Se llama Mahmoud Wael, es egipcio, actualmente tiene ya 20 años pero ha sido el niño más inteligente del mundo, con un coeficiente intelectual de 155, varios puntos por encima de la media de estos superdotados. Te contamos la corta pero curiosa historia del chico más inteligente del mundo y que ya trabajaba para Microsoft pero sigue viviendo en su ciudad natal, El Cairo.
Un niño niversitario con 9 años
Aunque viéndole de niño pasa por la imagen que tenemos de cualquier chaval de su edad, Mahmoud Wael era muy especial, tanto que fue considerado el niño más inteligente del mundo. No es un título sin más. Su matriculación en Informática en la Universidad Americana de El Cairo con 9 años y su increíble capacidad para resolver complejos cálculos matemáticos lo avalaron. Previamente había obtenido varias certificaciones en el área de la tecnología y la informática. No en vano comenzó a programar con 6 años. Su pasión por las matemáticas y también por la informática le han llevado a trabajar ya para el gigante tecnológico Microsoft.
Mahmoud Wael era un niño tímido pero ya había dado alguna entrevista. En una de ellas declaró que su padre fue el que «descubrió mi habilidad a los tres años, cuando resolví una multiplicación de mi hermana» (tiene tres años más que él). Le hicieron unas pruebas y determinaron que su coeficiente era de 155. Desde entonces le apodan «abqarino», que en árabe significa genio. Sin embargo no fue un niño raro ni obsesionado por el conocimiento. Reconocía por entonces en una entrevista que en sus vacaciones se dedica «sólo a jugar, jugar y jugar». A el considerado ‘niño más inteligente del mundo’ le apasiona el fútbol y es seguidor del Barça y de la selección brasileña.
Los sueños de Mahmoud Wael
Mahmoud Wael no sólo destaca en las matemáticas o la informática. Habla inglés, francés, alemán y árabe y quiere aumentar la cuenta. Lo tendrá fácil porque el inglés lo aprendió en tres meses. Su curiosa historia no ha hecho sino comenzar. Su sueño es emular a su compatriota Ahmed Zewail, premio Nobel de Química en 1999 pero en la rama informática. Para ello lleva una vida ordenada que comienza a las seis y media de la mañana para poder compaginar su trabajo con los estudios. A este ritmo lo conseguirá y muy pronto. Ya por el momento tuvo el reconocimiento de Microsoft como el Ingeniero en informática más joven del mundo.
