‘Sueños de libertad’: Andrés amenaza con contar la verdad sobre el asesinato de Clotilde

Las cosas se complican cada vez más para los protagonistas de ‘Sueños de libertad’. Con varios frentes abiertos, Begoña se enfrenta a un marido infiel y agresivo al que se siente atada, mientras Andrés está siendo traicionado por su propio padre. La situación no es mucho mejor para los trabajadores de la tienda y la fábrica.

Nada parece ir bien para los personajes de ‘Sueños de libertad’. Sus crecientes problemas han cautivado a millones de espectadores que los acompañan cada tarde de la mano de Antena 3. Resumimos lo ocurrido en los últimos capítulos y avanzamos lo que podrás ver en la entrega de hoy.

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‘Sueños de libertad’: Begoña no puede soportar a Jesús

Una de las muchas cualidades que caracterizan a ‘Sueños de libertad’ son sus inesperados giros de guion. Tras renunciar a su amor por Andrés, Begoña se acercó a su marido Jesús, llegando a establecer una relación de confianza. Todo se rompió cuando Begoña descubrió a su marido besando a Elena, su secretaria.

Jesús le aseguró que había sido Elena quien se había abalanzado, una versión que le obligó a corroborar. Además, Jesús relegó a Elena al puesto de encargada de almacén, algo que no le hizo ni pizca de gracia ni a ella ni a Marta, ya que ahora la tendría más cerca.

Elena decidió vengarse presentándose en el dispensario para contarle a Begoña que ella y su marido se seguían acostando. Cuando Begoña le pidió explicaciones a Jesús, este acusó a Elena de estar trastornada. Tras ello fue en busca de su exsecretaria, la abofeteó y la despidió.

Begoña pudo ver las marcas de la bofetada en la cara de Elena y le preguntó a su marido si la había pegado. Él lo negó, pero ella, harta de las mentiras de su esposo, respondió cogiendo una almohada y saliendo del dormitorio dando un portazo. Al día siguiente le anunció que, al menos de momento, dormirá en el cuarto de Julia. Un detalle del que se enteró María por boca de Gema, su confidente en la casa.

Mientras tanto, en ‘Sueños de libertad’, Andrés se ha visto obligado a seguir adelante con su compromiso con María. La culpa la tiene Damián, pues al saber que su hijo no quería casarse, organizó un miserable plan. Sobornó al notario para que le entregara a Andrés una falsa carta escrita supuestamente por el padre de María antes de morir, en la que le pedía que cuidara de su hija.

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