El origen de los acueductos se remonta a las civilizaciones más antiguas de Oriente Medio, aunque fueron los romanos quienes llenaron el paisaje Mediterráneo de estas grandes construcciones. España fue uno de los países donde el Imperio Romano levantó más acueductos para transportar el agua desde los ríos cercanos.
Algunos tenían tal envergadura que la autoría de su construcción se achacaba al diablo. Con el tiempo dejaron de utilizarse, y muchos de ellos se quedaron en estado ruinoso, dejando ver tan solo una parte de lo que fue su esplendor.
EL DE SEGOVIA: EL MÁS FAMOSO

En la actualidad pueden visitarse algunos de ellos, unos mejor conservados que otros, pero siempre impresionantes, desafiando al tiempo. El más conocido y el que más visitas atrae por su excelente estado de conservación es el de Segovia, que además es Patrimonio de la Humanidad desde 1985. Conserva 15 kilómetros de canales, aunque no todos son visibles, que se utilizaron en su día para conducir el agua desde el arroyo de la Acebeda hasta la propia Segovia. Cuenta con 158 espectaculares arcos que han sobrevivido al tiempo.
El rey Al Mamún quiso tirarlo abajo, pero solo logró derribar 36 argos. Alfonso VI trató de reutilizar sus piedras para hacer unas murallas y más tarde, los Reyes Católicos lo reconstruyeron. Sin embargo, hay más acueductos en España casi igual de bonitos que merece la pena visitar.
ACUEDUCTO DE TARRAGONA

Tarragona es una región llena de historia, desde que los romanos la bautizaron como Tarraco. Allí se yerguen monumentos de gran valor como el anfiteatro remando, uno de los más bonitos de la Península, mirando directamente la Mediterráneo. También cuenta con un bellísimo acueducto, que igual que el de Segovia, es Patrimonio de la Humanidad.
Se le conoce como acueducto de Les Ferreres o Pont del Diable. Era parte de una compleja red de canalización que suministraba de agua a la ciudad desde el río Francolí. El ramo de las Ferreres mide unos 217 kilómetros de largo, y se encuentra a 4 km de la capital. Alcanza una altura de unos 27 me y su construcción es del siglo I.
ACUEDUCTO DE PEÑA CORTADA

En Valencia, entre los municipios de Chelva y Calles se encuentra otra de las construcciones más impresionantes de España. Tiene la característica de que una gran parte de su recorrido está excavada en la propia roca. Es uno de los monumentos romanos más importantes de la Comunidad Valenciana y ha sido declarado Bien de Interés Cultural.
Tiene unos 28 kilómetros de recorrido, pasando sobre desfiladeros que provocan vértigo con solo observarlos. El Puente de la Rambla de Alcotas, y los tramos que cruzan Peña Cortada y el Barranco de la Cueva del Gato son los más espectaculares. La construcción es del siglo I d.C y se cree que se construyó para llevar agua hasta la ciudad de Sagunto.
ACUEDUCTO DE MÉRIDA

Mérida es otra de las ciudades con grandes vestigios de cultura romana, así que tampoco podía quedarse sin su propio acueducto. El Acueducto de los Milagros recibió ese nombre porque se mantenía en pie después de 2.000 años de su construcción, y parte desde el embalse de Proserpina, a 12 km de la ciudad de Mérida.
Una gran parte del tramo recorre una galería subterránea. La parte mejor conservada en el exterior es la que se encuentra en la entrada de la ciudad por el Cerro del Calvario, encima del río Albarriego, con unos 25 metros de altura. También es del siglo I y cuenta con simbología grabada para proteger a la ciudad.
ACUEDUCTO DE ALMUÑÉCAR

Otro de los acueductos más bonitos de España es el de Almuñecar, en Granada, aunque en este caso ya no está tan completo como los anteriores. Sin embargo, los restos que se mantienen en pie nos dan una idea clara de lo que llegó ayer en su momento.
Tenía siete kilómetros de longitud con siete tramos diferenciados. Hoy día se conservan 19 arcos del tercer tramo, desde La Vegueta hasta Torrecuevas.
ACUEDUCTO DE ALBARRACÍN-CELLA

Si tiramos al norte hasta la provincia de Teruel, también podemos admirar una impresionante construcción de la época romana. Tiene una longitud de 25 kilómetros y se considera uno de los monumentos romanos más importantes de Aragón.
Su construcción es del siglo I y se dejó de utilizar dos siglos después. Incluso aparece mencionado en el Poema del Mío Cid. Sus tramos se fueron descubriendo progresivamente desde los años 80 hasta 2008, y se pueden visitar al completo.
ACUEDUCTO DE RAMBLA DE CARCAUZ

En la provincia de Almería, entre Vicar y Félix, se encuentra un sistema de acequias y acueductos de origen romano que hoy día forman un conjunto monumental de gran valor artístico e histórico. Se trata de tres acueductos, siendo el más grande el de Carcauz, o el Acueducto de los veinte ojos que estuvo funcionando ni más ni menos que hasta principios del siglo XX.