Las limusinas de lujo de Mercedes-Benz no son baratas, pero basta añadir que una celebritie tiene una de sus vehículos, y las ventas se van a disparar. Incluso superando el doble del precio original.
Ese es exactamente el caso de la Mercedes-Benz S600 Pullman Guard 1995, puesta en venta por un vendedor privado en el sitio web alemán Mobile por la suma de 1.292.740 euros. Por ese precio, podríamos suponer que era propiedad de un famoso actor o cantante, pero no, esta limusina pertenecía al actual presidente ruso Vladimir Putin.
Como es de esperar, la limusina blindada está lujosamente equipada con dos pares de sillones frente a la parte trasera, con acabados de madera y cargados con los aparatos que se esperan de un Mercedes de los años 90. Bajo el capó se encuentra un motor de 6.0 litros V12 que alcanza los 394 caballos de fuerza, pero no esperes que el rendimiento sea demasiado potente considerando cuánto debe pesar. Y eso sin la armadura añadida.
A su favor, sin embargo, la limusina de lujo sólo tiene 15.500 kilómetros marcados en el cuentakilómetros, por lo que puedes estar seguro de que está en buenas condiciones.
Construida en 1995, parece probable que la Pullman sirviese al gobierno antes de que Putin asumiera el cargo de Primer Ministro en 1999. Éste fue ascendido a presidente en 2000, pero no está claro cuánto tiempo estuvo la limusina bajo su propiedad.
A estrenar, el Mercedes habría costado alrededor de 500.000 dólares, así que sería de esperar que el precio bajase perceptiblemente con el tiempo, lo que convierte el precio de 1.3 millones en algo todavía más absurdo.
También vale la pena tener en cuenta la historia notoria de Putin cuando se trata de chóferes. Este año, su conductor de limusina favorito murió en un horrible choque frontal que involucró un BMW Serie 7 en Moscú.
Otros medios de transporte de Vladimir Putin
El presidente ruso, Vladimir Putin, tiene una agenda muy ocupada, pero sus desplazamientos no influirán en el tráfico de la capital y no crearán problemas a los conductores, ya que Putin tiene sus propios medios de transporte, y no todos son coches.
El presidente ruso prefiere, por ejemplo, volar en helicóptero a viajar en coche y lleva varios años usando este tipo de transporte, dejando muy a menudo sus limusinas blindadas en el garaje.
Las mejoras en la cabina VIP del helicóptero Mi-8 fueron una petición de Putin hace ya algunos años. El Mi-8 mejorado es a prueba de sonido, tiene sillones de cuero y un sofá, iluminación personalizada, una televisión enorme y todo tipo de electrodomésticos, desde neveras a cafeteras.
La flota rusa incluye aviones Il-96-300 y Tu-214. El Sukhoi Super jet 100 pronto se unirá a la flota. El equipo también tiene un punto de control aéreo, este avión está equipado con sistemas especiales de comunicaciones, lo que permite al presidente negociar y gestionar las fuerzas nucleares de Rusia en modo cifrado.
Vladimir Putin puede moverse no sólo en el aire, sino también en el agua. El presidente tiene dos yates, tres jets, siete barcos y un catamarán de vela. Estos medios de transporte menos habituales utilizados por el presidente ruso son “regalos” de otras organizaciones nacionales.
