Tanto la cerveza, como el vino, como otras bebidas alcohólicas y no alcohólicas (amén de la alimentación) están muy vinculados al sector hostelero. En concreto, en el caso de la cerveza, la hostelería representa el 67% del total del consumo. Pero llegó la pandemia y la situación, según palabras de Jacobo Olalla, director general de Cerveceros de España”, “está muy mal”.
Cuando llegó el estado de alarma, todo se cerró, y se consumió más en casa. “Pero no compensa. Ni en cantidad, ni en calidad”, matiza Jacobo Olalla. Con la que vino a denominarse como nueva normalidad, cierto que el consumo mejoró. Pero se puede decir aquello de que ha ido perdiendo fuerza.
Los últimos datos así lo corroboran. “Las ventas de los distribuidores de hostelería han caído un 41% en la primera semana de septiembre. El acumulado hasta finales de agosto de los distribuidores a hostelería, menos Canarias, ha caído un 30%. Un porcentaje que ha llegado al 40% en zonas muy dependientes del turismo extranjero, así como en las ciudades que también reciben muchos visitantes como Madrid y Barcelona”, señala Jacobo Olalla. El director general de Cerveceros de España califica este último porcentaje como “dramático”.
Sin embargo, Jacobo Olalla no tira la toalla. Califica el sector como “muy dinámico”, de ahí que esté aplicando fórmulas para darle más presión a las ventas. Entre ellas, el director general de Cerveceros de España indica dos: “está tratando de exportar más, y también ha apostado por el delivery”. Es el caso de Estrella Galicia, que entrega a domicilio, o Mahou San Miguel, que ha llegado a un acuerdo con Glovo. «El contacto con el consumidor es constante, aunque no compensa la caída de las ventas en el canal Horeca», indica Florencio García, Iberia Retail & Petrol Sector Director de Kantar.
LA CERVEZA, PREOCUPADA
Esa exportación de la cerveza tiene una doble componente. Porque se está dando tanto en calidad como en cantidad. Es decir, en volumen y en valor. Y los mercados a los que se está vendiendo más son los que se pueden considerar como tradicionales. Por este orden, Portugal, Reino Unido, China, Francia y Guinea.
Hasta junio, las ventas al exterior se han incrementado entre un 13% y un 14% respecto al mismo periodo del año anterior. Eso son seis millones de hectolitros más. Además, las diferentes compañías están incrementando su inversión en innovación, no sólo ahora, con motivo de la pandemia, sino tiempo atrás. De ahí que estén utilizando más energías limpias, por ejemplo. Asimismo, el 90% de sus aprovisionamientos son locales.
El dinamismo de la cerveza no está reñido con la realidad. Una realidad que indica que, por ejemplo, en Baleares, el nivel de apertura de los establecimientos hosteleros no llega al 60%. “Habiendo menos oferta, la facturación de los distribuidores no llega el 30%”, especifica Jacobo Olalla. Una situación que en Canarias es todavía peor, ya que depende todavía más del turismo alemán.
De ahí que la preocupación del sector de la cerveza esté sobre la mesa de cara al otoño. Y apoyan la petición de medidas financieras y fiscales pedidas por el sector hostelero al Gobierno. “Hay que reducir el IVA y no incrementar los impuestos que gravan el impulso de la hostelería”, concluye el director general de Cerveceros de España.
