Seguro que te ha pasado más de una vez con varias películas. Antes de su estreno se crea una campaña de promoción brutal. Se habla de ella en prensa, televisión y radio. En medios generalistas o en medios especializados. El director y los actores más importantes conceden entrevistas todo el rato. Y de esta manera se generan una serie de expectativas que suelen acabar en frustración al descubrir que las películas, en lugar de ser obras de arte, eran pufos.
Muchas veces estas expectativas se genera simplemente por los trabajos anteriores del director o del equipo de actores. En cualquier caso, hoy queremos aprovechar la oportunidad para mostrarte una pequeña selección de lo que, a nuestro entender, eran películas que antes de su lanzamiento prometían mucho, pero no estuvieron a la altura. En realidad fueron un pufo. Sigue leyendo si quieres saber cuáles son.
Da 5 Bloods, una de las peores películas de Spike Lee
Expectativa: Spike Lee es uno de los directores con más prestigios de todo Hollywood. Bien es cierto que el director de La última noche ha tenido, tal y como la crítica especializada apunta, altibajos en su carrera como director. Pero tambien es cierto que sus últimas películas dirigidas como Infiltrado KKKlan invitaban a pensar en una recuperación del sus películas en términos de calidad.
Realidad: a pesar de la fuerte apuesta de Netflix por incluir Da 5 Bloods en su catálogo y de su campaña de promoción, esta película no pasará precisamente a la historia por ser una de las mejores de Spike Lee. Tal y como la crítica apunta, es una cinta sin ideas y con unos personajes que no tienen la profundidad que se ha visto en otras obras del director. Vamos, que fue un auténtico pufo.
Capone, de las peores películas de Josh Trank
Expectativa: reconozcámoslo, todo lo que rodea a Al Capone hace que se estimulen los sentidos y que se ponga a volar la imaginación entre el mito del personaje y la realidad de su figura. Por eso, el anuncio del rodaje de la película Capone despertó el entusiasmo de los aficionados al séptimo arte. Porque saben que la historia del personaje es muy potente y que de a poco que se interpretase de manera correcta podría ser un pelotazo en las salas de medio mundo.
Realidad: Pero resultado acabó siendo una de las peores películas del director Josh Trank. Y eso que según la crítica especializada, el listón tampoco estaba muy alto (Chronicle aparte). Así que ya es decir.
Enola Holmes, de Harry Bradbeer
Expectativa: los fans de Stranger Things estallaron de júbilo cuando supieron que actriz que interpreta a Eleven, Millie Bobby Brown, por fin aparecería en otro proyecto. Y además eso generó mucha expectación. Pero sobre todo la levantó al conocerse que la película, estaría centrada, ni más ni menos, que en la hermana de Sherlock Holmes. Parecía que ganaría el Oscar incluso antes de estrenarse.
Realidad: sin embargo el resultado no fue para nada lo esperado. Uno de los motivos por los que se considera que una de las peores películas del año es por la decisión del director de incluir una voz en off. Además peca de aportar un discurso político bastante simple y reduccionista, tal y como la crítica apunta.
Explota explota, de Nacho Álvarez, una de las películas más decepcionantes del año
Expectativa: ¿te imaginas un musical de producción española protagonizado por Natalia Millán y Fernando Tejero? Suena bien, ¿verdad?. ¿Y te imaginas que ese musical se centrase en el cancionero de Rafaella Carrà? Suena mejor aún. Pues a todo eso añádele un mensaje sociopolítico y comprenderás por qué el estreno de esta película de Nacho Álvarez levantó tantas expectativas
Realidad: Las sensaciones que los espectadores se encontraron el día del estreno poco tienen que ver con la idea que tenían de esta película. Resulta que aunque el reparto era muy potente, varios actores no estuvieron a la altura. La crítica, sobre todo, señala a Verónica Echegui y a Fernando Tejero. Además, la cinta se centra, según muchos, en exceso en las prácticas de censura de TVE del pasado.
Mank, una de las películas más decepcionantes de David Fincher
Expectativa: la simple presencia de David Fincher en la dirección de una cinta ya crea de por sí una expectativa que, todo hay que decirlo, casi siempre suele satisfacerse. El club de la Lucha o El curioso caso de Benjamin Button son solo algunas de sus mejores películas.
Realidad: si bien esta película tampoco se puede calificar de decepcionante, no es tan redonda como se podría esperar si la dirige David Fincher. Tal y como indica la crítica especializada, su gran fallo es la dificultad para transmitir el mensaje a la audiencia.
Otra vuelta de tuerca, de Floria Sigismondi
Expectativa: Floria Sigismondi es una reputada directora de series de televisión. Es responsable de varios capítulos de series tan exitosas como El cuento de la criada o American Gods. Y si además, en este caso, le tocaba una adaptación de la novela de Henry James, las expectativas eran muy altas.
Realidad: Sin el embargo el resultado es una película muy abstracta que o puede evitar compararse con las otras adaptaciones de la novela. Vamos, todo un pufo.