El 59,5% de las ventas de vehículos de ocasión registradas en España entre enero y mayo correspondió a turismos propulsados por motores de diésel, pese a caer sus transferencias un 35,8%, hasta 365.363 unidades.
Por su parte, los modelos de gasolina coparon el 38,3% del mercado de segunda mano, bajando un 27,9% respecto al mismo periodo del año pasado, con 235.553 unidades, según datos de Ideauto para la Asociación Nacional de Vendedores de Vehículos a Motor, Reparación y Recambios (Ganvam).
De esta forma, pese a su caída, en unos meses marcados por la crisis del coronavirus, el diésel continúa siendo la fuente de energía más representativa del mercado de ocasión.
«Curiosamente, al compararlos con las preferencias de los compradores de vehículos nuevos, los datos muestran la tendencia contraria. De hecho, el 54,4% de los turismos matriculados hasta mayo correspondió a motores gasolina, mientras que apenas el 27,8% era de diésel», ha indicado Ganvam.
CUESTIÓN DE OFERTA
En este sentido, la asociación atribuye este protagonismo del diésel en el mercado de usados a una cuestión de oferta. «En el mercado de ocasión se vende lo que hay. Como consecuencia de la demonización que ha sufrido el diésel, la inversión en un coche nuevo se orientaba hacia los motores de gasolina y, en paralelo, como consecuencia de esta desinformación y esta pérdida de interés de los conductores, el merado de usados ha ido acumulando stock de diésel al que, para dar salida, ha habido que desposicionar en precio», ha asegurado la directora de Comunicación de Ganvam, Tania Puche.
Entre otros datos, Ganvam ha indicado que en lo que va de año las ventas de usados eléctricos subieron un 26%, aunque solo suponen el 0,2% del total del mercado, con 1.269 operaciones. Por su parte, los híbridos también han ganado protagonismo, con 8.751 unidades transferidas, un 17,6% más.
