Cada vez los calores veraniegos llegan antes y con ello el tener que tirar de ventiladores y aire acondicionado. Cuando aún queda un mes de primavera, las temperaturas en gran parte de España son ya propias de julio o agosto, y no parece que ya vayan a irse. Así que más vale tirar de aire acondicionado los que lo tienen, o instalar uno los que no, porque todo indica que cada año España será más calurosa.
Pero hay un problema, y gordo: el coste. No del aparato en sí, sino de su consumo, más aún con la inflación y la subida exagerada de la electricidad en los últimos meses. Muchos hogares tiemblan ante la factura que llegará en estos meses, porque además se puede prescindir de calefacción y «apañarse» abrigándose bien, con edredones, etc, pero del calor en la casa no hay manera, y no queda otra que rendirse y tirar de aire acondicionado de día y de noche, con esas noches tropicales cada ve más frecuentes. Sepamos cuánto nos cuesta esta lucha contra el calor.
¿CUÁNTO CONSUME EL AIRE ACONDICIONADO EN LA FACTURA DE LA LUZ?
Es decir, no sólo cuánto sino el porcentaje de aire acondicionado en el total de gasto eléctrico de la casa. Lo cierto es que es complicado de calcular, pero si nos podemos hacer una idea. Para empezar basta con comparar lo que gastas en invierno y en verano, ya que con el calor lo que usamos respecto al resto de meses es el aire acondicionado, salvo que lo usemos en invierno como bomba de calor.
De todas formas, el consumo del aire acondicionado dependerá de la cantidad de frigorías que sean necesarias para que la máquina enfríe la casa. Veamos un ejemplo práctico…
UN CASO TIPO
Partimos de la situación que de media, se precisan entre 100 y 150 frigorías por metro cuadrado. Por tanto, para enfriar un espacio de 30 metros cuadrados se necesitarían entre 3.000 y 4.500 frigorías. Pues bien, entre estas cifras habría un consumo por hora de 1,320 kw y 1,980 kw, respectivamente.
El siguiente paso es multiplicar el consumo del aparato que hayamos elegido por el precio del kWh. Si, por ejemplo, se ha optado por un aparato de 3.000 frigorías, ya se sabe que el consumo es de 1,320 kWh/h. Como referencia se han tomado precios del pasado 20 de abril, que fue de 0,08410 euros/kWh.
Veamos lo que supone en la factura…
LO QUE GASTA EL AIRE ACONDICIONADO SEGÚN EL EJEMPLO
Así, en el caso concreto de los 1,320 kWh/h, lo multiplicaríamos por 0,08410 euros/kWh o el precio que haya en ese momento. En este caso nos daría 0,11 euros por hora lo que gastaría el aire acondicionado, con lo que sabiendo la factura total se puede saber fácilmente el tanto por ciento que supone de gasto este aparato que tanto tendremos que usar de aquí a septiembre.
Pero hay otra forma de calcularlo por total de horas: si utilizas un aparato de 3.000 frigorías (que consume 1,320 kWh) durante 8 horas, el consumo total será de 10,56 kWh (1,320 x 8). Y si el precio medio del kWh se sitúa alrededor de los 0,11 euros, la cuenta es simple: 10,56 x 0,11: 1,16 euros, que será lo que te suponga, cada día, usar el aparato de aire acondicionado durante 8 horas diarias.
¿AIRE ACONDICIONADO FIJO O PORTÁTIL?
Muchos optan por ver si ahorran gasto instalando un aire acondicionado portátil o bien uno fijo. Veamos las diferencias entre ellos. El fijo es el sistema preferido para refrescar la casa porque hace su trabajo muy bien y mantiene las bajas temperaturas a lo largo del tiempo. Además, sirven para varias habitaciones, dependiendo del tamaño de las mismas y la potencia del aire acondicionado. Incluso, es posible instalar sistemas de apoyo para que circule mejor el aire frío.
Lo mejor del aire acondicionado es su capacidad para enfriar sin hacer apenas ruido. El mantenimiento es bastante sencillo, así como también la reparación en caso de ser necesario. Es relativamente fácil de instalar, y hay varios modelos para las características que busque cada uno.
LA OPCIÓN PORTÁTIL
Es un equipo similar al anterior con la capacidad para enfriar una instancia en pocos minutos. La principal diferencia es la portabilidad de este modelo, el cual se desplaza fácilmente de una habitación a otra porque se coloca directamente en el suelo. Además, la única conexión que necesita es eléctrica.
Es considerablemente menos potente que un aire acondicionado fijo, por lo que se recomienda para enfriar bien espacios de hasta 50 m2. Además, es un sistema bastante ruidoso. Es una buena opción para estancias pequeñas y personas con un bajo presupuesto.
Pero hay otras opciones menos conocidas, a la última y con técnicas novedosas que también trae en muchos casos, en principio, un mayor ahorro…
CLIMATIZADORES POR EVAPORACIÓN
La forma de enfriar es bastante simple, pero efectiva: un ventilador se encarga de pasar el aire caliente de la habitación a través de un filtro de almohadillas con agua fría. El aire se evapora al entrar en contacto con temperaturas más bajas y sale más fresco por el otro lado de la máquina.
Es un sistema similar al de los aires acondicionados, pero mucho más sencillo. Su efectividad aumenta a medida que sea capaz de absorber más aire caliente y más grandes sean los depósitos con agua fría. Lo bueno de este mecanismo es que apenas necesita una toma de corriente para funcionar, y es sumamente barato. Eso sí, la forma de funcionar requiere que las habitaciones estén ventiladas para que el aire circule constantemente.
NEBULIZADORES, OTRA OPCIÓN AL AIRE ACONDICIONADO
Son sistemas de climatización para exteriores, ideales para enfriar jardines y terrazas. El nebulizador pulveriza el agua en gotas que se evaporan en contacto con el aire para absorber el calor del ambiente. El aire tiene que circular para que sea realmente efectivo este sistema, y baje su temperatura hasta 10°C.
Una ventaja interesante de este sistema es que purifica el ambiente al eliminar el polvo en suspensión. Además, apenas consume energía y el único requisito para que siga funcionando es llenarlo con 2 o 3 litros de agua cada hora.
¿CÓMO ELEGIR EL MEJOR SISTEMA DE CLIMATIZACIÓN?
Un hogar promedio español gasta casi 1.000 euros al año en energía, de acuerdo con el Instituto para la Diversificación y el Ahorro de la Energía del Ministerio para la Transición Ecológica (IDAE). ¿Realmente tu sistema de refrigeración es apropiado, o estás consumiendo más energía de la necesaria? Pues resumamos qué opciones tienes y cuál es la mejor, teniendo en cuenta a climatología del entorno, la hermeticidad y aislamiento de la vivienda, la cantidad y el tamaño de las estancias.
LAS RECOMENDACIONES PARA AHORRAR FRENTE AL AIRE ACONDICIONADO O CON ÉL
Usar sistemas integrales, de manera que sean útiles para enfriar en el verano y mantener una temperatura agradable en invierno.
Incorporar sistemas de regulación que te ayuden a saber el estado de los equipos y la temperatura de las estancias, además de poder controlarlos desde el móvil.
Mantener una buena circulación ayuda a que el aire se renueve constantemente y esté libre de contaminación.
Acudir al asesoramiento profesional, ya que las necesidades de cada hogar son bastante diferentes.
Pensar en lo que necesitas realmente te va a evitar gastar dinero en algún aparato demasiado costoso que no sea necesario.
Disminuir un poco la potencia de los sistemas para que no trabajen en exceso, se extienda su vida útil y no se gaste tanta energía.