting de Northgate, proveedor de soluciones flexibles de movilidad profesional.
El aumento del ‘pago por uso’ también se ha trasladado a la manera de desplazarnos y, según la consultora Markets and Markets, el mercado de movilidad como servicio (MaaS) alcanzará un volumen de 59.600 millones de euros en todo el mundo en 2030.
Dentro de este escenario de nueva movilidad, el renting implica «menos ataduras, menos gestiones administrativas y ofrece una gestión digital de todos los aspectos relacionados con el vehículo», según Northgate.
De la misma forma, otra de las causas es la falta de ‘chips’, que está afectando al stock de coches nuevos de los principales fabricantes y a los tiempos de producción.
Al adquirir un coche nuevo, los conductores están encontrándose en ocasiones con tiempos de espera de hasta 10 u 11 meses. En el caso de Northgate, por su modelo flexible, ofrecen la entrega de manera inmediata gracias a que se aseguran de tener siempre un stock de vehículos disponibles, del mismo modo se proporciona uno de preentrega si no se tuviera el modelo que desea el usuario.
Asimismo, a raíz de la pandemia, cada vez son más las personas que apuestan por un vehículo propio antes que por uno compartido o incluso el transporte público. Los datos avalan este hecho, en 2020 el uso del vehículo propio aumentó un 52%, según una encuesta realizada por El Parking. Esta es otra de las causas por las que opciones como el renting flexible son más valoradas por los usuarios porque se dispone de un vehículo privado, pero evita las cargas de uno en propiedad.
Por último, otra de las causas son los cambios regulatorios e impulso del vehículo eléctrico. Los cambios en las leyes europeas y españolas provocan «inquietud e incertidumbre» en parte de la población y las empresas, por lo que prefieran adoptar modelos más flexibles que les permitan adaptarse a los cambios más rápidamente. Tanto es así, que empresas de renting como Northgate han aumentado su flota de vehículos eléctricos en casi un 32% con respecto al año pasado para poder satisfacer la demanda de sus usuarios.
Eduardo González de la Rocha, director Comercial de Northgate Renting Flexible, apunta: «Los hábitos de los usuarios, profesionales y particulares están cambiando a pasos agigantados y más aún desde la llegada de la pandemia. De esta forma, vemos no solo cómo aumenta la demanda del renting, sino también la preocupación por el impacto que los vehículos tienen en el medio ambiente. Por ello, las compañías del sector estamos en continua búsqueda de nuevas fórmulas que ofrecen más libertad a los consumidores, además de opciones más sostenibles».